Jovic no luce en la remontada del Eintrach rumbo a las semis
Al delantero pretendido por el Madrid no le llegaron balones. Agotado tras un gran desgaste, fue sustituido en el 76' y pudo celebrar el pase.
Mario Cortegana
As
Quien se asomase al Eintracht-Benfica al calor de la cercanía de Jovic al Madrid, tendrá que seguir juzgándole por los vídeos de Youtube y estar atento a la Bundesliga. Sin que le llegaran balones para combinar o rematar, fue sustituido en el 76' alejado de los focos. Pero, lo más importante, pudo celebrar el pase.
El Benfica se echó a dormir sobre el colchón del 4-2 de la ida, en una siesta que le costó tan cara como una eliminación a las puertas de las semifinales. En el primer tiempo no compareció, dejándole el balón al Eintracht como si eso, y así lo pareció a ratos, fuese más problema para los alemanes que para ellos. El intento de remontada tuvo más espíritu que argumento, suficiente sin embargo para que el sueño local siguiese vivo. Kostic, el más rebelde con Rebic (vio amarilla y se pierde el próximo partido), hizo de líder con un tirito en el 8' y con el 1-0 en el 36', en fuera de juego no señalado por los árbitros, a los que no pudo auxiliar el VAR, que no estará en la Europa League hasta la final.
Trapp y el palo, decisivos al final
El Benfica, que no quiso cuando pudo, no pudo cuando lo necesitó. Apenas le alcanzó para ilusionarse con los destellos de Joao Félix, en cualquier caso en una versión muy lejana a la de hace una semana. Rode, con Jovic interviniendo en la jugada, hizo el 2-0 definitivo en el 67' y pudo sentenciar en el 71', pero no lo logró y aún quedó un susto que Trapp y el palo dejaron en eso en el 84'.
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Quien se asomase al Eintracht-Benfica al calor de la cercanía de Jovic al Madrid, tendrá que seguir juzgándole por los vídeos de Youtube y estar atento a la Bundesliga. Sin que le llegaran balones para combinar o rematar, fue sustituido en el 76' alejado de los focos. Pero, lo más importante, pudo celebrar el pase.
El Benfica se echó a dormir sobre el colchón del 4-2 de la ida, en una siesta que le costó tan cara como una eliminación a las puertas de las semifinales. En el primer tiempo no compareció, dejándole el balón al Eintracht como si eso, y así lo pareció a ratos, fuese más problema para los alemanes que para ellos. El intento de remontada tuvo más espíritu que argumento, suficiente sin embargo para que el sueño local siguiese vivo. Kostic, el más rebelde con Rebic (vio amarilla y se pierde el próximo partido), hizo de líder con un tirito en el 8' y con el 1-0 en el 36', en fuera de juego no señalado por los árbitros, a los que no pudo auxiliar el VAR, que no estará en la Europa League hasta la final.
Trapp y el palo, decisivos al final
El Benfica, que no quiso cuando pudo, no pudo cuando lo necesitó. Apenas le alcanzó para ilusionarse con los destellos de Joao Félix, en cualquier caso en una versión muy lejana a la de hace una semana. Rode, con Jovic interviniendo en la jugada, hizo el 2-0 definitivo en el 67' y pudo sentenciar en el 71', pero no lo logró y aún quedó un susto que Trapp y el palo dejaron en eso en el 84'.
