Desastre ambiental en Bolivia: incendios forestales arrasan bosques de la Chiquitania
El Bosque Seco Chiquitano es un complejo de biodiversidad endémico donde está la Reserva Natural Tucavaca. Allí existen 554 especies de animales y más de 55 plantas endémicas. Aún no se sabe el número de especies afectadas.
Carolina Méndez, Isabel Mercado
Página Siete
En los últimos cinco días, el fuego ha consumido más de 450 000 hectáreas de bosques secos de la Chiquitania boliviana en el departamento de Santa Cruz, según registros oficiales.
Expertos y organizaciones ambientales responsabilizan al Estado por promover la ampliación de la frontera agrícola, precisamente, en los departamentos de Santa Cruz y Beni.
El Bosque Seco Chiquitano es un complejo de biodiversidad endémico donde está la Reserva Natural Tucavaca. Allí existen 554 especies de animales y más de 55 plantas endémicas. Aún no se sabe el número de especies afectadas.
(Este artículo es una colaboración periodística entre Mongabay Latam y el diario Página Siete de Bolivia)
“El fuego es un monstruo que nos está amenazando. Todo es cenizas y miedo”, narra con desesperación Iván Quezada, alcalde de Roboré. En los últimos cinco días, el fuego ha consumido más de 450 000 hectáreas de bosque, cifra que sumada a las hectáreas devastadas desde que empezaron los incendios forestales en Bolivia este año bordea el millón, según fuentes oficiales.
Cada año, en esta época, los chaqueos –quemas para preparar el terreno para la siembra o para la crianza de ganado- se realizan en el territorio boliviano, generando muchas veces estos focos de calor que pueden salirse de control. Pero a diferencia de temporadas anteriores, este año, un polémico decreto aprobado por el Estado, que promueve la ampliación de la frontera agrícola y permite la “quema controlada” en áreas de uso forestal, ha detonado una situación sin precedentes. La Chiquitanía está en emergencia.
Carolina Méndez, Isabel Mercado
Página Siete
En los últimos cinco días, el fuego ha consumido más de 450 000 hectáreas de bosques secos de la Chiquitania boliviana en el departamento de Santa Cruz, según registros oficiales.
Expertos y organizaciones ambientales responsabilizan al Estado por promover la ampliación de la frontera agrícola, precisamente, en los departamentos de Santa Cruz y Beni.
El Bosque Seco Chiquitano es un complejo de biodiversidad endémico donde está la Reserva Natural Tucavaca. Allí existen 554 especies de animales y más de 55 plantas endémicas. Aún no se sabe el número de especies afectadas.
(Este artículo es una colaboración periodística entre Mongabay Latam y el diario Página Siete de Bolivia)
“El fuego es un monstruo que nos está amenazando. Todo es cenizas y miedo”, narra con desesperación Iván Quezada, alcalde de Roboré. En los últimos cinco días, el fuego ha consumido más de 450 000 hectáreas de bosque, cifra que sumada a las hectáreas devastadas desde que empezaron los incendios forestales en Bolivia este año bordea el millón, según fuentes oficiales.
Cada año, en esta época, los chaqueos –quemas para preparar el terreno para la siembra o para la crianza de ganado- se realizan en el territorio boliviano, generando muchas veces estos focos de calor que pueden salirse de control. Pero a diferencia de temporadas anteriores, este año, un polémico decreto aprobado por el Estado, que promueve la ampliación de la frontera agrícola y permite la “quema controlada” en áreas de uso forestal, ha detonado una situación sin precedentes. La Chiquitanía está en emergencia.