La sombra del quirófano planea sobre Piqué: martes más pruebas y miércoles cita con Cugat

Mientras que en el club apuestan por un método conservador, el central catalán deja en ‘stand by’ su decisión final, a la espera de una cumbre con el prestigioso cirujano.

Javier Miguel

As

Gerard Piqué aún no sabe a día de hoy si pasará o no por el quirófano para solucionar su lesión en la rodilla derecha. Por ahora, los médicos del club, encabezados por Lluís Til, le han recomendado seguir un método conservador, amparándose en el caso reciente del ex valencianista Rodrigo, que en el 2018 sufrió una lesión similar, y que en cuatro meses ya estaba jugando. Sin embargo, Piqué no tomará una decisión final hasta consultar con el cirujano Ramon Cugat, con el que tiene ya una visita programada para el próximo miércoles, según ha podido saber AS.

Antes de esta consulta, el jugador será sometido este martes a nuevas pruebas para seguir acotando más el diagnóstico final. Y es que según ha podido saber AS, el parte médico que ha ofrecido el club ha aligerado en algunos detalles la realidad de la lesión. En el comunicado se aseguraba que Piqué sufría "un esguince grado tres en el ligamento lateral interno y una lesión parcial del ligamento cruzado posterior", cuando lo cierto es que el ligamento lateral interno está prácticamente roto mientras que el cruzado posterior puede estar roto completamente.

Evidentemente la decisión será muy traumática en cualquiera de los casos. Si al final, Piqué hace caso de los servicios médicos del club, el tiempo de recuperación no bajaría de los tres meses, pudiendo alcanzar hasta los cuatro. Si finalmente se opera, el central habría dicho adiós a la temporada, ya que el tiempo mínimo fijado en estos casos sería de unos seis meses.

Ahora mismo la obsesión de Piqué es salvar perfectamente los dos ligamentos y tener una rodilla estabilizada para poder seguir jugando al máximo nivel al menos dos años más. Para conseguirlo, se ha de recuperar sobre todo del ligamento interno, que sustenta buena parte de las articulaciones de la rodilla.

Así pues, habrá que esperar hasta el miércoles, tras la visita de Cugat, para saber el alcance real de la lesión y si finalmente ha de pasar por el quirófano o no.