Roban en casa de Paolo Rossi durante su funeral M

Mientras Italia y el mundo lloraban la pérdida de Paolo Rossi en su funeral, unos ladrones entraron en su casa para robar todo tipo de joyas, según la agencia 'ANSA'.

Mirko Calemme

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Una noticia vergonzosa aumentó esta noche el dolor por la muerte de Paolo Rossi. En el día de los funerales, mientras el país lloraba por uno de sus héroes deportivos más queridos, entraron a robar en la casa del exdelantero en el pueblo de Bucine, en Toscana. Según la agencia 'ANSA', una vez regresada de Vicenza, donde tuvieron lugar los funerales, Federica Cappelletti encontró su casa patas arriba. Entre los objetos que faltaban, uno de los relojes de Paolo y dinero en efectivo (unos cien euros), aunque todavía se desconoce si los ladrones del hurto (que entraron a través de una ventana) lograron llevarse algo más. La noticia fue publicada por todos los periódicos italianos y, obviamente, causó una enorme indignación.

Mientras, Italia le dio su último saludo a Paolo Rossi. El funeral del histórico exdelantero, fallecido a los 64 años, tuvo lugar en la catedral de Vicenza y emitido por la televisión pública. Sus excompañeros en el Mundial 1982, Marco Tardelli, Giancarlo Antognoni, Antonio Cabrini y Fulvio Collovati, fueron los que llevaron el ataúd, entre los aplausos de miles de personas que acudieron al exterior de la iglesia vitoreando "¡Paolo, Paolo!", y mostrando pancartas que le recordaban.

El presidente de la Federación Italiana de Fútbol, Gabriele Gravina, puso sobre el féretro una camiseta de la Nazionale con su dorsal, el 20. Entre los 250 invitados a la ceremonia hubo muchos históricos del deporte rey italiano: Roberto Baggio, Bruno Conti, Roberto Bettega, entre otros. "Espero que Paolo haya podido ver todo este cariño", dijo su mujer, Federica Cappelletti, "hablar de él y recordarle me duele, pero es justo así: Paolo siempre ha sido de la gente". Tras la capilla ardiente y el funeral en Vicenza, su cuerpo pasará por Perugia, donde el punta jugó un año de su carrera, con otra ceremonia privada en el estadio Curi antes de ser incinerado.