Gio Simeone enamora a Florencia
En julio cumplirá 23 años, pero ya ha conquistado Italia tras una temporada positiva en el Genoa: 13 goles en 36 partidos.
Mirko Calemme
As
Que sea un predestinado ya estaba claro. Y no sólo por su apellido. Giovanni Simeone tiene en la mirada la garra, el espíritu de sacrificio que hizo leyenda a su papá. En julio cumplirá 23 años, pero ya ha conquistado Italia: tras una temporada positiva en el Genoa (13 goles en 36 partidos), ha llegado a la Fiorentina por 15 millones más tres de bonus. Ya la enamoró: suma 14 dianas, las mismas que Batistuta en su primer curso viola. Le había prometido un asado a todo el equipo si lograra mejorar sus registros del año pasado. Le tocará pagar gracias al domingo, su día grande: el primer hat-trick, al Nápoles, que cae en el Franchi después de nueve años y dice prácticamente adiós al sueño de llevarse el scudetto.
Hace justo 18 años su padre, con un cabezazo, tumbó a la Juve y acercó la Lazio al tricolore. De momento, el Cholito lucha por un sitio en la Europa League, aunque pronto podría recalar en un equipo de Champions, su gran sueño. La desea tanto que se tatuó el logo de la competición en el antebrazo izquierdo con apenas 14 años. Las grandes noches son su hábitat: le ha marcado goles a Roma, Inter, Milán y a los azzurri. Hace un año, también le metió dos a la Juventus. No le faltan novias: en Italia dicen que le buscan Tottenham, Lyon, Valencia, Villarreal y Sevilla. De momento, él disfruta de su Florencia, que le está haciendo crecer como futbolista y como hombre. Ha vivido en primera persona la tragedia de Astori: “Siempre le noto con nosotros”, contó. Su recuerdo le ha fortalecido. Y se nota.
“Siempre fui del Atleti”
Tras el Bayern-Madrid, Zidane elogió al Cholito en Mediaset Italia: “Me alegré por su hat-trick, es un gran futbolista: me gusta”. En el plató, no obstante, el punta reconoció que sería difícil verle de blanco: “Siempre fui del Atleti y es un orgullo ver a mi padre defendiendo los colores rojiblancos”.
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Que sea un predestinado ya estaba claro. Y no sólo por su apellido. Giovanni Simeone tiene en la mirada la garra, el espíritu de sacrificio que hizo leyenda a su papá. En julio cumplirá 23 años, pero ya ha conquistado Italia: tras una temporada positiva en el Genoa (13 goles en 36 partidos), ha llegado a la Fiorentina por 15 millones más tres de bonus. Ya la enamoró: suma 14 dianas, las mismas que Batistuta en su primer curso viola. Le había prometido un asado a todo el equipo si lograra mejorar sus registros del año pasado. Le tocará pagar gracias al domingo, su día grande: el primer hat-trick, al Nápoles, que cae en el Franchi después de nueve años y dice prácticamente adiós al sueño de llevarse el scudetto.
Hace justo 18 años su padre, con un cabezazo, tumbó a la Juve y acercó la Lazio al tricolore. De momento, el Cholito lucha por un sitio en la Europa League, aunque pronto podría recalar en un equipo de Champions, su gran sueño. La desea tanto que se tatuó el logo de la competición en el antebrazo izquierdo con apenas 14 años. Las grandes noches son su hábitat: le ha marcado goles a Roma, Inter, Milán y a los azzurri. Hace un año, también le metió dos a la Juventus. No le faltan novias: en Italia dicen que le buscan Tottenham, Lyon, Valencia, Villarreal y Sevilla. De momento, él disfruta de su Florencia, que le está haciendo crecer como futbolista y como hombre. Ha vivido en primera persona la tragedia de Astori: “Siempre le noto con nosotros”, contó. Su recuerdo le ha fortalecido. Y se nota.
“Siempre fui del Atleti”
Tras el Bayern-Madrid, Zidane elogió al Cholito en Mediaset Italia: “Me alegré por su hat-trick, es un gran futbolista: me gusta”. En el plató, no obstante, el punta reconoció que sería difícil verle de blanco: “Siempre fui del Atleti y es un orgullo ver a mi padre defendiendo los colores rojiblancos”.
