Sin Vinicius se acaba la fiesta
El brasileño fue suplente tras 12 titularidades y el Madrid cayó. En ese tiempo, el equipo promedió 2,25 goles, 12,2 tiros, 6,5 tiros a puerta...
Manu de Juan
As
Vinicius volvió al banquillo ante el Girona en el Bernabéu el pasado domingo. Lo hizo tras 12 titularidades consecutivas en las que el Madrid remontó el vuelo, después de meses de altibajos, y consiguió nueve victorias, un meritorio empate en el Camp Nou y dos derrotas (una, en Leganés, sin consecuencias por ser vuelta de Copa). Y, casualidad o no, el Madrid cayó ante el equipo gerundense con la ausencia del brasileño en el campo durante 58 minutos. Sin Vinicius, no hubo fiesta para un Real Madrid que se dejó buena parte de sus opciones en LaLiga.
Durante los 12 partidos en que Vinicius fue titular de forma consecutiva, el Madrid promedió 2,25 goles por partido, efectuó 12,2 disparos por choque, de los cuales 6,5 fueron a puerta, y la posesión media del Madrid en ese tramo fue del 56,3%. Los números del partido ante el Girona no fueron tan diferentes, aunque el Madrid sólo fue capaz de marcar un gol, pero sí disparó 14 veces, siete de ellas a puerta, y su posesión fue del 57%. Pero en ausencia de Vinicius sufrió para generar ocasiones, sobre todo en el segundo tiempo.
Hasta el 58', minuto en el que Vinicius saltó al césped, el Madrid realizó cinco remates a puerta y tres fuera, ocho en total; con el brasileño, fueron seis remates (dos a puerta, cuatro fuera) en 32 minutos. Sin él, el Madrid hizo un remate cada 7,2 minutos; con él, cada 5,3'. La media hora de que dispuso le valió para hacer tantos remates como Benzema, que disputó los 90 minutos, y para ser el segundo con más remates del Madrid, junto al francés, y sólo por detrás de Marcelo (3).
Vinicius se ha especializado en la finalización de jugadas, definitivamente: sólo dio cuatro pases en esa media hora, dos de ellos buenos. Lo suyo es recibir, encarar y acabar jugada, una suerte en la que sigue necesitando mejorar, pues sus dos disparos se fueron fuera de la portería. En esa media hora perdió cuatro balones, recuperó uno, cometió una falta y ganó uno de los dos duelos en que participó.
Solari, en conferencia de Prensa, se resistió a valorar si las rotaciones que hizo en el partido ante el Girona, que afectaron entre otros a Vinicius, fueron determinantes: "Esas preguntas son imposibles... Hablar sobre hipótesis pasadas o futuras no es un trabajo que podamos hacer. Tomamos decisiones y competimos. Luego con el resultado puesto, siempre se pudo haber hecho otra cosa. También cuando se gana...".
As
Vinicius volvió al banquillo ante el Girona en el Bernabéu el pasado domingo. Lo hizo tras 12 titularidades consecutivas en las que el Madrid remontó el vuelo, después de meses de altibajos, y consiguió nueve victorias, un meritorio empate en el Camp Nou y dos derrotas (una, en Leganés, sin consecuencias por ser vuelta de Copa). Y, casualidad o no, el Madrid cayó ante el equipo gerundense con la ausencia del brasileño en el campo durante 58 minutos. Sin Vinicius, no hubo fiesta para un Real Madrid que se dejó buena parte de sus opciones en LaLiga.
Durante los 12 partidos en que Vinicius fue titular de forma consecutiva, el Madrid promedió 2,25 goles por partido, efectuó 12,2 disparos por choque, de los cuales 6,5 fueron a puerta, y la posesión media del Madrid en ese tramo fue del 56,3%. Los números del partido ante el Girona no fueron tan diferentes, aunque el Madrid sólo fue capaz de marcar un gol, pero sí disparó 14 veces, siete de ellas a puerta, y su posesión fue del 57%. Pero en ausencia de Vinicius sufrió para generar ocasiones, sobre todo en el segundo tiempo.
Hasta el 58', minuto en el que Vinicius saltó al césped, el Madrid realizó cinco remates a puerta y tres fuera, ocho en total; con el brasileño, fueron seis remates (dos a puerta, cuatro fuera) en 32 minutos. Sin él, el Madrid hizo un remate cada 7,2 minutos; con él, cada 5,3'. La media hora de que dispuso le valió para hacer tantos remates como Benzema, que disputó los 90 minutos, y para ser el segundo con más remates del Madrid, junto al francés, y sólo por detrás de Marcelo (3).
Vinicius se ha especializado en la finalización de jugadas, definitivamente: sólo dio cuatro pases en esa media hora, dos de ellos buenos. Lo suyo es recibir, encarar y acabar jugada, una suerte en la que sigue necesitando mejorar, pues sus dos disparos se fueron fuera de la portería. En esa media hora perdió cuatro balones, recuperó uno, cometió una falta y ganó uno de los dos duelos en que participó.
Solari, en conferencia de Prensa, se resistió a valorar si las rotaciones que hizo en el partido ante el Girona, que afectaron entre otros a Vinicius, fueron determinantes: "Esas preguntas son imposibles... Hablar sobre hipótesis pasadas o futuras no es un trabajo que podamos hacer. Tomamos decisiones y competimos. Luego con el resultado puesto, siempre se pudo haber hecho otra cosa. También cuando se gana...".
