Muere Vincent Lambert, el hombre en estado vegetativo cuyo caso dividió a Francia (y a su familia) por el debate sobre el derecho a morir
Francia, BBC
Vincent Lambert murió en la mañana de este jueves en el hospital de Reims, Francia, a las 08:24, hora local, tras más de una década en estado vegetativo, según dijeron abogados de sus familiares.
El francés de 42 años era un paciente tetrapléjico que sufrió un accidente de tránsito en 2008 que le obligó a estar postrado en una cama y le dejó con daños cerebrales irreversibles.
Vincent Lambert murió en la mañana de este jueves en el hospital de Reims, Francia, a las 08:24, hora local, tras más de una década en estado vegetativo, según dijeron abogados de sus familiares.
El francés de 42 años era un paciente tetrapléjico que sufrió un accidente de tránsito en 2008 que le obligó a estar postrado en una cama y le dejó con daños cerebrales irreversibles.
Se le mantuvo vivo con comida y agua a través de un tubo gástrico. El hombre podía respirar sin ayuda artificial y ocasionalmente abría los ojos.
"Estábamos para dejarlo ir. No es triste; la racionalidad se impuso. Fue un ser humano que estaba sufriendo y sus pocos gestos no significaban mucho", dijo su sobrino François Lambert.
Los médicos apagaron por orden de un tribunal las máquinas que le mantenían con vida el 2 de julio. Era la tercera vez que le sometían al protocolo de "fin de vida".
El caso de Lambert, quien trabajaba como enfermero psiquiátrico, encendió en Francia el debate sobre la eutanasia y el derecho a morir dignamente y provocó una larga batalla judicial que enfrentó a su propia familia.
Un "crimen de Estado"
Su esposa y tutora legal, Rachel, llevaba años pidiendo que le retiraran los tubos que lo mantenían con vida, mientras que los padres, católicos devotos, no estaban de acuerdo y lo consideraban una "eutanasia encubierta", argumentando que su hijo no estaba gravemente enfermo.
"En Francia, en 2019, nadie debe morir de hambre y sed", le escribieron en una carta al presidente de Francia, Emmanuel Macron, quien no quiso intervenir.
"Lo único que podemos hacer es resignarnos".
Viviane, la madre, dijo que estaba "orgullosa de los tribunales" cuando la corte decidió mantener con vida a su hijo antes de cambiar de nuevo la orden a favor de la esposa. Y se temía que Pierre, el padre de Lambert, tuviera un plan para secuestrarlo.
Este jueves, el abogado de los padres de Lambert le dijo a la agencia Reuters que se había cometido un "crimen de Estado".
Según recogen medios franceses, los padres planean denunciar al equipo médico que desconectó las máquinas que posibilitaban la vida de su hijo.
"Como un vegetal"
Seis hermanos de Lambert y un sobrino estaban de acuerdo con la retirada del apoyo artificial.
"Espero que ahora pueda descansar en paz", declaró a la prensa su sobrino François.
Hubo varios fallos judiciales durante los seis años que duró el proceso, el cual llegó hasta el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH).
El Comité de Naciones Unidas sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad pidió a Francia que retrasara la decisión de retirar el soporte vital mientras investigaba el caso más a fondo.
En Francia, la eutanasia es ilegal, aunque a los médicos sí se les permite colocar en una sedación profunda que lleve a la muerte a los pacientes con enfermedades terminales.
Holanda, Bélgica, Luxemburgo, Canadá y Colombia son los únicos cinco países en los que está regulada la eutanasia.
Lambert no dejó por escrito ningún testamento vital, pero su mujer y su sobrino han manifestado en varias ocasiones que él no habría querido "vivir como un vegetal".