Mercedes hace todo bien y ve a Ferrari "con problemas"
Nadie había hecho cuatro dobletes en las cuatro primeras carreras del año. Toto Wolff ya habla de la posible rivalidad entre Bottas y Hamilton, recordando a Rosberg.
Jesús Balseiro
As
Cuatro dobletes en las cuatro primeras carreras para Mercedes, algo que nunca había sucedido en la F1 (Williams logró tres en 1992), cuando parecía que el Ferrari estaba por fin a la altura del coche de Brackley. Y cuando, viernes sí viernes también, el SF90 de Vettel y Leclerc asusta con tiempos por vuelta inalcanzables para el esto. "No estábamos haciéndonos de menos, simplemente vimos a un Ferrari muy fuerte el viernes y sigo pensando que Leclerc era el más fuerte el sábado. Pero como en Bahréin, no tuvieron todo junto", opina Toto Wolff, director de la escudería, feliz por ver a sus dos pilotos ganando pero consciente de que, si nadie lo impide, se avecina una pelea por el título entre ellos.
"Tenemos la suerte de que Bottas y Hamilton tienen muy buena relación y no hay juegos por detrás. Aunque hemos visto otras relaciones deteriorarse cuando dos pilotos tenían la ambición de ganar un título", dice el austriaco en alusión a Rosberg y Lewis entre 2015 y 2016 (Nico ganó el segundo). "La relación importa y debemos evitar lo que pasó con Nico y Lewis. El respeto tiene que mantenerse y no permitiríamos que esa relación se estropease hasta el punto de afectar negativamente al equipo. Pero estamos muy lejos de eso". Al respecto, asegura que no hubiera habido órdenes de equipo que impidieran a Hamilton disputarle el triunfo al finlandés: "No me doy permiso para hablar con ellos durante las carreras directamente porque sé que soy muy emocional".
Aunque no tiene prisa: "Vettel y Leclerc pueden entrar en esta pelea muy rápido". Para Barcelona, circuito que tradicionalmente sonríe a sus monoplazas: "No sabemos cómo estaremos, el rendimiento fluctúa y el Ferrari de Bahréin era inalcanzable, como nosotros en Melbourne y China. Y aquí nosotros fuimos buenos el sábado, pero no tanto. Como aficionado quiero ver a varios equipos y pilotos compitiendo, pero tengo la ‘estrella’, y es en lo que tengo que pensar".
Su ventaja en la clasificación también es demérito del rival: "Desde la primera carrera hemos hecho lo que aquí se denomina poner todas las cosas juntas. No cometer errores, escoger las estrategias correctas, los pilotos no han fallado, y todo eso nos ha hecho ganar las cuatro primeras carreras mientras en el otro lado hay más… problemas".
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Cuatro dobletes en las cuatro primeras carreras para Mercedes, algo que nunca había sucedido en la F1 (Williams logró tres en 1992), cuando parecía que el Ferrari estaba por fin a la altura del coche de Brackley. Y cuando, viernes sí viernes también, el SF90 de Vettel y Leclerc asusta con tiempos por vuelta inalcanzables para el esto. "No estábamos haciéndonos de menos, simplemente vimos a un Ferrari muy fuerte el viernes y sigo pensando que Leclerc era el más fuerte el sábado. Pero como en Bahréin, no tuvieron todo junto", opina Toto Wolff, director de la escudería, feliz por ver a sus dos pilotos ganando pero consciente de que, si nadie lo impide, se avecina una pelea por el título entre ellos.
"Tenemos la suerte de que Bottas y Hamilton tienen muy buena relación y no hay juegos por detrás. Aunque hemos visto otras relaciones deteriorarse cuando dos pilotos tenían la ambición de ganar un título", dice el austriaco en alusión a Rosberg y Lewis entre 2015 y 2016 (Nico ganó el segundo). "La relación importa y debemos evitar lo que pasó con Nico y Lewis. El respeto tiene que mantenerse y no permitiríamos que esa relación se estropease hasta el punto de afectar negativamente al equipo. Pero estamos muy lejos de eso". Al respecto, asegura que no hubiera habido órdenes de equipo que impidieran a Hamilton disputarle el triunfo al finlandés: "No me doy permiso para hablar con ellos durante las carreras directamente porque sé que soy muy emocional".
Aunque no tiene prisa: "Vettel y Leclerc pueden entrar en esta pelea muy rápido". Para Barcelona, circuito que tradicionalmente sonríe a sus monoplazas: "No sabemos cómo estaremos, el rendimiento fluctúa y el Ferrari de Bahréin era inalcanzable, como nosotros en Melbourne y China. Y aquí nosotros fuimos buenos el sábado, pero no tanto. Como aficionado quiero ver a varios equipos y pilotos compitiendo, pero tengo la ‘estrella’, y es en lo que tengo que pensar".
Su ventaja en la clasificación también es demérito del rival: "Desde la primera carrera hemos hecho lo que aquí se denomina poner todas las cosas juntas. No cometer errores, escoger las estrategias correctas, los pilotos no han fallado, y todo eso nos ha hecho ganar las cuatro primeras carreras mientras en el otro lado hay más… problemas".
