La ONU acuerda una investigación por la muerte de manifestantes en Gaza
Netanyahu replica que el Consejo de la ONU “ha demostrado una vez más ser un organismo hipócrita cuyo objetivo es dañar a Israel"
Lourdes Baeza
Jerusalén, El País
El Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas aprobó ayer la creación de una comisión internacional para investigar la muerte de más de un centenar de palestinos en las protestas en la frontera de Gaza, que se saldaron también con millares de heridos por disparos de soldados de Israel. El primer ministro Benjamín Netanyahu replicó en un comunicado que el Consejo de la ONU “ha demostrado una vez más ser un organismo hipócrita cuyo objetivo es dañar a Israel y respaldar el terrorismo”. La resolución fue aprobada por 29 votos a favor, dos en contra (EE UU y Australia) y 14 abstenciones.
La comisión internacional independiente tendrá como misión investigar las supuestas violaciones de los derechos humanos cometidas durante las manifestaciones masivas ante la valla de separación de la Franja, que se han llevado a cabo desde el 30 de marzo pasado.
Las movilizaciones para reclamar el derecho al retorno de los refugiados palestinos a los lugares que tuvieron que abandonar hace 70 años tras el nacimiento de Israel alcanzaron su máxima intensidad el pasado lunes —con la muerte de 60 manifestantes— coincidiendo con la apertura de la Embajada de Estados Unidos, trasladada desde Tel Aviv a Jerusalén en una polémica decisión del presidente Donald Trump.
El Consejo de Derechos Humanos reclama a Israel que —en contra de su habitual veto— colabore con la comisión de investigación y autorice la entrada de sus miembros a través de sus fronteras, así como por las que controla en los territorios palestinos. Todos los accesos se hallan en manos del Ejército hebreo, salvo el paso de Refah entre Gaza y Egipto. Entre otros objetivos, los investigadores deberán identificar a los responsables de presuntos crímenes contra la humanidad.
El relator especial de la ONU para los Derechos Humanos de los Palestinos, el canadiense Michael Lynk, calificó los hechos ocurridos en la frontera de Gaza como “asesinatos deliberados” y “crímenes de guerra” imputables ante la Corte Penal Internacional. Lynk achacó la responsabilidad del estallido de violencia al bloqueo militar que Israel ejerce sobre los dos millones de habitantes del enclave palestino desde 2007.
La embajadora de Israel ante la sede de la ONU en Ginebra, Aviva Raz Shechter, negó cualquier responsabilidad de su Gobierno y alegó que su país “solo se defiende a sí mismo, como lo haría cualquier otro Estado” ante una agresión organizada por Hamás. La representante diplomática acusó al movimiento islamista palestino que gobierna en Gaza desde hace más de una década de “utilizar a su población como escudos humanos”. Esta tesis fue respaldada con firmeza por Estados Unidos en la sesión celebrada en el recinto de Naciones Unidas de la ciudad suiza.
“La ocupación [israelí] debe terminar, de modo que el pueblo de Palestina pueda ser liberado”, advirtió el alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, el jordano Zeid Raad al Hussein. “Han muerto a causa de disparos personas desarmadas en manifestaciones pacíficas”, concluyó.
El primer ministro de Israel rechazó de plano la resolución aprobada por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU. “Seguiremos protegiendo a nuestros ciudadanos contra el terrorismo, en ejercicio del derecho de legítima defensa”, declaró Netanyahu.
“El propósito del Consejo no es investigar la verdad, sino violar el derecho a la autodefensa de Israel y demonizar al Estado judío”, puntualizó un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores. “Israel actúa legalmente en la protección de su soberanía y la prevención de un asalto en masa en la frontera para llevar a cabo ataques terroristas dirigidos por la organización terrorista Hamás”, agregó la misma fuente.
Cita islámica en Turquía
Mientras, decenas de miles de manifestantes protestaron ayer en Estambul contra la muerte de manifestantes palestinos en Gaza poco antes del inicio de una reunión urgente de la Organización de Cooperación Islámica (OCI) convocada por el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan.
El mandatario turco comparó las acciones del Ejército israelí contra los palestinos en Gaza con la persecución sufrida por los judíos durante la Segunda Guerra Mundial. “Lo que Israel hace es terrorismo de Estado”, acusó el presidente Erdogan en la apertura de la cumbre musulmana.
Lourdes Baeza
Jerusalén, El País
El Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas aprobó ayer la creación de una comisión internacional para investigar la muerte de más de un centenar de palestinos en las protestas en la frontera de Gaza, que se saldaron también con millares de heridos por disparos de soldados de Israel. El primer ministro Benjamín Netanyahu replicó en un comunicado que el Consejo de la ONU “ha demostrado una vez más ser un organismo hipócrita cuyo objetivo es dañar a Israel y respaldar el terrorismo”. La resolución fue aprobada por 29 votos a favor, dos en contra (EE UU y Australia) y 14 abstenciones.
La comisión internacional independiente tendrá como misión investigar las supuestas violaciones de los derechos humanos cometidas durante las manifestaciones masivas ante la valla de separación de la Franja, que se han llevado a cabo desde el 30 de marzo pasado.
Las movilizaciones para reclamar el derecho al retorno de los refugiados palestinos a los lugares que tuvieron que abandonar hace 70 años tras el nacimiento de Israel alcanzaron su máxima intensidad el pasado lunes —con la muerte de 60 manifestantes— coincidiendo con la apertura de la Embajada de Estados Unidos, trasladada desde Tel Aviv a Jerusalén en una polémica decisión del presidente Donald Trump.
El Consejo de Derechos Humanos reclama a Israel que —en contra de su habitual veto— colabore con la comisión de investigación y autorice la entrada de sus miembros a través de sus fronteras, así como por las que controla en los territorios palestinos. Todos los accesos se hallan en manos del Ejército hebreo, salvo el paso de Refah entre Gaza y Egipto. Entre otros objetivos, los investigadores deberán identificar a los responsables de presuntos crímenes contra la humanidad.
El relator especial de la ONU para los Derechos Humanos de los Palestinos, el canadiense Michael Lynk, calificó los hechos ocurridos en la frontera de Gaza como “asesinatos deliberados” y “crímenes de guerra” imputables ante la Corte Penal Internacional. Lynk achacó la responsabilidad del estallido de violencia al bloqueo militar que Israel ejerce sobre los dos millones de habitantes del enclave palestino desde 2007.
La embajadora de Israel ante la sede de la ONU en Ginebra, Aviva Raz Shechter, negó cualquier responsabilidad de su Gobierno y alegó que su país “solo se defiende a sí mismo, como lo haría cualquier otro Estado” ante una agresión organizada por Hamás. La representante diplomática acusó al movimiento islamista palestino que gobierna en Gaza desde hace más de una década de “utilizar a su población como escudos humanos”. Esta tesis fue respaldada con firmeza por Estados Unidos en la sesión celebrada en el recinto de Naciones Unidas de la ciudad suiza.
“La ocupación [israelí] debe terminar, de modo que el pueblo de Palestina pueda ser liberado”, advirtió el alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, el jordano Zeid Raad al Hussein. “Han muerto a causa de disparos personas desarmadas en manifestaciones pacíficas”, concluyó.
El primer ministro de Israel rechazó de plano la resolución aprobada por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU. “Seguiremos protegiendo a nuestros ciudadanos contra el terrorismo, en ejercicio del derecho de legítima defensa”, declaró Netanyahu.
“El propósito del Consejo no es investigar la verdad, sino violar el derecho a la autodefensa de Israel y demonizar al Estado judío”, puntualizó un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores. “Israel actúa legalmente en la protección de su soberanía y la prevención de un asalto en masa en la frontera para llevar a cabo ataques terroristas dirigidos por la organización terrorista Hamás”, agregó la misma fuente.
Cita islámica en Turquía
Mientras, decenas de miles de manifestantes protestaron ayer en Estambul contra la muerte de manifestantes palestinos en Gaza poco antes del inicio de una reunión urgente de la Organización de Cooperación Islámica (OCI) convocada por el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan.
El mandatario turco comparó las acciones del Ejército israelí contra los palestinos en Gaza con la persecución sufrida por los judíos durante la Segunda Guerra Mundial. “Lo que Israel hace es terrorismo de Estado”, acusó el presidente Erdogan en la apertura de la cumbre musulmana.