El Porto asalta Da Luz y se lleva el clásico portugués
Los goles de Ze Luis y Marega dieron la victoria a los dragones. De Tomás fue titular pero apenas intervino en el juego y fue sustituido en el 70'.
Ignacio Camacho
As
Los Benfica-Porto pocas veces defraudan. A la rivalidad y la tensión existente en un partido que casi siempre es crucial para decidir el título, se le une la capacidad innata de estos dos clubes para reunir en el césped el talento y la juventud propia de jugadores que tienen en los dos equipos más fuertes de Portugal un escaparate único para dar el salto a un grande de Europa . Los jóvenes Florentino, Tavares y Grimaldo, en el Benfica, o Díaz y Baro, en el Porto, dieron razones más que suficientes para seguir con interés el gran clásico portugués.
Con el partido abierto desde el minuto 1, fue el Porto el primero en golpear. Ze Luis aprovechó en el 20' un balón muerto en el área pequeña a la salida de un córner para batir a Vlachodimos, que anteriormente se había hecho gigante ante el delantero de los dragones con una gran parada en un mano a mano.
El Porto dio un paso atrás entonces pero nunca perdió el control del partido. Apenas sufrió en su área y cuando recuperaba el balón, salía con velocidad al contraataque. No fue el día de Raúl de Tomás, que fue sustituido en el 70 después de no intervenir apenas. Tampoco de Seferovic, que tuvo el empate en sus botas al comienzo de la segunda parte. Marega desperdició la oportunidad de cerrar el partido en el 80' al quedarse completamente solo ante Vladichimos. pero al malí, con todo el tiempo del mundo para decidir donde quería poner el balón, se le vino el mundo encima y disparó fuera. Se redimió cinco minutos después con una jugada idéntica en la que, esta vez sí, definió a la perfección y selló el triunfo del Porto, que superan a su eterno rival en la clasificación.
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Los Benfica-Porto pocas veces defraudan. A la rivalidad y la tensión existente en un partido que casi siempre es crucial para decidir el título, se le une la capacidad innata de estos dos clubes para reunir en el césped el talento y la juventud propia de jugadores que tienen en los dos equipos más fuertes de Portugal un escaparate único para dar el salto a un grande de Europa . Los jóvenes Florentino, Tavares y Grimaldo, en el Benfica, o Díaz y Baro, en el Porto, dieron razones más que suficientes para seguir con interés el gran clásico portugués.
Con el partido abierto desde el minuto 1, fue el Porto el primero en golpear. Ze Luis aprovechó en el 20' un balón muerto en el área pequeña a la salida de un córner para batir a Vlachodimos, que anteriormente se había hecho gigante ante el delantero de los dragones con una gran parada en un mano a mano.
El Porto dio un paso atrás entonces pero nunca perdió el control del partido. Apenas sufrió en su área y cuando recuperaba el balón, salía con velocidad al contraataque. No fue el día de Raúl de Tomás, que fue sustituido en el 70 después de no intervenir apenas. Tampoco de Seferovic, que tuvo el empate en sus botas al comienzo de la segunda parte. Marega desperdició la oportunidad de cerrar el partido en el 80' al quedarse completamente solo ante Vladichimos. pero al malí, con todo el tiempo del mundo para decidir donde quería poner el balón, se le vino el mundo encima y disparó fuera. Se redimió cinco minutos después con una jugada idéntica en la que, esta vez sí, definió a la perfección y selló el triunfo del Porto, que superan a su eterno rival en la clasificación.
