Empieza la cuenta atrás por Coutinho

El próximo jueves se cierra el plazo para inscribir jugadores en la Premier y siguen sin llegar ofertas por el brasileño.

Santi Giménez
As
El tiempo ya apremia por Coutinho. El jugador brasileño, el más caro de la historia del Barcelona al costar 160 millones de euros en el mercado invernal de hace dos temporadas, sigue sin tener ofertas concretas para abandonar el club blaugrana. El Barça tiene al internacional brasileño en el mercado por dos motivos: uno porque ante la llegada de Griezmann su papel apunta a anecdótico y dos porque es el gran activo del mercado que podría permitir hacer caja para un eventual asalto por Neymar.


El club blaugrana tasa al brasileño en 100 millones de euros, que es la cantidad que permitiría que la salida de Coutinho no repercutiera negativamente en el balance de la junta, pero este precio, junto al salario que percibe el jugador hace que los clubes interesados se echen atrás.

Además se da la circunstancia que era el mercado inglés, donde Coutinho jugó a un gran nivel en el Liverpool, el único con equipos con capacidad para afrontar una operación de este calibre, pero la parálisis se impone y el tiempo se acaba, porque el mercado para inscribir jugadores en la Premier acaba en seis días, el próximo jueves.

El Liverpool, su antiguo club, lo ha descartado por boca del técnico Jurgen Klopp, el City no está interesado, el Chelsea, donde era una opción real tras la salida de Hazard al Madrid, está sancionado sin poder fichar por la FIFA y queda el United, que no parece estar muy decidido, aunque si se da el caso de que Pogba se marche, los Red Devils se verían obligados a mover pieza. El United es la gran esperanza tal y como desliza Sport en su edición de hoy.

Con el cronómetro inglés jugando en contra de los intereses del Barça y del jugador, quedaría la opción del PSG, pero ahí el problema estriba en que el Barça quiere incluirle como moneda de cambio en la hipotética operación Neymar y el jeque no traga. Quiere dinero, no a Coutinho.

El agente de del jugador, Kia Joorabchian, ya mostró hace tres semanas su disgusto con la situación y, concretamente, con el trato que le dispensa el Barcelona. “No tenemos ofertas por el simple hecho de que el presidente del Barcelona nos dijo que el jugador era intransferible y clave para la próxima campaña y por eso no buscamos nada. Ahora veo que no es así”, dijo.

Ante esta situación quedan pocas opciones. Una es la de quedarse en el Barcelona y pelear por un puesto en el equipo. Una pugna que el curso pasado, cuando no estaba aun Griezmann, ya perdió ante Dembélé, que en palabras de Jon Aspiuazu, segundo entrenador, “le pasó un poco por encima”. La otra opción sería la de buscar la fórmula de una cesión similar a la que el Real Madrid utilizó la campaña pasada con James y el Bayern de Munich. Ahí podría entrar otros equipos como la Juventus o el propio Bayern en la operación.

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