¿Puede la medicina tradicional hacerle frente al coronavirus?

Según médicos naturistas, el uso de productos naturales, como medicina tradicional puede ser el aliado exitoso en la lucha contra la pandemia del coronavirus en Bolivia

Miguel Angel Melendres
El Deber
Mientras la medicina científica trabaja denodadamente para encontrar el medicamento excelso contra el coronavirus, nuestros médicos naturistas no han estado exentos del esfuerzo que se hace para identificar algún producto tradicional que pueda contrarrestar el contagio del Covid 19. Y existe no solo una, sino varias respuestas que serán promocionadas desde la próxima semana en todo el territorio boliviano.


Este sector precisa que no tienen una solución a la enfermedad, sino que esta medicina, reconocida por el Estado, se aboca a la prevención a la contaminación desde los hogares, a través de alimentos esenciales y plantas medicinales que fortalecen el sistema inmunológico y de plantas medicinales naturales antivirales.

De este análisis surgen, por ejemplo, el uso exitoso de plantas para el sistema inmunológico, como la cañahua, algarrobo, asaí, paquió, graviola; o las combinaciones de plantas y frutos, como la naranja, el kiwi y el polen; el limón, la miel y el jengibre. También figuran la cebolla, el ajo, el limón y la miel.

Además, existen los antivirales, como el romero, la wira wira, el eucalipto, la lampaya, el ayrampu, entre muchos otros que se producen en el altiplano, los valles y el oriente boliviano. Se puede tomar como infusión o como método de vaporización de los ambientes.

“Hemos estado estudiando el proceso del funcionamiento del Covid-19 y cómo se lo puede combatir, a parte del lavado de manos. En Bolivia, el uso de la medicina tradicional es amplísima que durante siglos han curado muchas enfermedades, como el paludismo, que la ciencia no curaba. Hubo un avance en la medicina tradicional pero que las grandes empresas se han llevado el fruto. En el país está latente en la sabiduría popular el uso de las hierbas medicinales”, señaló Julio Peñaranda, a quien los pueblos indígenas los llaman “el doctor Raya”, porque cura los pulmones con aceite de raya.

Consideró que es muy importante que la población prevenga la enfermedad, desde las casas, ya que puede llegar un momento en que los hospitales se van a saturar y será muy peligroso para los mismos pacientes por el alto grado contagioso.

Plan desde el Estado

En esta Cartera de Estado se ha potenciando el Viceministerio de Medicina Tradicional, por las características históricas de los saberes ancestrales de las naciones indígenas bolivianas.

A partir de la próxima semana, esta institución estatal aplicará un plan de acción de contención del coronavirus, promocionando y difundiendo las bondades y características de las plantas tradicionales y sus características curativas y de fortalecimiento del organismo.

“Estamos haciendo estrategias comunicacionales para difundir a la población boliviana que tenga conciencia de consumir estas plantas medicinales y, en especial, los alimentos que tenemos en nuestro país. Es una política oficial que se dará desde el Ministerio de Salud del que dependemos”, señaló.

Ley de Contingencia

Consultando a las autoridades, se conoció que la próxima semana se aprobará una Ley de Contingencia frente a la pandemia del Covid-19. En uno de los artículos, se establece que el Ministerio de Salud tiene que acudir a los saberes y conocimientos ancestrales del campo y de las comunidades.

“En base a esa ley, vamos a trabajar en la reglamentación y en un plan de acción inmediato, para coadyuvar en aspectos preventivos. No estamos ofreciendo una cura, sino más que todo, una prevención”, señaló el viceministro de Medicina Tradicional, Néstor Quilla.

Uso científico

El responsable de Medicina Tradicional en Santa Cruz, dependiente del viceministerio de Medicina Tradicional, Luis Murillo, recordó, por su parte, que para el tratamiento de la enfermedad del Covid-19, países como Francia y España están empezando a usar hidroxicloroquina y azitromicina.

“Estudios realizados por el Instituto de Virología de Paris (Francia) han revelado que la hidroxicloroquina está dando excelentes resultados para el tratamiento del coronavirus. De la corteza del árbol de la quina, se saca el sulfato de quinina. En Bolivia ya utilizaban la quina de manera tradicional, en infusión. Ponían 10 gramos de corteza de quina y lo bebían. Cuando llegaron los jesuitas, hicieron el famoso “polvo milagroso” que era la corteza de quina pulverizada y lo vendían como polvo, que tomaban con buenos resultados. Tenemos a mano este árbol. No estamos diciendo que cura, sino que puede ser un coadyuvante especial para el tratamiento del coronavirus”, declaró Murillo, que es médico naturista.

Algunas plantas tradicionales

Cañahua. Fortalece el sistema inmunológico, muscular y refuerza los pulmones de niños y adultos. En una taza de jugo de frutas o café de cebada, se agrega 1 o 2 cucharas de pito de Cañahua.

Algarrobo. Excelente para la anemia, falta de apetito, debilidad general en el cuerpo. Es antioxidante, muy útil contra el asma y la bronquitis. Calma los ataques de asma, alivia las obstrucciones respiratorias causadas por el asma alérgico. En una taza de jugo de frutas o leche colocar una cuchara de polvo (pito) de algarrobo.

Asaí. Fortalece el sistema inmune, por ser rico en vitamina C, Vitamina E, Omega-9 y antocianinas, por lo que ayuda a aumentar y mantener las defensas del organismo y favorecer el proceso de cicatrización. Antioxidante y antinflamatoria. En una taza de jugo de frutas o yogurt colocar una cuchara de polvo o pulpa de Asaí.

Paquió. Es broncodilatador y expectorante en casos de resfrió común, catarro, gripe y tos. Ayuda a la evacuación de mucosidades de los pulmones, calma los espasmos de la tos y los dolores en la región pectoral. La corteza se machaca en pedacitos y se hace hervir una cucharilla en un litro de agua por 10 minutos, colar agregar miel de abeja a gusto y unas gotas del jugo de limón criollo, beber caliente varias veces al día.

Graviola. Fortalece el sistema inmunológico, capacidad para fortalecer el corazón y la actividad cardiovascular y las defensas corporales. Es antiviral, estimulante digestivo, relajante nervioso, reductor de estados febriles vasodilatadora, antibacteriana, anticancerígena. Una cuchara de hojas picadas de la Graviola para litro de agua, hervor por dos minutos, colar y beber antes y después de las comidas.

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