Canadá descarta motivos terroristas en el atropello de Toronto y apunta a un trastorno mental del atacante
Alek Minassian, de 25 años, había sido un estudiante con necesidades especiales y considerado muy introvertido. Mató a 10 personas e hirió a otras 14
Joan Faus
Montreal / Washington, El País
Poco a poco, en medio de la tragedia, afloran detalles sobre el atropello masivo del lunes en Toronto, que mató a 10 personas e hirió a otras 14. Los primeros indicios apuntan a que la causa del ataque en la mayor ciudad de Canadá fue el presunto trastorno mental que sufre el supuesto autor, Alek Minassian, un canadiense de 25 años. Como ya se avanzó en la víspera, el primer ministro, Justin Trudeau, descartó este martes que fuera un acto terrorista.
“Las investigaciones continúan pero ya está bastante claro que no hay conexión con la seguridad nacional”, dijo Trudeau en una rueda de prensa. Señaló que “no hay razón para sospechar” motivos terroristas pero añadió que “llevará algo de tiempo” entender las razones del peor atropello masivo en la historia del país. En los primeros momentos, se temió que pudiera ser un atentado terrorista dado que en los últimos años simpatizantes yihadistas han llevado a cabo atropellos contra transeúntes en ciudades occidentales.
Trudeau también explicó que su Gobierno no ha elevado el nivel antiterrorista en Canadá ni ha cambiado las preparaciones de seguridad de la cumbre del G7 que se celebra en junio en Quebec. El primer ministro habló de una acción “sin sentido”, prometió ver cómo evitar ataques de ese tipo pero alegó que “no debemos comenzar a vivir con miedo”. “Tenemos que concentrarnos en mantener a los canadienses seguros a la vez que nos mantenemos fieles a la libertad y valores que todos los canadienses queremos”, agregó. “Debemos seguir siendo un país abierto y libre”.
Minassian fue detenido poco después de subirse con una furgoneta a una acera y arrollar a transeúntes en el centro de Toronto. Las autoridades creen que fue un atropello deliberado. A primera hora del martes, el hombre compareció en la Corte de Justicia de Ontario y le fueron leídos los cargos en su contra: 10 acusaciones por asesinato en primer grado y 13 por tentativa de asesinato.
La policía de Toronto señaló que el hombre no estaba fichado anteriormente y que necesita recabar más pruebas de lo sucedido. “Necesitamos cada pieza de este rompecabezas para tener un retrato completo de lo que sucedió”, dijo el jefe policial, Mark Saunders, en una rueda de prensa. Las autoridades explicaron que Minassian alquiló la furgoneta e investigan un mensaje críptico que publicó en Facebook antes de empezar a conducir.
La principal incógnita es qué llevó a Minassian a cometer esta atrocidad. Según algunos de sus conocidos citados por el diario The Globe and Mail, es una persona sin afiliaciones religiosas o políticas conocidas; tampoco había mostrado opiniones con tendencia a la violencia. El rotativo entrevistó a varios antiguos compañeros de clase de Minassian. Dicen que era introvertido, “socialmente torpe”, tenía tics en las manos por un trastorno obsesivo compulsivo y algunos incluso dudaban que supiera conducir.
El joven nació y vivía en Richmond Hill, una localidad del área metropolitana de Toronto. Había estudiado en una escuela secundaria para alumnos con necesidades especiales y recientemente terminó sus estudios en informática –con una especialidad en procesadores gráficos- en el Seneca College, una institución ubicada en el mismo distrito del atropello. Otro detalle que ha emergido es que el hombre se alistó al Ejército en agosto de 2017, pero abandonó los entrenamientos tras las dos primeras semanas, según la cadena CTV.
Un compañero de clase en Seneca, que estudió con él en 2015, describió en The Globe and Mail a Minassian como alguien con una significativa discapacidad social o mental al que le costaba hablar con la gente y que tenía tics constantes que le llevaban a mover sus manos y golpearse la cabeza. El compañero incluso cuestionó que Minassian supiera mover el volante de un vehículo. Duda que el ataque pudiera tener una motivación política y sospecha la hipótesis de que el joven pudiera sufrir un accidente y entrara en pánico. Poco antes de ser detenido, Minassian pidió a la policía que le tiroteara y amenazó con tener un arma, lo que resultó ser falso.
Otros excompañeros de clase han explicado a medios locales que Minassian “casi no hablaba con la gente” y que su comportamiento "solía ser bastante extraño pero nunca fue notado por algo violento". En la escuela para estudiantes con necesidades especiales, una exalumna le recuerda caminando por los pasillos con sus manos juntas y con la cabeza baja, imitando el maullido de un gato.
Primeras informaciones sobre las víctimas
La policía de Toronto está solicitando el apoyo de la ciudadanía para identificar a algunas de las víctimas de la tragedia del lunes. De acuerdo con las últimas informaciones difundidas, la primera persona fallecida cuya identidad se ha esclarecido es Anne Marie D'Amico, una mujer de 25 años que trabajaba en la firma financiera Invesco, cuya sede estaba en la zona del ataque.
Corea del Sur informó que dos personas de dicha nacionalidad murieron en el atropello y otra más fue herida. Jordania también confirmó la muerte de uno de sus nacionales. Muchos de los muertos e heridos son extranjeros y mujeres. Las edades de los fallecidos van de los 20 a los 80 años, según las autoridades. Toronto es una de las ciudades más multiculturales del mundo. Cerca del 50% de sus 2,7 millones de habitantes nacieron en otro país.
Joan Faus
Montreal / Washington, El País
Poco a poco, en medio de la tragedia, afloran detalles sobre el atropello masivo del lunes en Toronto, que mató a 10 personas e hirió a otras 14. Los primeros indicios apuntan a que la causa del ataque en la mayor ciudad de Canadá fue el presunto trastorno mental que sufre el supuesto autor, Alek Minassian, un canadiense de 25 años. Como ya se avanzó en la víspera, el primer ministro, Justin Trudeau, descartó este martes que fuera un acto terrorista.
“Las investigaciones continúan pero ya está bastante claro que no hay conexión con la seguridad nacional”, dijo Trudeau en una rueda de prensa. Señaló que “no hay razón para sospechar” motivos terroristas pero añadió que “llevará algo de tiempo” entender las razones del peor atropello masivo en la historia del país. En los primeros momentos, se temió que pudiera ser un atentado terrorista dado que en los últimos años simpatizantes yihadistas han llevado a cabo atropellos contra transeúntes en ciudades occidentales.
Trudeau también explicó que su Gobierno no ha elevado el nivel antiterrorista en Canadá ni ha cambiado las preparaciones de seguridad de la cumbre del G7 que se celebra en junio en Quebec. El primer ministro habló de una acción “sin sentido”, prometió ver cómo evitar ataques de ese tipo pero alegó que “no debemos comenzar a vivir con miedo”. “Tenemos que concentrarnos en mantener a los canadienses seguros a la vez que nos mantenemos fieles a la libertad y valores que todos los canadienses queremos”, agregó. “Debemos seguir siendo un país abierto y libre”.
Minassian fue detenido poco después de subirse con una furgoneta a una acera y arrollar a transeúntes en el centro de Toronto. Las autoridades creen que fue un atropello deliberado. A primera hora del martes, el hombre compareció en la Corte de Justicia de Ontario y le fueron leídos los cargos en su contra: 10 acusaciones por asesinato en primer grado y 13 por tentativa de asesinato.
La policía de Toronto señaló que el hombre no estaba fichado anteriormente y que necesita recabar más pruebas de lo sucedido. “Necesitamos cada pieza de este rompecabezas para tener un retrato completo de lo que sucedió”, dijo el jefe policial, Mark Saunders, en una rueda de prensa. Las autoridades explicaron que Minassian alquiló la furgoneta e investigan un mensaje críptico que publicó en Facebook antes de empezar a conducir.
La principal incógnita es qué llevó a Minassian a cometer esta atrocidad. Según algunos de sus conocidos citados por el diario The Globe and Mail, es una persona sin afiliaciones religiosas o políticas conocidas; tampoco había mostrado opiniones con tendencia a la violencia. El rotativo entrevistó a varios antiguos compañeros de clase de Minassian. Dicen que era introvertido, “socialmente torpe”, tenía tics en las manos por un trastorno obsesivo compulsivo y algunos incluso dudaban que supiera conducir.
El joven nació y vivía en Richmond Hill, una localidad del área metropolitana de Toronto. Había estudiado en una escuela secundaria para alumnos con necesidades especiales y recientemente terminó sus estudios en informática –con una especialidad en procesadores gráficos- en el Seneca College, una institución ubicada en el mismo distrito del atropello. Otro detalle que ha emergido es que el hombre se alistó al Ejército en agosto de 2017, pero abandonó los entrenamientos tras las dos primeras semanas, según la cadena CTV.
Un compañero de clase en Seneca, que estudió con él en 2015, describió en The Globe and Mail a Minassian como alguien con una significativa discapacidad social o mental al que le costaba hablar con la gente y que tenía tics constantes que le llevaban a mover sus manos y golpearse la cabeza. El compañero incluso cuestionó que Minassian supiera mover el volante de un vehículo. Duda que el ataque pudiera tener una motivación política y sospecha la hipótesis de que el joven pudiera sufrir un accidente y entrara en pánico. Poco antes de ser detenido, Minassian pidió a la policía que le tiroteara y amenazó con tener un arma, lo que resultó ser falso.
Otros excompañeros de clase han explicado a medios locales que Minassian “casi no hablaba con la gente” y que su comportamiento "solía ser bastante extraño pero nunca fue notado por algo violento". En la escuela para estudiantes con necesidades especiales, una exalumna le recuerda caminando por los pasillos con sus manos juntas y con la cabeza baja, imitando el maullido de un gato.
Primeras informaciones sobre las víctimas
La policía de Toronto está solicitando el apoyo de la ciudadanía para identificar a algunas de las víctimas de la tragedia del lunes. De acuerdo con las últimas informaciones difundidas, la primera persona fallecida cuya identidad se ha esclarecido es Anne Marie D'Amico, una mujer de 25 años que trabajaba en la firma financiera Invesco, cuya sede estaba en la zona del ataque.
Corea del Sur informó que dos personas de dicha nacionalidad murieron en el atropello y otra más fue herida. Jordania también confirmó la muerte de uno de sus nacionales. Muchos de los muertos e heridos son extranjeros y mujeres. Las edades de los fallecidos van de los 20 a los 80 años, según las autoridades. Toronto es una de las ciudades más multiculturales del mundo. Cerca del 50% de sus 2,7 millones de habitantes nacieron en otro país.