La fórmula para matar al coronavirus en tres semanas de un profesor de Harvard
Michael Mina propone un sistema de pruebas domésticas, con un funcionamiento parecido al del test de embarazo, que podría ser muy efectivo contra el virus.
As.com
Michael Mina, profesor asistente de Epidemiología en la Escuela de Salud Pública TH Chan de Harvard, ha propuesto un sistema revolucionario para acabar con el coronavirus en tres semanas. Como ha explicado a los medios, bastaría con que las personas se hiciesen test masivos y rápidos en casa cada dos o tres días, con un sistema parecido al de una prueba de embarazo, recogiendo un poco de saliva o mucosa nasal, y con el resultado disponible en 15 minutos. Según el profesor, la fabricación de estas pruebas rápidas, que tendrían un precio de un dólar por unidad, está al alcance de la industria.
Este sistema sería además muy útil para no tener que realizar el rastreo de contactos de las personas infectadas por la COVID-19, pero, para su funcionamiento, sería necesaria una autorización administrativa de la que no se dispone. El elemento que motiva a esta propuesta es acortar los tiempos, ya que es más importante la rapidez y la cantidad de las pruebas que la fiabilidad de estas.
El sistema de PCR ha fallado
Sin duda la capacidad de detección de la enfermedad por parte de los sistemas sanitarios ha aumentado mucho respecto del principio de la crisis pandémica, y en este momento hay pruebas disponibles para todos aquellos que tengan síntomas. Sin embargo, Mina denuncia que, incluso de esta manera, se llega tarde contra el virus. “Cuando se detecta un positivo, los servicios sanitarios ya no pueden hacer mucho para alcanzar el primer objetivo: atajar los rebrotes”, ha afirmado el profesor de Harvard.
Además, las PCR identifican a los contagios cuando han empezado a infectar, lo que quiere decir que es probable que haya contagiado a otras personas. A pesar de que actualmente se han acortado mucho los plazos para tener el resultado de estas pruebas, que ahora se conocen en 24 o 48 horas, es necesario ser más rápido en la lucha contra el virus.
Michael Mina, profesor asistente de Epidemiología en la Escuela de Salud Pública TH Chan de Harvard, ha propuesto un sistema revolucionario para acabar con el coronavirus en tres semanas. Como ha explicado a los medios, bastaría con que las personas se hiciesen test masivos y rápidos en casa cada dos o tres días, con un sistema parecido al de una prueba de embarazo, recogiendo un poco de saliva o mucosa nasal, y con el resultado disponible en 15 minutos. Según el profesor, la fabricación de estas pruebas rápidas, que tendrían un precio de un dólar por unidad, está al alcance de la industria.
Este sistema sería además muy útil para no tener que realizar el rastreo de contactos de las personas infectadas por la COVID-19, pero, para su funcionamiento, sería necesaria una autorización administrativa de la que no se dispone. El elemento que motiva a esta propuesta es acortar los tiempos, ya que es más importante la rapidez y la cantidad de las pruebas que la fiabilidad de estas.
El sistema de PCR ha fallado
Sin duda la capacidad de detección de la enfermedad por parte de los sistemas sanitarios ha aumentado mucho respecto del principio de la crisis pandémica, y en este momento hay pruebas disponibles para todos aquellos que tengan síntomas. Sin embargo, Mina denuncia que, incluso de esta manera, se llega tarde contra el virus. “Cuando se detecta un positivo, los servicios sanitarios ya no pueden hacer mucho para alcanzar el primer objetivo: atajar los rebrotes”, ha afirmado el profesor de Harvard.
Además, las PCR identifican a los contagios cuando han empezado a infectar, lo que quiere decir que es probable que haya contagiado a otras personas. A pesar de que actualmente se han acortado mucho los plazos para tener el resultado de estas pruebas, que ahora se conocen en 24 o 48 horas, es necesario ser más rápido en la lucha contra el virus.
