El Barça salda su deuda histórica con Johan Cruyff
Espectacular inauguración del Estadi Johan Cruyff, la joya de la corona del fútbol base blaugrana. "Es un momento que pasará a la historia", destacó Josep María Bartomeu.
Santi Giménez
As
El Barça y Johan Cruyff tuvieron sus momentos buenos y sus momentos malos, pero es de esperar que ayer se saldara la deuda que el club tenía con el holandés con un acto tan histórico como emotivo. La inauguración del Estadi Johan Cruyff, la joya de la corona del fútbol base blaugrana, con un partido entre los juveniles del Barcelona de Víctor Valdés y el Ajax de Ronald de Boer que fue un espectáculo de juego descarado que seguro hubiera hecho las delicias del mito (ganó 0-2 el Ajax con una exhibición de Naci Unuar, primer goleador del estadio) , sirvió para que el barcelonismo viviera una jornada reivindicativa de los valores de los que la entidad se siente más orgullosa: la cantera, el respeto a los antiguos héroes, el buen juego y la unanimidad entre facciones que, demasiado a menudo, se han enfrentado en luchas cainitas.
Guillermo Amor, actual relaciones institucionales del Barcelona, era un espectador emocionado de este acto. El 23 de septiembre de 1982, hace pues 37 años, Amor era un anónimo infantil del Barcelona que pasó a la posteridad por ser el sustituto de Diego Armando Maradona en el partido que sirvió para inaugurar el Mini Estadi. Un campo en el que crecieron jugadores como Milla, De la Peña, Guardiola, Puyol, Valdés, Iniesta, Xavi, Piqué hasta los actuales Carles Pérez o Ansu Fati. Un campo que será derruido porque la casa donde habitan los sueños de los jóvenes que viven en La Masia y que forman parte del fútbol base blaugrana estará ahora en Sant Joan Despí. En este nuevo estadio muy coqueto de aire vintage, que según sus arquitectos se ha inspirado en el antiguo campo de la Calle Industria donde el Barcelona jugó de 1909 hasta 1922, cuando el club se trasladó a Les Corts tiene una capacidad para 6.000 espectadores.
El Estadi Johan Cruyff, decorado en su muro exterior con frases del holandés y grafitis de los jugadores que han formado parte de la historia del fútbol base blaugrana será el escenario de los partidos del Barcelona B, del equipo femenino (que por primera vez contará con un vestuario exclusivamente para su uso) y de los encuentros del juvenil en la Youth League.
A diferencia del Mini Estadi, no está en el entorno del Camp Nou, sino que se ha construido casi pared con pared con la residencia de futbolistas Oriol Tort, La Masia, donde está la Ciutat Esportiva Joan Gamper, en el municipio de Sant JOan Despí. Puede que esta distancia sea un reto para que los aficionados acudan a llenar sus gradas, pero sin duda, la instalación es magnífica. A la inauguración, acudieron 5214 espectadores.
La inauguración de esta primera estructura que forma parte del Espai Barça se llevó a cabo por todo lo alto. Jordi Cruyff realizó el saque de honor sobre un tepe del antiguo Mini Estadi traído para la ocasión. Estuvo acompañado por los capitanes de la primera plantilla (Messi, Piqué, Busquets y Sergi Roberto), del capitán del Barcelona B (Ferran Sarsanedas) y de la capitana del femenino (Marta Torrejón) además de la viuda de Johan, Dani Coster. En la grada, ex presidentes, autoridades civiles, la totalidad de técnicos de la casa y un camión de leyendas blaugrana que en su día fueron producto de la escuela Cruyff. “Estamos viviendo un momento histórico que permanecerá en la memoria colectiva del barcelonismo”, afirmó el presidente Josep María Bartomeu en su discurso.
Santi Giménez
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El Barça y Johan Cruyff tuvieron sus momentos buenos y sus momentos malos, pero es de esperar que ayer se saldara la deuda que el club tenía con el holandés con un acto tan histórico como emotivo. La inauguración del Estadi Johan Cruyff, la joya de la corona del fútbol base blaugrana, con un partido entre los juveniles del Barcelona de Víctor Valdés y el Ajax de Ronald de Boer que fue un espectáculo de juego descarado que seguro hubiera hecho las delicias del mito (ganó 0-2 el Ajax con una exhibición de Naci Unuar, primer goleador del estadio) , sirvió para que el barcelonismo viviera una jornada reivindicativa de los valores de los que la entidad se siente más orgullosa: la cantera, el respeto a los antiguos héroes, el buen juego y la unanimidad entre facciones que, demasiado a menudo, se han enfrentado en luchas cainitas.
Guillermo Amor, actual relaciones institucionales del Barcelona, era un espectador emocionado de este acto. El 23 de septiembre de 1982, hace pues 37 años, Amor era un anónimo infantil del Barcelona que pasó a la posteridad por ser el sustituto de Diego Armando Maradona en el partido que sirvió para inaugurar el Mini Estadi. Un campo en el que crecieron jugadores como Milla, De la Peña, Guardiola, Puyol, Valdés, Iniesta, Xavi, Piqué hasta los actuales Carles Pérez o Ansu Fati. Un campo que será derruido porque la casa donde habitan los sueños de los jóvenes que viven en La Masia y que forman parte del fútbol base blaugrana estará ahora en Sant Joan Despí. En este nuevo estadio muy coqueto de aire vintage, que según sus arquitectos se ha inspirado en el antiguo campo de la Calle Industria donde el Barcelona jugó de 1909 hasta 1922, cuando el club se trasladó a Les Corts tiene una capacidad para 6.000 espectadores.
El Estadi Johan Cruyff, decorado en su muro exterior con frases del holandés y grafitis de los jugadores que han formado parte de la historia del fútbol base blaugrana será el escenario de los partidos del Barcelona B, del equipo femenino (que por primera vez contará con un vestuario exclusivamente para su uso) y de los encuentros del juvenil en la Youth League.
A diferencia del Mini Estadi, no está en el entorno del Camp Nou, sino que se ha construido casi pared con pared con la residencia de futbolistas Oriol Tort, La Masia, donde está la Ciutat Esportiva Joan Gamper, en el municipio de Sant JOan Despí. Puede que esta distancia sea un reto para que los aficionados acudan a llenar sus gradas, pero sin duda, la instalación es magnífica. A la inauguración, acudieron 5214 espectadores.
La inauguración de esta primera estructura que forma parte del Espai Barça se llevó a cabo por todo lo alto. Jordi Cruyff realizó el saque de honor sobre un tepe del antiguo Mini Estadi traído para la ocasión. Estuvo acompañado por los capitanes de la primera plantilla (Messi, Piqué, Busquets y Sergi Roberto), del capitán del Barcelona B (Ferran Sarsanedas) y de la capitana del femenino (Marta Torrejón) además de la viuda de Johan, Dani Coster. En la grada, ex presidentes, autoridades civiles, la totalidad de técnicos de la casa y un camión de leyendas blaugrana que en su día fueron producto de la escuela Cruyff. “Estamos viviendo un momento histórico que permanecerá en la memoria colectiva del barcelonismo”, afirmó el presidente Josep María Bartomeu en su discurso.