Un presunto autor del atentado con drones contra Maduro confiesa a la CNN
El sujeto, que ocultó su identidad, proporcionó vídeos a la CNN sobre la preparación del atentado.
EFE / Washington
Uno de los presuntos autores del fallido atentado de agosto del año pasado contra el presidente venezolano, Nicolás Maduro, confesó a la CNN que compraron los drones online y que la operación se fraguó en Colombia.
El sujeto, que ocultó su identidad, proporcionó vídeos a la CNN sobre la preparación del atentado.
El fallido atentado ocurrió el pasado 4 de agosto mientras Maduro pronunciaba un discurso en Caracas frente a un desfile militar.
Maduro tuvo que interrumpir el discurso por la explosión de dos drones que sobrevolaban el evento.
Entrevistado por la CNN, el presunto autor del atentado explicó que en su grupo participaron militares venezolanos disidentes, admitió que el objetivo era asesinar a Maduro y dijo que la posibilidad de matar a otras personas en el intento fue "un riesgo que asumieron".
Los drones, supuestamente, los compraron por internet en Estados Unidos y los llevaron a una finca en Colombia, donde entrenaron su manejo.
En los vídeos se aprecia como los drones vuelan a gran altura y descienden en picado hasta una carpa que simulaba la ubicación de Maduro el día del atentado.
El presunto autor del atentado también explicó que desmontaron los drones para introducirlos en Venezuela sin ser detectados.
También aseguró que una vez transcurrido el intento de atentado mantuvieron hasta tres reuniones con funcionarios estadounidenses que "querían obtener datos".
El asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, John Bolton, uno de los diseñadoras de la estrategia de EE.UU. en Venezuela, insinuó después del atentado que se podía tratar de un "montaje".
El líder opositor venezolano Juan Guaidó, por su parte, insistió a la CNN en esa posibilidad: "Creo que fue algo interno, armado por el Gobierno. Termina haciéndole (a Maduro) lucir como víctima".
Las autoridades venezolanos detuvieron a una veintena de personas a las que vincularon con el atentado fallido, del que responsabilizaron a la oposición y a los gobiernos de EE.UU. y Colombia.
EFE / Washington
Uno de los presuntos autores del fallido atentado de agosto del año pasado contra el presidente venezolano, Nicolás Maduro, confesó a la CNN que compraron los drones online y que la operación se fraguó en Colombia.
El sujeto, que ocultó su identidad, proporcionó vídeos a la CNN sobre la preparación del atentado.
El fallido atentado ocurrió el pasado 4 de agosto mientras Maduro pronunciaba un discurso en Caracas frente a un desfile militar.
Maduro tuvo que interrumpir el discurso por la explosión de dos drones que sobrevolaban el evento.
Entrevistado por la CNN, el presunto autor del atentado explicó que en su grupo participaron militares venezolanos disidentes, admitió que el objetivo era asesinar a Maduro y dijo que la posibilidad de matar a otras personas en el intento fue "un riesgo que asumieron".
Los drones, supuestamente, los compraron por internet en Estados Unidos y los llevaron a una finca en Colombia, donde entrenaron su manejo.
En los vídeos se aprecia como los drones vuelan a gran altura y descienden en picado hasta una carpa que simulaba la ubicación de Maduro el día del atentado.
El presunto autor del atentado también explicó que desmontaron los drones para introducirlos en Venezuela sin ser detectados.
También aseguró que una vez transcurrido el intento de atentado mantuvieron hasta tres reuniones con funcionarios estadounidenses que "querían obtener datos".
El asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, John Bolton, uno de los diseñadoras de la estrategia de EE.UU. en Venezuela, insinuó después del atentado que se podía tratar de un "montaje".
El líder opositor venezolano Juan Guaidó, por su parte, insistió a la CNN en esa posibilidad: "Creo que fue algo interno, armado por el Gobierno. Termina haciéndole (a Maduro) lucir como víctima".
Las autoridades venezolanos detuvieron a una veintena de personas a las que vincularon con el atentado fallido, del que responsabilizaron a la oposición y a los gobiernos de EE.UU. y Colombia.