Asesino remata a boliviano dentro de una ambulancia
El ministro de Gobierno, Carlos Romero, dijo que el crimen podría estar ligado al submundo de las drogas. Alfredo R. W., de 48 años, fue herido en Puerto Suárez y cuando era llevado a una clínica del otro lado de la frontera fue ultimado con cuatro disparos
La Razón Digital / Daymira Barriga / La Paz
Alfredo R. W., de 48 años, fue ejecutado a tiros la noche del sábado 23 dentro de una ambulancia que lo trasladaba a un hospital de Corumbá, Brasil. El boliviano había sido atacado horas antes con un arma blanca y tenía heridas en el tórax y la espalda.
Ayer el ministro de Gobierno, Carlos Romero, dijo que el crimen podría estar ligado al submundo de las drogas. “Este tipo de crímenes en la frontera tienen nexos con el narcotráfico y podría tratarse de una vendetta”.
El primer ataque criminal contra el boliviano se produjo en el municipio fronterizo de Puerto Suárez, Santa Cruz. La víctima llegó con vida al Hospital San Juan de Dios, pero por la gravedad de sus lesiones los médicos dispusieron que sea transferido a un hospital del otro lado de la frontera.
En la carretera Ramón Gomes —ya en territorio brasileño— la ambulancia fue interceptada por un vehículo del cual descendió un individuo que abrió la puerta derecha, buscó al herido y efectuó cuatro disparos. Luego escapó. Dos balazos se alojaron en la cabeza de Alfredo R. W. y otros dos en los brazos.
En el vehículo se encontraban, además del chofer, un médico y una hija del connacional.
Este diario constató que el nombre de la víctima aparece en una apelación criminal del Tribunal de Justicia del Estado de Santa Catarina. El documento dice que en julio de 1996, los bolivianos Alfredo R. W., entonces de 23 años, Felipe G. S. y dos brasileños fueron denunciados por el tráfico de un cargamento de cocaína que partió desde Campo Grande.
Alfredo R. W., de 48 años, fue ejecutado a tiros la noche del sábado 23 dentro de una ambulancia que lo trasladaba a un hospital de Corumbá, Brasil. El boliviano había sido atacado horas antes con un arma blanca y tenía heridas en el tórax y la espalda.
Ayer el ministro de Gobierno, Carlos Romero, dijo que el crimen podría estar ligado al submundo de las drogas. “Este tipo de crímenes en la frontera tienen nexos con el narcotráfico y podría tratarse de una vendetta”.
El primer ataque criminal contra el boliviano se produjo en el municipio fronterizo de Puerto Suárez, Santa Cruz. La víctima llegó con vida al Hospital San Juan de Dios, pero por la gravedad de sus lesiones los médicos dispusieron que sea transferido a un hospital del otro lado de la frontera.
En la carretera Ramón Gomes —ya en territorio brasileño— la ambulancia fue interceptada por un vehículo del cual descendió un individuo que abrió la puerta derecha, buscó al herido y efectuó cuatro disparos. Luego escapó. Dos balazos se alojaron en la cabeza de Alfredo R. W. y otros dos en los brazos.
En el vehículo se encontraban, además del chofer, un médico y una hija del connacional.
Este diario constató que el nombre de la víctima aparece en una apelación criminal del Tribunal de Justicia del Estado de Santa Catarina. El documento dice que en julio de 1996, los bolivianos Alfredo R. W., entonces de 23 años, Felipe G. S. y dos brasileños fueron denunciados por el tráfico de un cargamento de cocaína que partió desde Campo Grande.
