Mourinho se impone en el norte de Londres
Victoria del Tottenham por 2 a 1 frente al Arsenal. Lacazette adelantaba a los 'gunners', Son firmaba el empate y Alderweireld completaba la remontada.
Alberto Muñoz
As
Dos tercios de la posesión, más disparos, mejor porcentaje de acierto en el pase… y, sin embargo, quien terminó llevándose los tres puntos no fue el equipo de Arteta, aprendiz de Guardiola, sino el Tottenham de José Mourinho. El portugués puede no estar haciendo una buena primera temporada en los spurs, pero demuestra una motivación extra cuando se enfrenta al estilo de juego del catalán. Una vez más, los suyos fueron capaces de utilizar el toque de su rival en su propio beneficio, y, en este caso, teniendo en cuenta las evidentes carencias de la defensa del Arsenal, fue aún más evidente. Una victoria que deja atrás al máximo rival y con pocas opciones de clasificarse incluso para la Europa League, un palo muy duro tras un buen regreso de los gunners tras el parón por el coronavirus.
Teniendo en cuenta que el norte de Londres tendría que haber acogido hoy la final de la Eurocopa, el derbi más caliente de la capital era el mejor sustitutivo que se podía ofrecer. Aunque ninguno de los dos equipos haya firmado su mejor temporada, el encuentro fue, aunque sin público, digno de lo esperado. Mucha intensidad por parte de ambos, ocasiones y, sobre todo, golazos como el que marcó Lacazette prácticamente nada más comenzar el partido. Tras una buena presión de Xhaka sobre Aurier, el francés mandó un misil imparable a la escuadra de Lloris, al que no le valió de nada el esfuerzo.
Los gunners, sin embargo, siguen empeñados en disparar contra su propio pie prácticamente cada partido, y acto seguido una mala cesión de Kolasinac sobre David Luiz, al que pilló a contrapié, propició un mano a mano de Son para devolver las tablas al marcador. Tablas que podrían haberse roto pronto si el potentísimo disparo de Davies a la escuadra no lo hubiese desviado, con la yema de los dedos, un Emiliano Martínez que está rindiendo cada vez que tiene que ponerse los guantes. El trallazo a la escuadra lo devolvió Aubameyang sobre la hora de juego, aunque en esta ocasión fue prácticamente desde el balcón del área pequeña.
El problema, y como se ha visto en casi todos los partidos tras el parón por la pandemia, es que la falta de ritmo, las altas temperaturas, hoy sí, y la humedad, hicieron que el ritmo bajase mucho en la segunda mitad, y no por falta de actitud de los jugadores. Eso se notó, por ejemplo, en que tanto Aubameyang como Kane fueron dos de los jugadores que menos tocaron la pelota, muestra de lo complicado que es para los equipos atacar en el tramo final.
Eso provoca que las acciones a balón parado cobren especial importancia y así lo entendieron los futbolistas del Tottenham, que aprovecharon uno de los pocos córneres del encuentro para que Alderweireld cabecease impecablemente el balón al fondo de la red.
Bournemouth 4-Leicester 1
El Leicester City ha comprometido su presencia en la próxima edición de la Liga de Campeones al caer ante el Bournemouth (4-1), en un partido que llegó a ir ganando.
Los 'Foxes' se adelantaron por medio de Jamie Vardy, que lleva ya 23 tantos en liga, pero el Bournemouth, que está luchando por no descender, dio la vuelta al resultado en la segunda parte, y acabó jugando contra un Leicester con diez jugadores. Junior Stanislas, de penalti, y Dominic Solanke, apenas dos minutos después, propiciaron la remontada de un Bournemouth, que se encontró además con el regalo de la expulsión de Caglar Soyuncu.
Ya en los últimos minutos Jonny Evans se marcó en propia puerta y Solanke hizo su doblete dejando el partido listo para sentencia, confirmando el mal momento que atraviesa el cuadro de Brendan Rodgers. El Leicester ha pasado de luchar por el segundo puesto con el Manchester City a no tener nada clara su participación en la próxima Champions. Son cuartos en estos momentos, con 59 puntos, uno menos que el Manchester United, que se medirá el lunes al Southampton.
El Bournemouth no se da por vencido en la lucha por permanecer en la Premier League, y es décimo octavo con 31 puntos, a tres de distancia del Watford.
As
Dos tercios de la posesión, más disparos, mejor porcentaje de acierto en el pase… y, sin embargo, quien terminó llevándose los tres puntos no fue el equipo de Arteta, aprendiz de Guardiola, sino el Tottenham de José Mourinho. El portugués puede no estar haciendo una buena primera temporada en los spurs, pero demuestra una motivación extra cuando se enfrenta al estilo de juego del catalán. Una vez más, los suyos fueron capaces de utilizar el toque de su rival en su propio beneficio, y, en este caso, teniendo en cuenta las evidentes carencias de la defensa del Arsenal, fue aún más evidente. Una victoria que deja atrás al máximo rival y con pocas opciones de clasificarse incluso para la Europa League, un palo muy duro tras un buen regreso de los gunners tras el parón por el coronavirus.
Teniendo en cuenta que el norte de Londres tendría que haber acogido hoy la final de la Eurocopa, el derbi más caliente de la capital era el mejor sustitutivo que se podía ofrecer. Aunque ninguno de los dos equipos haya firmado su mejor temporada, el encuentro fue, aunque sin público, digno de lo esperado. Mucha intensidad por parte de ambos, ocasiones y, sobre todo, golazos como el que marcó Lacazette prácticamente nada más comenzar el partido. Tras una buena presión de Xhaka sobre Aurier, el francés mandó un misil imparable a la escuadra de Lloris, al que no le valió de nada el esfuerzo.
Los gunners, sin embargo, siguen empeñados en disparar contra su propio pie prácticamente cada partido, y acto seguido una mala cesión de Kolasinac sobre David Luiz, al que pilló a contrapié, propició un mano a mano de Son para devolver las tablas al marcador. Tablas que podrían haberse roto pronto si el potentísimo disparo de Davies a la escuadra no lo hubiese desviado, con la yema de los dedos, un Emiliano Martínez que está rindiendo cada vez que tiene que ponerse los guantes. El trallazo a la escuadra lo devolvió Aubameyang sobre la hora de juego, aunque en esta ocasión fue prácticamente desde el balcón del área pequeña.
El problema, y como se ha visto en casi todos los partidos tras el parón por la pandemia, es que la falta de ritmo, las altas temperaturas, hoy sí, y la humedad, hicieron que el ritmo bajase mucho en la segunda mitad, y no por falta de actitud de los jugadores. Eso se notó, por ejemplo, en que tanto Aubameyang como Kane fueron dos de los jugadores que menos tocaron la pelota, muestra de lo complicado que es para los equipos atacar en el tramo final.
Eso provoca que las acciones a balón parado cobren especial importancia y así lo entendieron los futbolistas del Tottenham, que aprovecharon uno de los pocos córneres del encuentro para que Alderweireld cabecease impecablemente el balón al fondo de la red.
Bournemouth 4-Leicester 1
El Leicester City ha comprometido su presencia en la próxima edición de la Liga de Campeones al caer ante el Bournemouth (4-1), en un partido que llegó a ir ganando.
Los 'Foxes' se adelantaron por medio de Jamie Vardy, que lleva ya 23 tantos en liga, pero el Bournemouth, que está luchando por no descender, dio la vuelta al resultado en la segunda parte, y acabó jugando contra un Leicester con diez jugadores. Junior Stanislas, de penalti, y Dominic Solanke, apenas dos minutos después, propiciaron la remontada de un Bournemouth, que se encontró además con el regalo de la expulsión de Caglar Soyuncu.
Ya en los últimos minutos Jonny Evans se marcó en propia puerta y Solanke hizo su doblete dejando el partido listo para sentencia, confirmando el mal momento que atraviesa el cuadro de Brendan Rodgers. El Leicester ha pasado de luchar por el segundo puesto con el Manchester City a no tener nada clara su participación en la próxima Champions. Son cuartos en estos momentos, con 59 puntos, uno menos que el Manchester United, que se medirá el lunes al Southampton.
El Bournemouth no se da por vencido en la lucha por permanecer en la Premier League, y es décimo octavo con 31 puntos, a tres de distancia del Watford.
