La inmigración neta a Reino Unido cae más de un 20% desde el Brexit
El número de ciudadanos que regresa al este de Europa ha aumentado en los últimos meses
El País
Madrid
La inmigración a Reino Unido se ha situado en su nivel más bajo en los últimos tres años por el fuerte aumento en la marcha de ciudadanos comunitarios desde el referéndum del año pasado sobre la permanencia o no en la Unión Europea, según datos divulgados este jueves por la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS). La tasa de migración neta a Reino Unido—la diferencia entre las llegadas y salidas de ciudadanos al país— bajó en 81.000 personas en los últimos doce meses hasta finales de marzo pasado hasta situarse en 246.000 personas, una caída del 25% en comparación con periodo anterior.
De esa cifra, 127.000 corresponde a ciudadanos comunitarios, lo que supone una bajada de 51.000 (un 29%) frente a los doce meses anteriores. Estos datos reflejan una nueva tendencia influida por la perspectiva de la desconexión de Reino Unido del bloque comunitario, prevista para marzo de 2019.
No solo se redujeron las llegadas, el comunicado de la ONS destaca un aumento de 33.000 personas en la cifra de ciudadanos de países de la UE que abandonaron Reino Unido, hasta situar el dato en 122.000 durante ese periodo, el más elevado en casi un decenio. Dentro de este grupo, destaca el incremento notable, de 17.000 personas, en las salidas de ciudadanos originarios de países de Europa oriental que se unieron al bloque comunitario en 2004: República Checa, Estonia, Hungría, Letonia, Lituania, Polonia, Eslovaquia y Eslovenia. La devaluación de la libra es otro factor que puede haber agudizado el retorno de ciudadanos de Europa oriental.
Tras la difusión de esos datos, el secretario de Estado británico para la Migración, Brandon Lewis, ha considerado "bueno" que la inmigración esté "bajando" frente a la inquietud planteada por grupos empresariales ante esa caída. La primera ministra, Theresa May, se comprometió en mayo a reducir la tasa de migración neta anual por debajo de los 100.000, lo que significa que las cifras ofrecidas este jueves todavía tendrían que reducirse otro 59% para alcanzar el objetivo fijado por la líder conservadora.
Por su parte, Nicola White, responsable del departamento de estadísticas migratorias de la ONS, destacó la "caída en la migración neta", motivada por un aumento de la emigración, principalmente de ciudadanos comunitarios, y en particular de los ocho países citados, así como por un "descenso de la inmigración" de todos los grupos. Sin embargo, la ONS considera que "aún es pronto para saber si se trata de una tendencia a largo plazo".
La ONS también reveló este jueves que la economía británica creció un 0,3 % en el segundo trimestre del año, de abril a junio, frente a los tres meses anteriores, gracias al buen rendimiento del sector servicios.
Madrid
La inmigración a Reino Unido se ha situado en su nivel más bajo en los últimos tres años por el fuerte aumento en la marcha de ciudadanos comunitarios desde el referéndum del año pasado sobre la permanencia o no en la Unión Europea, según datos divulgados este jueves por la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS). La tasa de migración neta a Reino Unido—la diferencia entre las llegadas y salidas de ciudadanos al país— bajó en 81.000 personas en los últimos doce meses hasta finales de marzo pasado hasta situarse en 246.000 personas, una caída del 25% en comparación con periodo anterior.
De esa cifra, 127.000 corresponde a ciudadanos comunitarios, lo que supone una bajada de 51.000 (un 29%) frente a los doce meses anteriores. Estos datos reflejan una nueva tendencia influida por la perspectiva de la desconexión de Reino Unido del bloque comunitario, prevista para marzo de 2019.
No solo se redujeron las llegadas, el comunicado de la ONS destaca un aumento de 33.000 personas en la cifra de ciudadanos de países de la UE que abandonaron Reino Unido, hasta situar el dato en 122.000 durante ese periodo, el más elevado en casi un decenio. Dentro de este grupo, destaca el incremento notable, de 17.000 personas, en las salidas de ciudadanos originarios de países de Europa oriental que se unieron al bloque comunitario en 2004: República Checa, Estonia, Hungría, Letonia, Lituania, Polonia, Eslovaquia y Eslovenia. La devaluación de la libra es otro factor que puede haber agudizado el retorno de ciudadanos de Europa oriental.
Tras la difusión de esos datos, el secretario de Estado británico para la Migración, Brandon Lewis, ha considerado "bueno" que la inmigración esté "bajando" frente a la inquietud planteada por grupos empresariales ante esa caída. La primera ministra, Theresa May, se comprometió en mayo a reducir la tasa de migración neta anual por debajo de los 100.000, lo que significa que las cifras ofrecidas este jueves todavía tendrían que reducirse otro 59% para alcanzar el objetivo fijado por la líder conservadora.
Por su parte, Nicola White, responsable del departamento de estadísticas migratorias de la ONS, destacó la "caída en la migración neta", motivada por un aumento de la emigración, principalmente de ciudadanos comunitarios, y en particular de los ocho países citados, así como por un "descenso de la inmigración" de todos los grupos. Sin embargo, la ONS considera que "aún es pronto para saber si se trata de una tendencia a largo plazo".
La ONS también reveló este jueves que la economía británica creció un 0,3 % en el segundo trimestre del año, de abril a junio, frente a los tres meses anteriores, gracias al buen rendimiento del sector servicios.
