La F1 se topa con las fronteras
Italia, AS
Los equipos solicitaron a Liberty Media y la FIA que avisasen del inicio de la temporada con al menos dos meses de antelación, y parece que todo está en marcha para que el GP de Austria se pueda dar el pistoletazo de salida el 5 de julio, con una carrera sin público, bajo fuertes medidas de seguridad y en un ‘paddock’ reducido a la más mínima expresión, con apenas medio centenar de personal por cada escudería.
No se definió aún si habría o no prensa en estas primeras carreras de la temporada, hay diferentes criterios entre los dos estamentos que gobiernan la Fórmula 1. Por un lado, los gestores quieren limitar tanto como se pueda la afluencia a los circuitos; por otro, quieren mostrar al mundo la eficacia de su sistema para competir libres de Covid-19. Se entiende que, al menos en las primeras carreras, no habrá medios de comunicación más allá del equipo de retransmisión de la FOM.
La situación de Red Bull Ring parece clara con dos carreras (la segunda entre semana), si bien el promotor y las escuderías tienen que confirmar con el gobierno local los detalles de entrada en el país y alojamiento, así como el número de pruebas PCR al que se someterá en repetidas ocasiones todo el personal. Todo dependerá de la apertura parcial de fronteras, y este detalle es precisamente el que se tuerce en Gran Bretaña, teórica segunda cita del calendario con la que las negociaciones no van tan avanzadas: el primer ministro, Boris Johnson, plantea la introducción de 14 días de cuarentena obligatoria para cualquier extranjero que quiera entrar en Reino Unido, algo que impediría la normal celebración del doble GP en Silverstone, previsto para el 19 de julio. Se pueden buscar exenciones al personal de la F1, pero no fueron bien vistas en Australia cuando se abrieron las puertas a los italianos de Ferrari y se cerraron a todos los demás.
Eso propicia que la F1 esté conversando también con otros circuitos que inicialmente no estaban en el calendario original de 2020, con Hockenheim mejor situado. Igualmente, España, Hungría, Bélgica e Italia parten con buenas opciones de celebrar su gran premio, siempre a puerta cerrada, a lo largo del verano en un nuevo calendario que debe publicarse en las próximas dos o tres semanas, según la BBC. Paul Ricard no acogerá un ‘GP de Francia’ oficial, al menos así se desprende del anuncio de cancelación, pues la organización se desentiende de la prueba hasta 2021, pero el campeonato puede alquilar el circuito para organizar otra carrera.
Entre los objetivos de Liberty Media está competir en Sochi o Azerbaiyán ya en septiembre y dirigirse a Asia (Singapur, Shanghái, Suzuka) y América (Austin, México y Brasil) en octubre para terminar la temporada en Oriente Medio (Bahréin y Abu Dhabi). No obstante, sólo son objetivos y se contemplan escenarios sin carreras a lo largo de este año. Porque los plazos no se cumplen, la pandemia se alarga en Europa y las fronteras no se reabren, ni tampoco hay claridad sobre cómo serán los procesos de apertura, cuando lleguen.
Los equipos solicitaron a Liberty Media y la FIA que avisasen del inicio de la temporada con al menos dos meses de antelación, y parece que todo está en marcha para que el GP de Austria se pueda dar el pistoletazo de salida el 5 de julio, con una carrera sin público, bajo fuertes medidas de seguridad y en un ‘paddock’ reducido a la más mínima expresión, con apenas medio centenar de personal por cada escudería.
No se definió aún si habría o no prensa en estas primeras carreras de la temporada, hay diferentes criterios entre los dos estamentos que gobiernan la Fórmula 1. Por un lado, los gestores quieren limitar tanto como se pueda la afluencia a los circuitos; por otro, quieren mostrar al mundo la eficacia de su sistema para competir libres de Covid-19. Se entiende que, al menos en las primeras carreras, no habrá medios de comunicación más allá del equipo de retransmisión de la FOM.
La situación de Red Bull Ring parece clara con dos carreras (la segunda entre semana), si bien el promotor y las escuderías tienen que confirmar con el gobierno local los detalles de entrada en el país y alojamiento, así como el número de pruebas PCR al que se someterá en repetidas ocasiones todo el personal. Todo dependerá de la apertura parcial de fronteras, y este detalle es precisamente el que se tuerce en Gran Bretaña, teórica segunda cita del calendario con la que las negociaciones no van tan avanzadas: el primer ministro, Boris Johnson, plantea la introducción de 14 días de cuarentena obligatoria para cualquier extranjero que quiera entrar en Reino Unido, algo que impediría la normal celebración del doble GP en Silverstone, previsto para el 19 de julio. Se pueden buscar exenciones al personal de la F1, pero no fueron bien vistas en Australia cuando se abrieron las puertas a los italianos de Ferrari y se cerraron a todos los demás.
Eso propicia que la F1 esté conversando también con otros circuitos que inicialmente no estaban en el calendario original de 2020, con Hockenheim mejor situado. Igualmente, España, Hungría, Bélgica e Italia parten con buenas opciones de celebrar su gran premio, siempre a puerta cerrada, a lo largo del verano en un nuevo calendario que debe publicarse en las próximas dos o tres semanas, según la BBC. Paul Ricard no acogerá un ‘GP de Francia’ oficial, al menos así se desprende del anuncio de cancelación, pues la organización se desentiende de la prueba hasta 2021, pero el campeonato puede alquilar el circuito para organizar otra carrera.
Entre los objetivos de Liberty Media está competir en Sochi o Azerbaiyán ya en septiembre y dirigirse a Asia (Singapur, Shanghái, Suzuka) y América (Austin, México y Brasil) en octubre para terminar la temporada en Oriente Medio (Bahréin y Abu Dhabi). No obstante, sólo son objetivos y se contemplan escenarios sin carreras a lo largo de este año. Porque los plazos no se cumplen, la pandemia se alarga en Europa y las fronteras no se reabren, ni tampoco hay claridad sobre cómo serán los procesos de apertura, cuando lleguen.