El año en blanco de Brahim
Desde que fue titular en la eliminación contra la Real Sociedad, el malagueño no entró en más convocatorias. Sólo ha jugado 170 minutos, aunque marcó un gol y dio otro.
Sergio Santos Chozas
As
Brahim Díaz fue uno de los grandes damnificados por la eliminación copera del Real Madrid. Esta competición fue uno de los principales motivos que esgrimió el malagueño para no aceptar una cesión durante el pasado mercado de invierno. Estaba convencido de que la Copa le iba a servir de oportunidad para brillar y ganarse también minutos en el resto de competiciones.
Los pronósticos de Brahim se cumplieron, ya que el 76% de los minutos que ha disputado han sido en Copa (130’ de 170 totales). A pesar de ello, tuvo que ganarse también la titularidad: en los dos primeros partidos (Unionistas y Zaragoza) fue suplente. Sus buenas actuaciones le valieron su presencia en el once frente a la Real Sociedad, donde repartió una asistencia pero el equipo quedó eliminado.
Esa dura derrota contra los de Imanol Alguacil en el Bernabéu (3-4) apeó al Madrid de la Copa y terminó con las ilusiones de Brahim, que volvió al ostracismo. Desde entonces, el equipo blanco disputó seis partidos (cinco de Liga y uno de Champions) y el malagueño se quedó fuera de la convocatoria en todos. Ni las lesiones de Hazard le han permitido tener alguna oportunidad.
Y en esa coyuntura llegó la cuarentena blanca por el coronavirus, que le frena aún más y que, además, le añade competencia: Marco Asensio estaba cerca de reaparecer tras su grave lesión de rodilla. El balear ocupa la misma demarcación que Brahim y su regreso, que ahora sería en una etapa anterior de la temporada (siempre que el curso finalice, lo cual no está claro de momento) le cierra todavía más la puerta al joven futbolista que llegó en enero de 2019 procedente del Manchester City. Con sólo 170 minutos jugados (en los que ha marcado un gol y dado una asistencia) Brahim había dicho prácticamente adiós a uno de sus objetivos de la temporada: los Juegos Olímpicos. De hecho, ni siquiera ha entrado todavía en ninguna de las listas de De la Fuente en el nuevo ciclo de la Sub-21 (el de nacidos a partir de 1998). Brahim es de 1999 y estaba llamado a ser una de las estrellas, pero aún no ha jugado.
Futuro
En verano, el Madrid le insistirá nuevamente en que acepte una cesión para coger experiencia. En el club tienen muchas esperanzas puestas en él, están convencidos en que va a ser un futbolista importante en el Bernabéu durante muchos años. Pero debe seguir el camino de otros como Achraf, Odegaard o Reguilón. Necesita minutos en algún equipo exigente para regresar el Madrid en uno o dos años y luchar por un puesto en el once titular.
As
Brahim Díaz fue uno de los grandes damnificados por la eliminación copera del Real Madrid. Esta competición fue uno de los principales motivos que esgrimió el malagueño para no aceptar una cesión durante el pasado mercado de invierno. Estaba convencido de que la Copa le iba a servir de oportunidad para brillar y ganarse también minutos en el resto de competiciones.
Los pronósticos de Brahim se cumplieron, ya que el 76% de los minutos que ha disputado han sido en Copa (130’ de 170 totales). A pesar de ello, tuvo que ganarse también la titularidad: en los dos primeros partidos (Unionistas y Zaragoza) fue suplente. Sus buenas actuaciones le valieron su presencia en el once frente a la Real Sociedad, donde repartió una asistencia pero el equipo quedó eliminado.
Esa dura derrota contra los de Imanol Alguacil en el Bernabéu (3-4) apeó al Madrid de la Copa y terminó con las ilusiones de Brahim, que volvió al ostracismo. Desde entonces, el equipo blanco disputó seis partidos (cinco de Liga y uno de Champions) y el malagueño se quedó fuera de la convocatoria en todos. Ni las lesiones de Hazard le han permitido tener alguna oportunidad.
Y en esa coyuntura llegó la cuarentena blanca por el coronavirus, que le frena aún más y que, además, le añade competencia: Marco Asensio estaba cerca de reaparecer tras su grave lesión de rodilla. El balear ocupa la misma demarcación que Brahim y su regreso, que ahora sería en una etapa anterior de la temporada (siempre que el curso finalice, lo cual no está claro de momento) le cierra todavía más la puerta al joven futbolista que llegó en enero de 2019 procedente del Manchester City. Con sólo 170 minutos jugados (en los que ha marcado un gol y dado una asistencia) Brahim había dicho prácticamente adiós a uno de sus objetivos de la temporada: los Juegos Olímpicos. De hecho, ni siquiera ha entrado todavía en ninguna de las listas de De la Fuente en el nuevo ciclo de la Sub-21 (el de nacidos a partir de 1998). Brahim es de 1999 y estaba llamado a ser una de las estrellas, pero aún no ha jugado.
Futuro
En verano, el Madrid le insistirá nuevamente en que acepte una cesión para coger experiencia. En el club tienen muchas esperanzas puestas en él, están convencidos en que va a ser un futbolista importante en el Bernabéu durante muchos años. Pero debe seguir el camino de otros como Achraf, Odegaard o Reguilón. Necesita minutos en algún equipo exigente para regresar el Madrid en uno o dos años y luchar por un puesto en el once titular.
