Un preso fue decapitado en un calabozo de la policía bolivariana y la oposición exige respuestas del régimen de Maduro
La Asamblea Nacional instó a la ministra para Asuntos Penitenciarios del chavismo a asumir sus responsabilidad tras el asesinato de un reo durante un motín por hacinamiento
Infobae
Un preso murió decapitado durante un motín en calabozos del Centro de Privados de Libertad Boleíta de la Policía Nacional Bolivariana(PNB), conocido como la Zona 7, al este de Caracas.
La ONG Observatorio Venezolano de Prisiones informó que el motín se originó en la noche del martes presuntamente porque "los privados de libertad exigían traslados a penales".
"En medio del hacinamiento, los presos de la PNB en Zona 7 denunciaron que los reclusos no cuentan con atención médica a pesar de que sufren de enfermedades como tuberculosis, entre otras que han sido denunciadas en un sinfín de oportunidades por el Observatorio Venezolano de Prisiones", expresó la ONG.
Asimismo, destacó que en este centro "hay 16 celdas para 953 reclusos" por lo que "la bomba de tiempo, a causa del hacinamiento, explotó este martes en la noche mientras aún se desarrollaba la visita".
Y agregó que, en la revuelta, los presos "quemaron colchones y decapitaron a uno de los detenidos, un presunto violador".
A través de las redes sociales circuló un supuesto video del incidente que muestra cómo algunos de los detenidos celebran, cantan y bailan alrededor de un cuerpo decapitado, señaló la agencia de noticias ANSA.
Por su parte, familiares denunciaron a medios locales que los presos están hacinados allí y expuestos a enfermedades y malos tratos por parte de los guardias.
"Lo mataron, le quitaron la cabeza. Él no estaba por violación sino por hurto. Yo tengo sus papeles", advirtió la esposa del hombre decapitado en declaraciones a la cadena VPI.
La Asamblea Nacional de Venezuela (Parlamento, de mayoría opositora) instó este miércoles a Iris Varela a asumir las responsabilidades que le competen como ministra para Asuntos Penitenciarios del régimen de Nicolás Maduro.
Hasta el momento las autoridades no se han pronunciado por el motín.
Venezuela cuenta con una treintena de cárceles donde la población, que alcanza cerca de 50.000 reclusos, enfrenta serios problemas de hacinamiento y violencia.
Un preso murió decapitado durante un motín en calabozos del Centro de Privados de Libertad Boleíta de la Policía Nacional Bolivariana(PNB), conocido como la Zona 7, al este de Caracas.
La ONG Observatorio Venezolano de Prisiones informó que el motín se originó en la noche del martes presuntamente porque "los privados de libertad exigían traslados a penales".
"En medio del hacinamiento, los presos de la PNB en Zona 7 denunciaron que los reclusos no cuentan con atención médica a pesar de que sufren de enfermedades como tuberculosis, entre otras que han sido denunciadas en un sinfín de oportunidades por el Observatorio Venezolano de Prisiones", expresó la ONG.
Asimismo, destacó que en este centro "hay 16 celdas para 953 reclusos" por lo que "la bomba de tiempo, a causa del hacinamiento, explotó este martes en la noche mientras aún se desarrollaba la visita".
Y agregó que, en la revuelta, los presos "quemaron colchones y decapitaron a uno de los detenidos, un presunto violador".
A través de las redes sociales circuló un supuesto video del incidente que muestra cómo algunos de los detenidos celebran, cantan y bailan alrededor de un cuerpo decapitado, señaló la agencia de noticias ANSA.
Por su parte, familiares denunciaron a medios locales que los presos están hacinados allí y expuestos a enfermedades y malos tratos por parte de los guardias.
"Lo mataron, le quitaron la cabeza. Él no estaba por violación sino por hurto. Yo tengo sus papeles", advirtió la esposa del hombre decapitado en declaraciones a la cadena VPI.
La Asamblea Nacional de Venezuela (Parlamento, de mayoría opositora) instó este miércoles a Iris Varela a asumir las responsabilidades que le competen como ministra para Asuntos Penitenciarios del régimen de Nicolás Maduro.
Hasta el momento las autoridades no se han pronunciado por el motín.
Venezuela cuenta con una treintena de cárceles donde la población, que alcanza cerca de 50.000 reclusos, enfrenta serios problemas de hacinamiento y violencia.
