La Paz tiene la tasa de mortalidad más alta por Covid-19 y médicos amenazan con cerrar hospitales
El departamento paceño tiene siete fallecidos por coronavirus y 37 casos positivos. Su tasa de mortalidad por el virus llega al 18,9%, nueve veces más que la media mundial. Los galenos de esa región amenazan con cerrar nosocomios si el Gobierno no cumple su palabra respecto a la bioseguridad.
Ivan Alejandro Paredes
El Deber
La Paz pasa por un momento difícil. Tiene siete fallecidos por coronavirus y 37 casos positivos. La cifra de muertes por Covid-19 es la más alta del país y el departamento paceño llega al 18,9% de tasa de mortalidad por el nuevo virus, lo que representa nueve veces más alta que la media mundial, que alcanza el 2,4%.
La explicación a ese dato tiene tres respuestas: la edad promedio de los fallecidos supera los 60 años, sector considerado vulnerable a la enfermedad; la falta de diagnósticos tempranos para pacientes afectados; y la carencia de equipos y personal en el sistema de salud.
Los médicos de La Paz ven esta situación como algo "muy peligroso" y amenazan con cerrar las puertas de hospitales a personas con coronavirus si es que el Gobierno transitorio no cumple su promesa de entregar equipos de bioseguridad para el personal médico y nosocomios.
El ministro de Salud, Aníbal Cruz, resalta que la pandemia de coronavirus no tiene una receta matemática y apunta al factor edad de los fallecidos como una de las explicaciones del por qué La Paz tiene una alta tasa de mortalidad en el tratamiento del Covid-19.
Sobre la amenaza de los médicos paceños, pide a ese sector seguir trabajando y les anuncia que existe la proyección de pasar de 180 pruebas de coronavirus por día a 1.432 implementando diferentes equipos obtenidos, entre ellos algunos que se utilizan actualmente para diagnosticar tuberculosis y VIH.
"Hay muchas aristas para hablar de porcentajes. Uno es la población, quienes han fallecido (en La Paz) y de acuerdo a la edad podemos tener una relación. Le pongo un ejemplo y no quiero comparar con nadie. Hago un comportamiento de acuerdo a la edad. Ahora el índice de mortalidad con el coronavirus es de 2,2% o 2,4% a nivel mundial. Si vemos La Paz con 37 casos positivos versus siete fallecidos, llegamos a 18,9%, hablamos de un índice de mortalidad de La Paz nueve veces más al valor, pero si vemos el promedio de vida de los siete pacientes, hablamos de 62 años y si vemos la tasa mundial de 62 años está en 12%, entonces seguimos elevados", detalla Cruz.
La Paz cumple la cuarentena total con algunos problemas. Hay sectores donde la población sale a las calles a cumplir su rutina comercial a pesar de la prohibición. En zonas de El Alto se evidenció la presencia de ciudadanos que incluso contaban con transporte público.
Lo mismo pasa en el área rural e incluso hubo fiestas patronales en pleno estado de emergencia sanitaria.
Según Cruz, estos actos de "indisciplina" aportan a que la región paceña aumente casos positivos y fallecidos.
El ministro de Salud resalta que hay tres hospitales en La Paz para atender y tratar casos de coronavirus. Se habilitó un nosocomio más a los de la Portada y el Norte. Se trata del hospital Juan XXIII, que está en el norte de la ciudad de La Paz y que recién tuvo una segunda inspección. Aun así, las deficiencias están a la orden del día.
Medidas de presión
El secretario general del Sindicato de Ramas Médicas de la Salud Pública (Sirmes) La Paz, Fernando Romero, considera que el principal factor de que La Paz lidera la lista de fallecidos por coronavirus es la ausencia de un diagnóstico precoz a todo tipo de pacientes, lo que incluye a quienes no presentan síntomas altos y son quienes regresan a sus hogares sin saber si tienes el virus en su organismo.
"Hay varios factores que contribuyen a que La Paz tenga más decesos por coronavirus. Uno es que no se hace el diagnóstico precoz, se hace el diagnóstico tardío. Si un paciente ya viene con problemas respiratorios, es un paciente que va a terapia intensiva y en terapia intensiva un paciente hipertenso, desnutrido o de la tercera edad poco se hará por él. Pero si a este mismo paciente lo encontramos una semana antes, más rápidamente podemos tratarlo, internarlo y utilizar medicación paliativa que disminuya el riesgo de ingresar a terapia intensiva. Eso le dijimos al Gobierno, que muy tarde se está diagnosticando. No queremos llegar a la fase cuatro de esta pandemia. En esta fase se selecciona a quién atender y a quién no y ahí viene lo que se ve en otros países.
Romero afirma que el Gobierno "no cumplió su palabra" en la entrega de insumos de bioseguridad para atender casos de coronavirus. Es por eso que se decidió asumir acciones radicales y en días se cerrarán las puertas de hospitales públicos para la atención de pacientes de coronavirus.
El dirigente lamenta llegar a esta situación, pero no ve salidas a pesar de que solicitó los insumos desde el mes de enero.
"Ya no vamos a recibir promesas, no queremos discursos bonitos, queremos hechos. Si no ocurre eso mañana tenemos una reunión con los trabajadores de salud y de forma coordinada con ellos aplicaremos lo que ya dijimos: hospital o centro que no tiene bioseguridad no podrá atender, esto no es una huelga, es exigencias para que podamos trabajar. Ellos (el Gobierno transitorio) priorizaron la campaña política y ahora nos vemos así", resalta Romero.
La Paz busca mayor coordinación para contener el coronavirus. Hoy se reunieron los tres niveles del Estado en la sede de Gobierno para de una vez realizar un trabajo coordinado. El ministro Cruz participó de la cita en la Alcaldía paceña y evitó pronunciarse sobre este aspecto. Dijo que el encuentro sirvió justamente para llevar soluciones para La Paz.
Antes, el embajador boliviano de Ciencia y Tecnología, Mohammed Mostajo Radji, criticó la falta de cooperación del Servicio Departamental de Salud (Sedes) de La Paz con el Gobierno en el tratamiento de la crisis por la pandemia del coronavirus. El funcionario señaló que la entidad de la Gobernación paceña no quiere cooperar en el tema.
Al respecto, el gobernador de La Paz, Félix Patzi, desmintió a Mostajo Radji y afirmó que existe un trabajo conjunto entre los altos niveles de decisión del Gobierno, de la Gobernación y de los municipios paceños, por lo que descartó descoordinación de estas instancias, aunque no desechó algunas “falencias de operatividad”.
El Deber
La Paz pasa por un momento difícil. Tiene siete fallecidos por coronavirus y 37 casos positivos. La cifra de muertes por Covid-19 es la más alta del país y el departamento paceño llega al 18,9% de tasa de mortalidad por el nuevo virus, lo que representa nueve veces más alta que la media mundial, que alcanza el 2,4%.
La explicación a ese dato tiene tres respuestas: la edad promedio de los fallecidos supera los 60 años, sector considerado vulnerable a la enfermedad; la falta de diagnósticos tempranos para pacientes afectados; y la carencia de equipos y personal en el sistema de salud.
Los médicos de La Paz ven esta situación como algo "muy peligroso" y amenazan con cerrar las puertas de hospitales a personas con coronavirus si es que el Gobierno transitorio no cumple su promesa de entregar equipos de bioseguridad para el personal médico y nosocomios.
El ministro de Salud, Aníbal Cruz, resalta que la pandemia de coronavirus no tiene una receta matemática y apunta al factor edad de los fallecidos como una de las explicaciones del por qué La Paz tiene una alta tasa de mortalidad en el tratamiento del Covid-19.
Sobre la amenaza de los médicos paceños, pide a ese sector seguir trabajando y les anuncia que existe la proyección de pasar de 180 pruebas de coronavirus por día a 1.432 implementando diferentes equipos obtenidos, entre ellos algunos que se utilizan actualmente para diagnosticar tuberculosis y VIH.
"Hay muchas aristas para hablar de porcentajes. Uno es la población, quienes han fallecido (en La Paz) y de acuerdo a la edad podemos tener una relación. Le pongo un ejemplo y no quiero comparar con nadie. Hago un comportamiento de acuerdo a la edad. Ahora el índice de mortalidad con el coronavirus es de 2,2% o 2,4% a nivel mundial. Si vemos La Paz con 37 casos positivos versus siete fallecidos, llegamos a 18,9%, hablamos de un índice de mortalidad de La Paz nueve veces más al valor, pero si vemos el promedio de vida de los siete pacientes, hablamos de 62 años y si vemos la tasa mundial de 62 años está en 12%, entonces seguimos elevados", detalla Cruz.
La Paz cumple la cuarentena total con algunos problemas. Hay sectores donde la población sale a las calles a cumplir su rutina comercial a pesar de la prohibición. En zonas de El Alto se evidenció la presencia de ciudadanos que incluso contaban con transporte público.
Lo mismo pasa en el área rural e incluso hubo fiestas patronales en pleno estado de emergencia sanitaria.
Según Cruz, estos actos de "indisciplina" aportan a que la región paceña aumente casos positivos y fallecidos.
El ministro de Salud resalta que hay tres hospitales en La Paz para atender y tratar casos de coronavirus. Se habilitó un nosocomio más a los de la Portada y el Norte. Se trata del hospital Juan XXIII, que está en el norte de la ciudad de La Paz y que recién tuvo una segunda inspección. Aun así, las deficiencias están a la orden del día.
Medidas de presión
El secretario general del Sindicato de Ramas Médicas de la Salud Pública (Sirmes) La Paz, Fernando Romero, considera que el principal factor de que La Paz lidera la lista de fallecidos por coronavirus es la ausencia de un diagnóstico precoz a todo tipo de pacientes, lo que incluye a quienes no presentan síntomas altos y son quienes regresan a sus hogares sin saber si tienes el virus en su organismo.
"Hay varios factores que contribuyen a que La Paz tenga más decesos por coronavirus. Uno es que no se hace el diagnóstico precoz, se hace el diagnóstico tardío. Si un paciente ya viene con problemas respiratorios, es un paciente que va a terapia intensiva y en terapia intensiva un paciente hipertenso, desnutrido o de la tercera edad poco se hará por él. Pero si a este mismo paciente lo encontramos una semana antes, más rápidamente podemos tratarlo, internarlo y utilizar medicación paliativa que disminuya el riesgo de ingresar a terapia intensiva. Eso le dijimos al Gobierno, que muy tarde se está diagnosticando. No queremos llegar a la fase cuatro de esta pandemia. En esta fase se selecciona a quién atender y a quién no y ahí viene lo que se ve en otros países.
Romero afirma que el Gobierno "no cumplió su palabra" en la entrega de insumos de bioseguridad para atender casos de coronavirus. Es por eso que se decidió asumir acciones radicales y en días se cerrarán las puertas de hospitales públicos para la atención de pacientes de coronavirus.
El dirigente lamenta llegar a esta situación, pero no ve salidas a pesar de que solicitó los insumos desde el mes de enero.
"Ya no vamos a recibir promesas, no queremos discursos bonitos, queremos hechos. Si no ocurre eso mañana tenemos una reunión con los trabajadores de salud y de forma coordinada con ellos aplicaremos lo que ya dijimos: hospital o centro que no tiene bioseguridad no podrá atender, esto no es una huelga, es exigencias para que podamos trabajar. Ellos (el Gobierno transitorio) priorizaron la campaña política y ahora nos vemos así", resalta Romero.
La Paz busca mayor coordinación para contener el coronavirus. Hoy se reunieron los tres niveles del Estado en la sede de Gobierno para de una vez realizar un trabajo coordinado. El ministro Cruz participó de la cita en la Alcaldía paceña y evitó pronunciarse sobre este aspecto. Dijo que el encuentro sirvió justamente para llevar soluciones para La Paz.
Antes, el embajador boliviano de Ciencia y Tecnología, Mohammed Mostajo Radji, criticó la falta de cooperación del Servicio Departamental de Salud (Sedes) de La Paz con el Gobierno en el tratamiento de la crisis por la pandemia del coronavirus. El funcionario señaló que la entidad de la Gobernación paceña no quiere cooperar en el tema.
Al respecto, el gobernador de La Paz, Félix Patzi, desmintió a Mostajo Radji y afirmó que existe un trabajo conjunto entre los altos niveles de decisión del Gobierno, de la Gobernación y de los municipios paceños, por lo que descartó descoordinación de estas instancias, aunque no desechó algunas “falencias de operatividad”.
