Al igual que Osama Bin Laden, el cuerpo de Abu Bakr al Baghdadi fue arrojado al mar
La información fue confirmada por una fuente del Pentágono. Las fuerzas norteamericanas siguieron el mismo protocolo que fue el utilizado con el jerarca de Al Qaeda, abatido en una redada en 2011 en Pakistán
Infobae
El cuerpo del líder del grupo terrorista Estado Islámico (ISIS, en inglés), Abu Bkar al Baghdadi, fue arrojado al mar al igual que ocurrió con Osama Bin Laden en 2011, según confirmó el Pentágono.
Al Baghdadi se inmoló el sábado al hacer estallar un cinturón explosivo luego de quedar acorralado por Fuerzas Especiales estadounidenses en su escondite el noroeste de Siria.
El líder terrorista, responsable de una organización que torturó y masacró brutalmente a miles de personas en su intento de imponer un estado islámico ultraconvservador en Siria e Irak, era intensamente buscado desde hacía años por los servicios de inteligencia de numerosos países, ente ellos Estados Unidos, Turquía e Irak.
De acuerdo a la descripción realizada por el presidente estadounidense Donald Trump, su cuerpo resultó destrozado por la explosión pero su identidad pudo ser corroborada con un examen de ADN.
O’Brien fue entrevistado en el programa “Meet the Press” en la cadena NBC y dijo que esperaba que su país siguiera el mismo protocolo que el utilizado con los restos de Bin Laden. Lo mismo dijo una fuente cercana al caso a la cadena CNN.
El líder de Al Qaeda fue abatido en 2011 por miembros del grupo comando Navy SEALS durante una redada en Abbotabad, Pakistán, donde llevaba tiempo escondido. Su cuerpo fue retirado del lugar por las fuerzas estadounidenses y luego “enterrado en el mar”, un sencillo ritual por el cual su cuerpo fue lanzado al Mar Arábigo desde el portaaviones USS Carl Vinson.
La razón para este particular “entierro”, que se hizo prestando atención al rito islámico y 24 horas de su muerte, era evitar que una tumba convencional pudiera convertirse en un santuario y lugar de peregrinación para sus seguidores.
O’Brien aseguró que el cuerpo de Al Baghdadi “sería desechado de manera apropiada” y que “esperaba” que se repitiera lo mismo que ocurrió con Bin Laden.
Al Baghdadi, un doctor en teología musulmán y clérigo iraquí que aparentemente se radicalizó tras la invasión estadounidense de Irak en 2003, pasó un tiempo en una prisión en Basora y llegó luego a formar el grupo terrorista ISIS, al que dirigió durante su conquista de un vasto territorio en 2014.
Durante los años de auge del ISIS, de sus mayores atentados en los cinco continentes y su brutal régimen de opresión en Siria e Irak, Al Baghdadi se mantuvo entre las sombras, con poquísimas apariciones públicas. Tras el derrumbe del “califato” en 2017 y la caída de su última aldea en marzo de 2019, el jerarca terrorista comenzó a llamar a la insurgencia y el terrorismo desde la clandestinidad, mientras era intensamente buscado por numerosas agencias de inteligencia.
Finalmente, su escondite en la provincia siria de Idlib fue develado y el terrorista se hizo explotar junto a tres niños antes que entregarse a las tropas estadounidenses.
El cuerpo del líder del grupo terrorista Estado Islámico (ISIS, en inglés), Abu Bkar al Baghdadi, fue arrojado al mar al igual que ocurrió con Osama Bin Laden en 2011, según confirmó el Pentágono.
Al Baghdadi se inmoló el sábado al hacer estallar un cinturón explosivo luego de quedar acorralado por Fuerzas Especiales estadounidenses en su escondite el noroeste de Siria.
El líder terrorista, responsable de una organización que torturó y masacró brutalmente a miles de personas en su intento de imponer un estado islámico ultraconvservador en Siria e Irak, era intensamente buscado desde hacía años por los servicios de inteligencia de numerosos países, ente ellos Estados Unidos, Turquía e Irak.
De acuerdo a la descripción realizada por el presidente estadounidense Donald Trump, su cuerpo resultó destrozado por la explosión pero su identidad pudo ser corroborada con un examen de ADN.
O’Brien fue entrevistado en el programa “Meet the Press” en la cadena NBC y dijo que esperaba que su país siguiera el mismo protocolo que el utilizado con los restos de Bin Laden. Lo mismo dijo una fuente cercana al caso a la cadena CNN.
El líder de Al Qaeda fue abatido en 2011 por miembros del grupo comando Navy SEALS durante una redada en Abbotabad, Pakistán, donde llevaba tiempo escondido. Su cuerpo fue retirado del lugar por las fuerzas estadounidenses y luego “enterrado en el mar”, un sencillo ritual por el cual su cuerpo fue lanzado al Mar Arábigo desde el portaaviones USS Carl Vinson.
La razón para este particular “entierro”, que se hizo prestando atención al rito islámico y 24 horas de su muerte, era evitar que una tumba convencional pudiera convertirse en un santuario y lugar de peregrinación para sus seguidores.
O’Brien aseguró que el cuerpo de Al Baghdadi “sería desechado de manera apropiada” y que “esperaba” que se repitiera lo mismo que ocurrió con Bin Laden.
Al Baghdadi, un doctor en teología musulmán y clérigo iraquí que aparentemente se radicalizó tras la invasión estadounidense de Irak en 2003, pasó un tiempo en una prisión en Basora y llegó luego a formar el grupo terrorista ISIS, al que dirigió durante su conquista de un vasto territorio en 2014.
Durante los años de auge del ISIS, de sus mayores atentados en los cinco continentes y su brutal régimen de opresión en Siria e Irak, Al Baghdadi se mantuvo entre las sombras, con poquísimas apariciones públicas. Tras el derrumbe del “califato” en 2017 y la caída de su última aldea en marzo de 2019, el jerarca terrorista comenzó a llamar a la insurgencia y el terrorismo desde la clandestinidad, mientras era intensamente buscado por numerosas agencias de inteligencia.
Finalmente, su escondite en la provincia siria de Idlib fue develado y el terrorista se hizo explotar junto a tres niños antes que entregarse a las tropas estadounidenses.
