Juez recibió los últimos argumentos de demandados
EFE / Miami
El caso civil contra el expresidente Gonzalo Sánchez de Lozada y el exministro Carlos Sánchez Berzaín está otra vez en manos del juez James I. Cohn, quien recibió ayer los últimos argumentos de la defensa de los acusados, quienes buscan con una moción desestimar el proceso.
Ayer vencía el plazo para que las partes presentaran sus últimas respuestas y a partir de ahora el juez Cohn puede llamar a una audiencia en el tribunal civil de primera instancia de Fort Lauderdale (a 50 km de Miami) o tomar la decisión en cualquier momento y publicarla.
El 3 de abril un jurado responsabilizó a Sánchez de Lozada y Sánchez Berzaín de la muerte de 8 personas en las protestas sociales de 2003 y fijó compensaciones por 10 millones de dólares.
Sin embargo, la defensa tachó de “incoherente” que ambos fueran declarados responsables de ejecuciones extrajudiciales, pero no así de homicidio culposo (wrongful death, en inglés).
La defensa además había interpuesto durante los primeros días del juicio, el pasado 18 de marzo, una moción amparada en la Regla 50, en la que cuestionaba la evidencia presentada contra los exfuncionarios bolivianos.
“No hay pruebas que permitieran a un jurado encontrar responsables a los demandados”, dijo Mauricio Balcázar, quien fue ministro de Comunicación en el primer Gobierno de Sánchez de Lozada (1993-1997).
Balcázar precisó que el juez puede emitir “un juicio a favor de los demandados independientemente de lo que haya hecho el jurado”, si considera que no hay evidencia que permita al jurado decidir a favor de los demandantes.
La Regla 50 establece que un tribunal de primera instancia puede anular la decisión de un jurado si considera que no tuvo una base probatoria legalmente suficiente para decidir la responsabilidad de los demandados. Sin embargo, los demandantes solicitaron al tribunal “denegar” la moción y emitir un juicio “consistente con el veredicto del jurado”.
El caso civil contra el expresidente Gonzalo Sánchez de Lozada y el exministro Carlos Sánchez Berzaín está otra vez en manos del juez James I. Cohn, quien recibió ayer los últimos argumentos de la defensa de los acusados, quienes buscan con una moción desestimar el proceso.
Ayer vencía el plazo para que las partes presentaran sus últimas respuestas y a partir de ahora el juez Cohn puede llamar a una audiencia en el tribunal civil de primera instancia de Fort Lauderdale (a 50 km de Miami) o tomar la decisión en cualquier momento y publicarla.
El 3 de abril un jurado responsabilizó a Sánchez de Lozada y Sánchez Berzaín de la muerte de 8 personas en las protestas sociales de 2003 y fijó compensaciones por 10 millones de dólares.
Sin embargo, la defensa tachó de “incoherente” que ambos fueran declarados responsables de ejecuciones extrajudiciales, pero no así de homicidio culposo (wrongful death, en inglés).
La defensa además había interpuesto durante los primeros días del juicio, el pasado 18 de marzo, una moción amparada en la Regla 50, en la que cuestionaba la evidencia presentada contra los exfuncionarios bolivianos.
“No hay pruebas que permitieran a un jurado encontrar responsables a los demandados”, dijo Mauricio Balcázar, quien fue ministro de Comunicación en el primer Gobierno de Sánchez de Lozada (1993-1997).
Balcázar precisó que el juez puede emitir “un juicio a favor de los demandados independientemente de lo que haya hecho el jurado”, si considera que no hay evidencia que permita al jurado decidir a favor de los demandantes.
La Regla 50 establece que un tribunal de primera instancia puede anular la decisión de un jurado si considera que no tuvo una base probatoria legalmente suficiente para decidir la responsabilidad de los demandados. Sin embargo, los demandantes solicitaron al tribunal “denegar” la moción y emitir un juicio “consistente con el veredicto del jurado”.