Polémica en el Abierto de Australia por el descanso para ir al baño que se tomó Maria Sharapova: ¿qué hizo realmente?
La rusa se fue abucheada por el público tras la derrota ante Ash Barty y en la conferencia de prensa se enfadó cuando le consultaron
Infobae
Este fin de semana Maria Sharapova quedó eliminada en los octavos de final del Abierto de Australia tras caer ante la local Ashleigh Barty por 4-6, 6-1 y 6-4 en el Rod Laver Arena. Tras la culminación, la ex número 1 del ranking WTA se fue abucheada por el público.
La tenista rusa supo ser una de las profesionales más queridas del circuito, pero cuando en marzo de 2016 confesó haber dado positivo en un control antidopaje, su imagen se hundió. Desde entonces, se ha enfrentado ante varias colegas y su número de seguidores ha caído y este fin de semana, cuando cayó ante Barty, un nuevo y confuso episodio volvió a ubicarla en el centro de la polémica.
Luego de caer en el segundo set por 6-1, Sharapova pidió break-bathroom (descanso para ir al baño) y regresó siete minutos más tarde, algo que debió haber sido castigado, debido a que se demoró más de lo estipulado en el reglamento (90 segundos).
Al volver, el público del Rod Laver Arena la recibió con murmullos y en las redes sociales ya se criticaba su actitud: "Escondida en el baño para perturbar a su oponente", escribió un usuario en Twitter, mientras que otro soltó: "Intento patético".
Las rusa cayó finalmente en el tercer set y se despidió del primer Grand Slam del 2019, no sin antes cruzarse con los periodistas en conferencia de prensa: "Que quieres que responda ante esa pregunta? Creo que es una pregunta tonta", declaró enfadada ante la consulta de un periodista sobre su demora en el baño.
El reglamento estipula que las mujeres pueden tomarse dos descansos para ir al baño, siempre una vez que termina el set, mientras que los hombres, en los partidos a cinco sets, pueden utilizarlo en tres ocasiones. Además, el tiempo estimado es de 90 segundos, aunque se describe como "razonable" por lo que puede extenderse. Sin embargo, los siete minutos son exagerados y debieron haber sido castigados.
Uno de los antecedentes más cercanos es el de Ana Ivanovic, quien en 2010 perdió un game en Austria tras demorarse 11 minutos en un descanso para ir al baño: "Estoy realmente avergonzada porque comí yogurt justo antes del partido. ¡Nunca tomes yogurt antes de que tengas que jugar!", exclamó furiosa.
Sin embargo, dentro del circuito, varios tenistas han reconocido que el "break-bathroom" es utilizado para otros fines y no simplemente para descargarse en el inodoro. "La mayoría de las veces (se pide) cuando alguien pierde un juego. Muy rara vez sucede que sales cuando estás ganando", explicó John McEnroe, quien ahora se desempeña como comentarista.
Es que los tenistas aprovechan este espacio para despejar su mente y concentrarse nuevamente en el triunfo, como hizo Andy Murray en un duelo ante Novak Djokovic: "Me paré frente al espejo con el sudor goteando por mi cara, y supe que tenía que cambiar lo que estaba pasando dentro. Así que empecé a hablar. En voz alta. 'No estás perdiendo este partido', me dije a mí mismo. 'No estás perdiendo este partido'. Empecé un poco vacilante, pero mi voz se hizo más fuerte. 'Vos no va a dejar pasar esto. Este es tu tiempo'". Lo curioso fue que al contar la anécdota, el británico ni siquiera mencionó si realmente utilizó el inodoro.
En este marco, la sospecha sobre qué hizo realmente Sharapova se ha instalado en el circuito, sobre todo por sus antecedentes.
En 2016, la tenista rusa dio positivo en meldonium, una molécula presente en algunos medicamentos que provoca "un incremento en la resistencia de los deportistas, ayuda en la recuperación tras el ejercicio, protege contra el estrés y mejora la activación del sistema nervioso central", según explicó la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) en su informe.
En ese entonces, Sharapova explicó que el control había sido durante el Abierto de Australia y que la prohibición del meldonium había iniciado el 1 de enero, mientras que ella estaba realizando un tratamiento anterior y desconocía la nueva medida.
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Este fin de semana Maria Sharapova quedó eliminada en los octavos de final del Abierto de Australia tras caer ante la local Ashleigh Barty por 4-6, 6-1 y 6-4 en el Rod Laver Arena. Tras la culminación, la ex número 1 del ranking WTA se fue abucheada por el público.
La tenista rusa supo ser una de las profesionales más queridas del circuito, pero cuando en marzo de 2016 confesó haber dado positivo en un control antidopaje, su imagen se hundió. Desde entonces, se ha enfrentado ante varias colegas y su número de seguidores ha caído y este fin de semana, cuando cayó ante Barty, un nuevo y confuso episodio volvió a ubicarla en el centro de la polémica.
Luego de caer en el segundo set por 6-1, Sharapova pidió break-bathroom (descanso para ir al baño) y regresó siete minutos más tarde, algo que debió haber sido castigado, debido a que se demoró más de lo estipulado en el reglamento (90 segundos).
Al volver, el público del Rod Laver Arena la recibió con murmullos y en las redes sociales ya se criticaba su actitud: "Escondida en el baño para perturbar a su oponente", escribió un usuario en Twitter, mientras que otro soltó: "Intento patético".
Las rusa cayó finalmente en el tercer set y se despidió del primer Grand Slam del 2019, no sin antes cruzarse con los periodistas en conferencia de prensa: "Que quieres que responda ante esa pregunta? Creo que es una pregunta tonta", declaró enfadada ante la consulta de un periodista sobre su demora en el baño.
El reglamento estipula que las mujeres pueden tomarse dos descansos para ir al baño, siempre una vez que termina el set, mientras que los hombres, en los partidos a cinco sets, pueden utilizarlo en tres ocasiones. Además, el tiempo estimado es de 90 segundos, aunque se describe como "razonable" por lo que puede extenderse. Sin embargo, los siete minutos son exagerados y debieron haber sido castigados.
Uno de los antecedentes más cercanos es el de Ana Ivanovic, quien en 2010 perdió un game en Austria tras demorarse 11 minutos en un descanso para ir al baño: "Estoy realmente avergonzada porque comí yogurt justo antes del partido. ¡Nunca tomes yogurt antes de que tengas que jugar!", exclamó furiosa.
Sin embargo, dentro del circuito, varios tenistas han reconocido que el "break-bathroom" es utilizado para otros fines y no simplemente para descargarse en el inodoro. "La mayoría de las veces (se pide) cuando alguien pierde un juego. Muy rara vez sucede que sales cuando estás ganando", explicó John McEnroe, quien ahora se desempeña como comentarista.
Es que los tenistas aprovechan este espacio para despejar su mente y concentrarse nuevamente en el triunfo, como hizo Andy Murray en un duelo ante Novak Djokovic: "Me paré frente al espejo con el sudor goteando por mi cara, y supe que tenía que cambiar lo que estaba pasando dentro. Así que empecé a hablar. En voz alta. 'No estás perdiendo este partido', me dije a mí mismo. 'No estás perdiendo este partido'. Empecé un poco vacilante, pero mi voz se hizo más fuerte. 'Vos no va a dejar pasar esto. Este es tu tiempo'". Lo curioso fue que al contar la anécdota, el británico ni siquiera mencionó si realmente utilizó el inodoro.
En este marco, la sospecha sobre qué hizo realmente Sharapova se ha instalado en el circuito, sobre todo por sus antecedentes.
En 2016, la tenista rusa dio positivo en meldonium, una molécula presente en algunos medicamentos que provoca "un incremento en la resistencia de los deportistas, ayuda en la recuperación tras el ejercicio, protege contra el estrés y mejora la activación del sistema nervioso central", según explicó la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) en su informe.
En ese entonces, Sharapova explicó que el control había sido durante el Abierto de Australia y que la prohibición del meldonium había iniciado el 1 de enero, mientras que ella estaba realizando un tratamiento anterior y desconocía la nueva medida.