F1 | CLASIFICACIÓN / Bottas roba la pole a Hamilton mientras Ferrari da escalofríos
Primera línea para Mercedes, Verstappen será la resistencia y Norris logró un meritorio cuarto. Sainz, octavo que sabe a poco. Desastre para Vettel, fuera en Q2.
Jesús Balseiro
As
Valtteri Bottas celebró la pole, sin saberlo, haciendo motocross, saltando por la grava del Red Bull Ring y tirando al traste su último intento de la Q3. No importó, con el primero dejó fuera de juego a un Lewis Hamilton que había liderado todas las sesiones del GP de Austria hasta llegar a la definitiva, la que configura la parrilla. El finlandés, correoso al empezar las campañas, deja un primer aviso para su laureado compañero, el campeón, que se quedó a doce milésimas. En cualquier caso, la conclusión más rápida tras la primera clasificación de la temporada es que debe llegar algo más grave que una pandemia para poner en peligro la hegemonía de su Mercedes.
La nota positiva es que hay resistencia: Max Verstappen fijó el tercer mejor registro con el Red Bull Honda y aunque se quedó a medio segundo en el intento definitivo, tiene una ventaja importante para la carrera: empezará con el neumático medio porque fue el que utilizó durante la segunda sesión de clasificación, al contrario que el resto de la parrilla que optó por el blando. Podrá seguir una estrategia ventajosa evitando una goma que se degradará muy rápido al inicio por culpa del calor en Spielberg. Así ganó a Leclerc hace un año, con ventaja de ruedas en el sprint final de la carrera. Hay que recurrir a las estrategias más insospechadas para intentar plantar cara a este Mercedes superlativo.
Vaso medio vacío para Carlos Sainz
Carlos Sainz se situará octavo en la parrilla y el vaso se ve medio vacío porque prometía más, de hecho no mejoró su crono cuando montó los neumáticos a estrenar. Su compañero, Lando Norris, saldrá cuarto tras ‘Mad Max’ con una vuelta final inspiradísima que le sirvió para adelantar incluso al Red Bull de Alex Albon. Se colaron por delante del madrileño también Charles Leclerc y Sergio Pérez, si bien pudo contener al potente Racing Point de Stroll y al Renault de Ricciardo. El McLaren MCL35 es una buena herramienta, eso se desprende por ahora, pero el circuito de Spielberg es particular por sus rectas y frenadas, no por la necesidad de carga aerodinámica, y habrá que esperar a Hungría y Silverstone para poner nota global.
Un Ferrari irreconocible
La nota negativa, lo que nadie, nadie esperaba por mucho que Ferrari avisó, es que el SF1000 fuera un monoplaza tan simple y vulgar, un coche que ni siquiera destaca ahora entre la clase media. Que, simplemente, es más lento que su predecesor en una temporada sin cambios reglamentarios. Desastre en la fábrica de Maranello que dejó a Charles Leclerc en un simple séptimo, cuando el año pasado firmó la pole, y a Sebastian Vettel undécimo y eliminado en la Q2 bajo unas condiciones escalofriantemente normales. "De locos", se le escapó a Charles Leclerc en una conversación por radio con su ingeniero de pista, Xavier Marcos. Ferrari no tiene el coche más rápido, pero tampoco el segundo, el tercero, el cuarto o el quinto. Y ese drama preocupa aún más cuando se recuerda que el año que viene será Sainz quien se suba al monoplaza.
Más atrás, eliminaciones tempranas para los Alpha Tauri de Gasly y Kvyat, Ocon y Grosjean. En el primer corte se quedaron Magnussen, Russell, Giovinazzi, Raikkonen y Latifi. El Alfa Romeo es una verdadera cenicienta en esta parrilla y sólo quedaron por delante del rookie canadiense, que debutaba en una clasificación de la Fórmula 1 horas después de destrozar su Williams en el entrenamiento por un error, valga la redundancia, de novato.
Jesús Balseiro
As
Valtteri Bottas celebró la pole, sin saberlo, haciendo motocross, saltando por la grava del Red Bull Ring y tirando al traste su último intento de la Q3. No importó, con el primero dejó fuera de juego a un Lewis Hamilton que había liderado todas las sesiones del GP de Austria hasta llegar a la definitiva, la que configura la parrilla. El finlandés, correoso al empezar las campañas, deja un primer aviso para su laureado compañero, el campeón, que se quedó a doce milésimas. En cualquier caso, la conclusión más rápida tras la primera clasificación de la temporada es que debe llegar algo más grave que una pandemia para poner en peligro la hegemonía de su Mercedes.
La nota positiva es que hay resistencia: Max Verstappen fijó el tercer mejor registro con el Red Bull Honda y aunque se quedó a medio segundo en el intento definitivo, tiene una ventaja importante para la carrera: empezará con el neumático medio porque fue el que utilizó durante la segunda sesión de clasificación, al contrario que el resto de la parrilla que optó por el blando. Podrá seguir una estrategia ventajosa evitando una goma que se degradará muy rápido al inicio por culpa del calor en Spielberg. Así ganó a Leclerc hace un año, con ventaja de ruedas en el sprint final de la carrera. Hay que recurrir a las estrategias más insospechadas para intentar plantar cara a este Mercedes superlativo.
Vaso medio vacío para Carlos Sainz
Carlos Sainz se situará octavo en la parrilla y el vaso se ve medio vacío porque prometía más, de hecho no mejoró su crono cuando montó los neumáticos a estrenar. Su compañero, Lando Norris, saldrá cuarto tras ‘Mad Max’ con una vuelta final inspiradísima que le sirvió para adelantar incluso al Red Bull de Alex Albon. Se colaron por delante del madrileño también Charles Leclerc y Sergio Pérez, si bien pudo contener al potente Racing Point de Stroll y al Renault de Ricciardo. El McLaren MCL35 es una buena herramienta, eso se desprende por ahora, pero el circuito de Spielberg es particular por sus rectas y frenadas, no por la necesidad de carga aerodinámica, y habrá que esperar a Hungría y Silverstone para poner nota global.
Un Ferrari irreconocible
La nota negativa, lo que nadie, nadie esperaba por mucho que Ferrari avisó, es que el SF1000 fuera un monoplaza tan simple y vulgar, un coche que ni siquiera destaca ahora entre la clase media. Que, simplemente, es más lento que su predecesor en una temporada sin cambios reglamentarios. Desastre en la fábrica de Maranello que dejó a Charles Leclerc en un simple séptimo, cuando el año pasado firmó la pole, y a Sebastian Vettel undécimo y eliminado en la Q2 bajo unas condiciones escalofriantemente normales. "De locos", se le escapó a Charles Leclerc en una conversación por radio con su ingeniero de pista, Xavier Marcos. Ferrari no tiene el coche más rápido, pero tampoco el segundo, el tercero, el cuarto o el quinto. Y ese drama preocupa aún más cuando se recuerda que el año que viene será Sainz quien se suba al monoplaza.
Más atrás, eliminaciones tempranas para los Alpha Tauri de Gasly y Kvyat, Ocon y Grosjean. En el primer corte se quedaron Magnussen, Russell, Giovinazzi, Raikkonen y Latifi. El Alfa Romeo es una verdadera cenicienta en esta parrilla y sólo quedaron por delante del rookie canadiense, que debutaba en una clasificación de la Fórmula 1 horas después de destrozar su Williams en el entrenamiento por un error, valga la redundancia, de novato.
