Descanso para el guerrero

Moscú, EFE
La selección de Bélgica disfruta este sábado de una jornada de descanso tras lograr el viernes la clasificación para las semifinales de Rusia 2018, después de eliminar a Brasil el viernes, en el choque disputado en Kazan.


El plantel de Roberto Martínez, que se situó entre los cuatro mejores de un Mundial por segunda vez en su historia tras México 1986, cuando fue apartada de la final por Argentina, disfruta de uno de los momentos históricos de su selección.

La victoria ante Brasil ha disparado definitivamente las expectativas del combinado de los Diablos Rojos, en manos de una de las generaciones más valiosas que jamás ha tenido y que, por fin, han esquivado la decepción para hacer valer sus perspectivas.

La noche en el Kazan Arena fue larga pero inmensa de felicidad para sus protagonistas, que trasladaron su dicha a todo un país que ya vive absolutamente pendiente del fútbol

Roberto Martínez se ha convertido en un referente para el fútbol belga. El preparador español ha sido el único, hasta ahora, en dar con la tecla adecuada en un grupo de futbolistas plagados de talento que ha solido quedarse a medio camino de sus expectativas. Martínez ha aunado perfectamente a esta camada de futbolistas, centradas en la consecución de un objetivo común y sin precedentes.

La delegación belga abandonó tarde el estadio con destino a su cuartel general en el Moscú Country Club, donde enfilarán la puesta en marcha hacia la semifinal con Francia del próximo martes.

Mientras, Roberto Martínez ha propuesto una jornada relajada a su plantel. Sin contratiempos severos en sus hombres los jugadores han disfrutado de una día de recuperación después del partido.

No han saltado al campo de las instalaciones en las afueras de la capital los componentes de los diablos rojos, que han tenido un tiempo de baño y masaje por la mañana y un tiempo de recuperación después.

Tarde libre con descanso y ocio forma parte del resto del programa de un día sin exigencias físicas.

Roberto Martínez y su plantilla retomará la actividad sobre el césped el domingo, cuando empezará a preparar el encuentro de semifinales frente a Francia en San Petersburgo.

Después la delegación belga tiene previsto el traslado a la ciudad del norte de Rusia para completar la puesta a punto el lunes, cumplir con los requisitos oficiales previos al choque y pisar el terreno de juego del escenario del encuentro.

Un desafío más para la selección de Bélgica, que busca alcanzar la final de un Campeonato del Mundo por primera vez en su historia.

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