Reino Unido presentó el nuevo sistema de inmigración por puntos: cuáles son los requisitos que exigirá a partir de 2021

El programa busca limitar el ingreso de mano de obra barata desde Europa y no hará distinciones entre ciudadanos de la UE y del resto del mundo

Infobae
Reino Unido dará prioridad al acceso de trabajadores altamente cualificados de todo el mundo en un nuevo sistema de inmigración basado en puntos, dijo el martes el Gobierno, exponiendo sus planes para poner fin a la dependencia de la “mano de obra barata de Europa” tras el Brexit.


La preocupación por el impacto de los altos niveles de migración procedentes de la Unión Europea fue uno de los principales factores de la votación de Reino Unido en 2016 para abandonar el bloque y el Gobierno ha dicho que planea reducir el número total de inmigrantes.

El nuevo sistema asignará puntos por competencias específicas, cualificaciones, salarios o profesiones y sólo concederá visas a los que tengan suficiente puntaje. Entrará en vigor el 1 de enero de 2021 y tratará de igual forma a los ciudadanos de la UE y a los que no lo son.

Para obtener una visa de trabajo, se necesitarán capacidades específicas, hablar inglés y contar de antemano con una propuesta de empleo de un salario mínimo de 25.600 libras (cerca de USD 33 mil). El nivel de estudios requerido fue reducido de una licenciatura al equivalente del bachillerato, para permitir “una mayor flexibilidad”.

“Respondemos a las prioridades de los ciudadanos al introducir un nuevo sistema por puntos que hará bajar el número de inmigrantes”, declaró en un comunicado enviado el martes por la noche por la ministra del Interior Priti Patel. Se trata de un “momento histórico” que “pone fin a la libre circulación”, celebró.

Sin embargo, organizaciones empresariales dijeron que muchos negocios dependen de la mano de obra extranjera y advirtieron de que podría no haber suficientes trabajadores nacionales para encargarse de las cosechas, del cuidado de pacientes y para trabajar de camareros, un déficit que podría debilitar a la quinta economía más grande del mundo. Las exigencias suscitaron preocupaciones en el seno de los servicios públicos británicos, como el de salud (NHS), que funcionan gracias a trabajadores extranjeros en ocasiones poco remunerados.

El ministerio del Interior considera que el 70% de la mano de obra europea actual, poco cualificada, no respondería a las nuevas exigencias. Estas medidas no afectan a los aproximadamente 3,2 millones de ciudadanos de la UE que han solicitado residir en el Reino Unido antes del Brexit.

“La velocidad y escala de estos cambios requerirá un ajuste significativo por parte de las empresas”, dijo Adam Marshall, director general de la Cámaras de Comercio británicas. “Las empresas ya están invirtiendo fuertemente en talento local en todo el Reino Unido, pero la escasez crítica de mano de obra significa que las empresas seguirán necesitando acceso a trabajadores extranjeros en todos los niveles de capacidades”.
La oposición teme que el emblemático sistema de salud británico no logre completar los puestos de trabajo sin la mano de obra inmigrante (Reuters)
La oposición teme que el emblemático sistema de salud británico no logre completar los puestos de trabajo sin la mano de obra inmigrante (Reuters)

Según el nuevo sistema, los inmigrantes de la UE recibirán el mismo trato que los solicitantes de fuera del bloque, una norma que se aplicará también a los visados de estudiantes, dijo el Gobierno. Por primera vez, los estudiantes de la UE ahora también tendrán que demostrar que hablan inglés, tienen una oferta para estudiar en una institución educativa y pueden mantenerse económicamente.

Los ciudadanos de la UE no necesitarán un visado para entrar en Reino Unido como turistas durante un período de hasta seis meses.

Los laboristas, el principal partido de oposición, afirmaron que algunos sectores dependen de la mano de obra extranjera, lo que obligará al gobierno a hacer múltiples excepciones. “Es un sistema con un umbral salarial que necesitará muchas excepciones (...) y que hará que no tenga sentido”, declaró la portavoz del Partido Laborista, Diane Abbott.

No habrá una ruta de entrada específica para los trabajadores poco cualificados, algo que el Gobierno espera que contribuya a reducir el número de migrantes. “Tenemos que cambiar el enfoque de nuestra economía para dejar de depender de la mano de obra barata de Europa y concentrarnos en la inversión en tecnología y automatización. Los empresarios tendrán que adaptarse”, dijo el Gobierno en un documento que expone sus planes.

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