Las donaciones a la Asociación Nacional del Rifle se dispararon tras la masacre de Parkland
En las dos semanas posteriores a la tragedia la organización recibió 70.000 dólares, frente a los 27.000 que obtuvo en las dos semanas anteriores
Pablo de Llano
Miami, El País
La conmoción causada por la masacre en el instituto de Parkland (17 muertos) no ha hecho flaquear el compromiso con las armas en las filas de la Asociación Nacional del Rifle (NRA en sus siglas en inglés), la organización más poderosa de Estados Unidos en la promoción del mercado de armamento para civiles. Los ingresos de la NRA no solo no han bajado, como cabría esperar, sino que se han disparado. En las dos semanas posteriores a la tragedia el lobby recibió 70.870 dólares en donaciones, frente a los 27.100 que obtuvo en las dos semanas anteriores.
Los datos han sido publicados por el Center for Responsive Politics, una ONG que analiza los movimientos de dinero en la política estadounidense. El aumento de donaciones, registrado en la Comisión Electoral Federal, un organismo gubernamental independiente, fue notable. Los 14 días previos a lo sucedido en Parkland el número de aportaciones fue de 51 y en los siguientes, de 226.
Esta subida en el apoyo económico a la NRA contribuyó a que febrero, el mes de la matanza, fuera el de mayores ingresos en donaciones individuales para la organización pro-armas en los últimos 11 meses, con un total de 779.000 dólares, más capital que el que acumuló en conjunto entre los tres meses que precedieron a la tragedia. El Center for Responsive Politics indica en su informe que el motivo concreto del aumento no está claro, aunque pone sobre la mesa dos hipótesis: un esfuerzo propagandístico mayor de la NRA o el efecto del debate sobre la necesidad de mayores regulaciones a la venta de armas –asumida, tímidamente, por el presidente Donald Trump–.
La Asociación Nacional del Rifle es un importante patrocinador de las campañas políticas de candidatos del Partido Republicano, que comparte con la NRA la defensa del derecho de los civiles a estar armados garantizada en la Constitución de Estados Unidos por la Segunda Enmienda, una controvertida proposición legal que los contrarios a las armas en este país exigen eliminar. De acuerdo con datos del Center for Responsive Politics, la NRA invirtió 50 millones de dólares en la campaña electoral de 2016, incluyendo a seis candidatos republicanos al Senado y a Trump. El actual mandatario recibió alrededor de 30 millones de la Asociación del Rifle.
Tras la masacre de Parkland, poderosas compañías de Estados Unidos optaron por cortar sus lazos con la NRA. Entre ellas, Delta Airlines, United Airlines, la firma de alquiler de coches Hertz o el grupo asegurador MetLife. El presidente de la Asociación del Rifle, Wayne LaPierre, respondió acusando a estas empresas de "cobardía cívica y política". Para LaPierre, quienes piden limitar el acceso a las armas no buscan más seguridad sino objetivos políticos. "Odian a la NRA. Odian la Segunda Enmienda. Odian la libertad individual", dijo en un discurso días después de la matanza.
La Asociación del Rifle afirma que cuenta con unos cinco millones de miembros, pero no publica datos que permitan contrastar la cifra. El aumento de sus ingresos por donaciones de afiliados parece ser una constante, como reacción proselitista, tras las grandes masacres relacionadas con armas de fuego. En 2013 se registró una subida del 63% con respecto a 2012 tras la tragedia, el 14 de diciembre de 2012, de la escuela primaria Sandy Hook (20 niños y seis adultos asesinados).
La NRA fue fundada en 1871 y durante más de un siglo no fue más que una organización de aficionados a las armas y a la caza, pero a medidados de la década de los setenta del siglo pasado se transformó en un lobby de influencia política. El republicano Ronald Reagan fue, en 1980, el primer candadidato presidencial apoyado oficialmente por la Asociación del Rifle.
Pablo de Llano
Miami, El País
La conmoción causada por la masacre en el instituto de Parkland (17 muertos) no ha hecho flaquear el compromiso con las armas en las filas de la Asociación Nacional del Rifle (NRA en sus siglas en inglés), la organización más poderosa de Estados Unidos en la promoción del mercado de armamento para civiles. Los ingresos de la NRA no solo no han bajado, como cabría esperar, sino que se han disparado. En las dos semanas posteriores a la tragedia el lobby recibió 70.870 dólares en donaciones, frente a los 27.100 que obtuvo en las dos semanas anteriores.
Los datos han sido publicados por el Center for Responsive Politics, una ONG que analiza los movimientos de dinero en la política estadounidense. El aumento de donaciones, registrado en la Comisión Electoral Federal, un organismo gubernamental independiente, fue notable. Los 14 días previos a lo sucedido en Parkland el número de aportaciones fue de 51 y en los siguientes, de 226.
Esta subida en el apoyo económico a la NRA contribuyó a que febrero, el mes de la matanza, fuera el de mayores ingresos en donaciones individuales para la organización pro-armas en los últimos 11 meses, con un total de 779.000 dólares, más capital que el que acumuló en conjunto entre los tres meses que precedieron a la tragedia. El Center for Responsive Politics indica en su informe que el motivo concreto del aumento no está claro, aunque pone sobre la mesa dos hipótesis: un esfuerzo propagandístico mayor de la NRA o el efecto del debate sobre la necesidad de mayores regulaciones a la venta de armas –asumida, tímidamente, por el presidente Donald Trump–.
La Asociación Nacional del Rifle es un importante patrocinador de las campañas políticas de candidatos del Partido Republicano, que comparte con la NRA la defensa del derecho de los civiles a estar armados garantizada en la Constitución de Estados Unidos por la Segunda Enmienda, una controvertida proposición legal que los contrarios a las armas en este país exigen eliminar. De acuerdo con datos del Center for Responsive Politics, la NRA invirtió 50 millones de dólares en la campaña electoral de 2016, incluyendo a seis candidatos republicanos al Senado y a Trump. El actual mandatario recibió alrededor de 30 millones de la Asociación del Rifle.
Tras la masacre de Parkland, poderosas compañías de Estados Unidos optaron por cortar sus lazos con la NRA. Entre ellas, Delta Airlines, United Airlines, la firma de alquiler de coches Hertz o el grupo asegurador MetLife. El presidente de la Asociación del Rifle, Wayne LaPierre, respondió acusando a estas empresas de "cobardía cívica y política". Para LaPierre, quienes piden limitar el acceso a las armas no buscan más seguridad sino objetivos políticos. "Odian a la NRA. Odian la Segunda Enmienda. Odian la libertad individual", dijo en un discurso días después de la matanza.
La Asociación del Rifle afirma que cuenta con unos cinco millones de miembros, pero no publica datos que permitan contrastar la cifra. El aumento de sus ingresos por donaciones de afiliados parece ser una constante, como reacción proselitista, tras las grandes masacres relacionadas con armas de fuego. En 2013 se registró una subida del 63% con respecto a 2012 tras la tragedia, el 14 de diciembre de 2012, de la escuela primaria Sandy Hook (20 niños y seis adultos asesinados).
La NRA fue fundada en 1871 y durante más de un siglo no fue más que una organización de aficionados a las armas y a la caza, pero a medidados de la década de los setenta del siglo pasado se transformó en un lobby de influencia política. El republicano Ronald Reagan fue, en 1980, el primer candadidato presidencial apoyado oficialmente por la Asociación del Rifle.