Brasil: Comisión parlamentaria retoma debates sobre la denuncia contra Temer
La sesión abierta en la víspera terminó en la madrugada de este mismo jueves tras más de 14 horas de intensos alegatos por parte de los cerca de setenta diputados que participaron del primer envite.
La Razón Digital / EFE / Brasilia
La Comisión de Constitución y Justicia de la Cámara de Diputados retomó los debates para analizar la denuncia de corrupción contra el presidente brasileño, Michel Temer, que amenaza con desalojarle del poder.
La sesión abierta en la víspera terminó en la madrugada de este mismo jueves tras más de 14 horas de intensos alegatos por parte de los cerca de setenta diputados que participaron del primer envite.
La discusión en esa comisión parlamentaria, que puede extenderse hasta el viernes, es un paso previo a la votación que posteriormente se realizará en el pleno de la Cámara Baja, órgano que tendrá en sus manos determinar si procede o no la denuncia contra el mandatario.
Si la denuncia, presentada por la Fiscalía en junio pasado, fuera acogida por al menos dos tercios de los 513 diputados, equivalente a 342 votos, la Corte Suprema quedaría autorizada para iniciar un juicio penal contra Temer, que en ese caso sería suspendido durante los 180 días que duraría el proceso.
En ese supuesto, la vacante sería cubierta de forma interina por el presidente de la Cámara Baja, Rodrigo Maia.
El instructor de la denuncia en dicha comisión, el diputado Sergio Zveiter, del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), que lidera el propio Temer, presentó su informe el lunes en el que afirmó que la denuncia "no es fantasiosa" y contiene "indicios suficientes de materialidad", que al menos deben llevar a un juicio a fin de establecer "la verdad de los hechos".
La base política de Temer, mayoritaria tanto en la comisión como en el pleno de la Cámara Baja, descalificó las acusaciones de la Fiscalía, que se fundamentan en confesiones de los directivos del grupo JBS, que han dicho que sobornan al mandatario desde 2010 y que lo siguieron haciendo desde que está en el poder.
En los debates que comenzaron en la víspera, tienen derecho de palabra durante quince minutos los 66 miembros permanentes de la comisión y los 66 suplentes, mientras que otros cuarenta diputados ajenos al comité pueden pronunciarse durante diez minutos cada uno.
Temer se convirtió en el primer mandatario en la historia del país en ser acusado por la Fiscalía, en pleno ejercicio del poder, por un delito penal, pues su antecesora, Dilma Rousseff, fue destituida el año pasado por irregularidades fiscales.
Si Temer finalmente fuera condenado, las dos cámaras legislativas serían convocadas a una elección indirecta para escoger a quien gobernaría el país hasta el 1 de enero de 2019, cuando vence el actual período presidencial.
El desarrollo de la primera sesión coincidió con la condena de nueve años y medio de prisión que le fue impuesta al expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva por los supuestos delitos de corrupción pasiva y lavado de dinero.
La sentencia fue dictada por el juez Sergio Moro, responsable de las investigaciones sobre la colosal trama corrupta destapada en el seno de la petrolera estatal, quien dio por comprobado que Lula se benefició de la colosal red de corrupción que operó durante décadas en la estatal Petrobras.
La Razón Digital / EFE / Brasilia
La Comisión de Constitución y Justicia de la Cámara de Diputados retomó los debates para analizar la denuncia de corrupción contra el presidente brasileño, Michel Temer, que amenaza con desalojarle del poder.
La sesión abierta en la víspera terminó en la madrugada de este mismo jueves tras más de 14 horas de intensos alegatos por parte de los cerca de setenta diputados que participaron del primer envite.
La discusión en esa comisión parlamentaria, que puede extenderse hasta el viernes, es un paso previo a la votación que posteriormente se realizará en el pleno de la Cámara Baja, órgano que tendrá en sus manos determinar si procede o no la denuncia contra el mandatario.
Si la denuncia, presentada por la Fiscalía en junio pasado, fuera acogida por al menos dos tercios de los 513 diputados, equivalente a 342 votos, la Corte Suprema quedaría autorizada para iniciar un juicio penal contra Temer, que en ese caso sería suspendido durante los 180 días que duraría el proceso.
En ese supuesto, la vacante sería cubierta de forma interina por el presidente de la Cámara Baja, Rodrigo Maia.
El instructor de la denuncia en dicha comisión, el diputado Sergio Zveiter, del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), que lidera el propio Temer, presentó su informe el lunes en el que afirmó que la denuncia "no es fantasiosa" y contiene "indicios suficientes de materialidad", que al menos deben llevar a un juicio a fin de establecer "la verdad de los hechos".
La base política de Temer, mayoritaria tanto en la comisión como en el pleno de la Cámara Baja, descalificó las acusaciones de la Fiscalía, que se fundamentan en confesiones de los directivos del grupo JBS, que han dicho que sobornan al mandatario desde 2010 y que lo siguieron haciendo desde que está en el poder.
En los debates que comenzaron en la víspera, tienen derecho de palabra durante quince minutos los 66 miembros permanentes de la comisión y los 66 suplentes, mientras que otros cuarenta diputados ajenos al comité pueden pronunciarse durante diez minutos cada uno.
Temer se convirtió en el primer mandatario en la historia del país en ser acusado por la Fiscalía, en pleno ejercicio del poder, por un delito penal, pues su antecesora, Dilma Rousseff, fue destituida el año pasado por irregularidades fiscales.
Si Temer finalmente fuera condenado, las dos cámaras legislativas serían convocadas a una elección indirecta para escoger a quien gobernaría el país hasta el 1 de enero de 2019, cuando vence el actual período presidencial.
El desarrollo de la primera sesión coincidió con la condena de nueve años y medio de prisión que le fue impuesta al expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva por los supuestos delitos de corrupción pasiva y lavado de dinero.
La sentencia fue dictada por el juez Sergio Moro, responsable de las investigaciones sobre la colosal trama corrupta destapada en el seno de la petrolera estatal, quien dio por comprobado que Lula se benefició de la colosal red de corrupción que operó durante décadas en la estatal Petrobras.