Ver el fútbol de pie
Aficionados del Borussia Dortmund portan banderas y bufandas mientras animan de pie a su equipo en el famoso muro Südtribune del Signal Iduna
Pablo M. Fuentenebro
As
Ir al fútbol en los sesenta, setenta u ochenta del siglo pasado era la emocionante experiencia de vibrar durante noventa minutos, grada arriba, grada abajo, al más puro estilo festival de música. Ver el fútbol de pie se ha convertido en un tema tabú para la UEFA, la FIFA y para muchos países de primer nivel. La tragedia de Hillsborough, donde murieron por aplastamiento y asfixia 96 personas aficionadas del Liverpool en 1989, supuso un antes y un después en la manera de acudir al fútbol. Las reglas se endurecieron y los estadios acondicionaron sus aforos a normativas más seguras. Aun así el aficionado en el estadio sigue poniéndose de pie. Si no revisen las imágenes de los hinchas de Islandia, Suecia, Inglaterra o Dinamarca, por ejemplo, en el último Mundial.
El pasado abril el West Bromwich Albion reabrió el debate en la Premier y hasta en el Parlamento británico. Reclama la posibilidad de crear en una esquina de su estadio (The Hawthorns) una pequeña grada para que sus hinchas vean el fútbol de pie con asientos que incluyen un dispositivo de bloqueo vertical. Espacio parecido al que ya tiene el Celtic de Glasgow en Celtic Park con su llamada 'Safe standing area'. La iniciativa aglutina a más de 100.000 firmas y el debate ya ha llegado hasta los parlamentarios británicos de Westminster. La Ministra de Deportes del Gobierno Británico, Tracey Crouc, ha rechazado la petición del West Brom pero el debate ya está en la calle. El Tottenham ha hecho público que en su nuevo estadio en construcción prevé un área para ver el fútbol de pie. Incluso, el Chelsea en su nuevo Stamford Bridge lo estudia. Los aficionados del Liverpool han sido de los más movilizados en esta nueva posibilidad. Los éxitos de estos espacios en la Bundesliga (el famoso muro Südtribune del Westfalenstadion del Borussia de Dortmund es un buen ejemplo), aunque el modelo sobre el que trabaja el West Brom son las áreas seguras del Rhein-Neckar-Arena del Hoffenheim. El debate entre los comunes ha abierto una pequeña esperanza entre los clubes pero se debe producir un cambio de legislación de la Ley de Espectadores de Fútbol de 1989, que prohíbe las entradas de pie en las dos principales categorías del fútbol inglés. Mientras tanto, el Shrewsbury Town, de la Legaue One, se convirtió en el primer club de Inglaterra y de Gales en abrir una ‘safe standing area’.
El fútbol del Siglo XXI ya no es el de los ochenta y la tecnología ha llegado. Los avances en el diseño de los estadios hace que los sistemas de las ‘safe standing area’ estén súper estudiados. Desde los anclajes para los asientos, las medidas de seguridad (barras, salidas de emergencia, métodos de agarre…) como la capacidad y el espacio por metro cuadrado pensado y necesario para cada espectador. Unas pequeñas gradas en cada estadio para ver el ´fútbol de pie' se sabe que crean una atmósfera especial en cada encuentro de fútbol. Y son más baratas. La UEFA y la FIFA son el principal escollo para la vuelta al fútbol de pie (los clubes de Alemania no pueden usarlas en las competiciones europeas). De momento, estadios de Holanda, Suecia, Suiza, Austria, Dinamarca y en muchos estadios nuevos de la MLS tienen ‘safe standing area’.
¿Y en España?
La legislación es muy tajante. La Ley del Deporte de 1990 como el Real Decreto de 2007 establecen que las gradas deben tener asientos y estar numeradas en las categorías profesionales. Sólo un pequeño movimiento de hinchas de la Real Sociedad ha solicitado una vuelta a los orígenes, añorando el ambiente del viejo Atocha. No hay más debate alrededor y es un tema algo espinoso. Ni el nuevo estadio del Atlético, Wanda Metropolitano, ni el Nuevo Mestalla en construcción, han pensado en esas áreas. No hay corrientes favorables para apoyarlas y todo se reduce a la seguridad.
Eso sí, se han duplicado en los últimos tiempos las gradas de animación en los fondos y la afición ve la mayor parte del encuentro de pie, sin ser una zona totalmente acondicionada para ello, lo que multiplica la peligrosidad. Si que hay un pensamiento favorable a las 'safe standing area' en el resto de las Ligas europeas y más tarde o más temprano la deriva llegará a España. Además, con los precios desorbitados de las localidades en España ver el fútbol de pie siempre traería una rebajilla.
Pablo M. Fuentenebro
As
Ir al fútbol en los sesenta, setenta u ochenta del siglo pasado era la emocionante experiencia de vibrar durante noventa minutos, grada arriba, grada abajo, al más puro estilo festival de música. Ver el fútbol de pie se ha convertido en un tema tabú para la UEFA, la FIFA y para muchos países de primer nivel. La tragedia de Hillsborough, donde murieron por aplastamiento y asfixia 96 personas aficionadas del Liverpool en 1989, supuso un antes y un después en la manera de acudir al fútbol. Las reglas se endurecieron y los estadios acondicionaron sus aforos a normativas más seguras. Aun así el aficionado en el estadio sigue poniéndose de pie. Si no revisen las imágenes de los hinchas de Islandia, Suecia, Inglaterra o Dinamarca, por ejemplo, en el último Mundial.
El pasado abril el West Bromwich Albion reabrió el debate en la Premier y hasta en el Parlamento británico. Reclama la posibilidad de crear en una esquina de su estadio (The Hawthorns) una pequeña grada para que sus hinchas vean el fútbol de pie con asientos que incluyen un dispositivo de bloqueo vertical. Espacio parecido al que ya tiene el Celtic de Glasgow en Celtic Park con su llamada 'Safe standing area'. La iniciativa aglutina a más de 100.000 firmas y el debate ya ha llegado hasta los parlamentarios británicos de Westminster. La Ministra de Deportes del Gobierno Británico, Tracey Crouc, ha rechazado la petición del West Brom pero el debate ya está en la calle. El Tottenham ha hecho público que en su nuevo estadio en construcción prevé un área para ver el fútbol de pie. Incluso, el Chelsea en su nuevo Stamford Bridge lo estudia. Los aficionados del Liverpool han sido de los más movilizados en esta nueva posibilidad. Los éxitos de estos espacios en la Bundesliga (el famoso muro Südtribune del Westfalenstadion del Borussia de Dortmund es un buen ejemplo), aunque el modelo sobre el que trabaja el West Brom son las áreas seguras del Rhein-Neckar-Arena del Hoffenheim. El debate entre los comunes ha abierto una pequeña esperanza entre los clubes pero se debe producir un cambio de legislación de la Ley de Espectadores de Fútbol de 1989, que prohíbe las entradas de pie en las dos principales categorías del fútbol inglés. Mientras tanto, el Shrewsbury Town, de la Legaue One, se convirtió en el primer club de Inglaterra y de Gales en abrir una ‘safe standing area’.
El fútbol del Siglo XXI ya no es el de los ochenta y la tecnología ha llegado. Los avances en el diseño de los estadios hace que los sistemas de las ‘safe standing area’ estén súper estudiados. Desde los anclajes para los asientos, las medidas de seguridad (barras, salidas de emergencia, métodos de agarre…) como la capacidad y el espacio por metro cuadrado pensado y necesario para cada espectador. Unas pequeñas gradas en cada estadio para ver el ´fútbol de pie' se sabe que crean una atmósfera especial en cada encuentro de fútbol. Y son más baratas. La UEFA y la FIFA son el principal escollo para la vuelta al fútbol de pie (los clubes de Alemania no pueden usarlas en las competiciones europeas). De momento, estadios de Holanda, Suecia, Suiza, Austria, Dinamarca y en muchos estadios nuevos de la MLS tienen ‘safe standing area’.
¿Y en España?
La legislación es muy tajante. La Ley del Deporte de 1990 como el Real Decreto de 2007 establecen que las gradas deben tener asientos y estar numeradas en las categorías profesionales. Sólo un pequeño movimiento de hinchas de la Real Sociedad ha solicitado una vuelta a los orígenes, añorando el ambiente del viejo Atocha. No hay más debate alrededor y es un tema algo espinoso. Ni el nuevo estadio del Atlético, Wanda Metropolitano, ni el Nuevo Mestalla en construcción, han pensado en esas áreas. No hay corrientes favorables para apoyarlas y todo se reduce a la seguridad.
Eso sí, se han duplicado en los últimos tiempos las gradas de animación en los fondos y la afición ve la mayor parte del encuentro de pie, sin ser una zona totalmente acondicionada para ello, lo que multiplica la peligrosidad. Si que hay un pensamiento favorable a las 'safe standing area' en el resto de las Ligas europeas y más tarde o más temprano la deriva llegará a España. Además, con los precios desorbitados de las localidades en España ver el fútbol de pie siempre traería una rebajilla.