Miles de estadounidenses salen a la calle para pedir a Trump que revele sus impuestos
Las marchas coinciden con la fecha límite tradicional para entregar la declaración de la renta en Estados Unidos
Cristina F. Pereda
Washington, El País
Donald Trump defiende que sus impuestos no le interesan “a nadie más que a los periodistas” así que miles de ciudadanos han elegido la fecha límite para hacer la declaración de la renta, este sábado, para demostrarle que se equivoca. Con manifestaciones en 150 ciudades de todo el país, las más numerosas en Washington, Nueva York y Los Ángeles, miles de estadounidenses han vuelto a salir a la calle en contra de su presidente.
A pesar de que la mayoría de las marchas fueron pacíficas, un grupo de manifestantes sí chocó con defensores de Trump en Berkeley (California), donde las autoridades han informado de la detención de nueve personas. En otras convocatorias, los participantes recorrieron las principales avenidas de la capital, pasando por delante del Hotel Internacional Trump, uno de los negocios del mandatario que hace más relevante sus declaraciones de impuestos.
Trump rompió en las pasadas elecciones con una tradición de más de cuatro décadas por la que los candidatos a la Casa Blanca, en un gesto de transparencia, hacen públicas sus declaraciones de impuestos. El objetivo es que la ciudadanía conozca sus fuentes de ingresos y bienes acumulados a lo largo de sus carreras profesionales. El republicano alega sin embargo que él no pudo hacerlo porque está siendo auditado, a pesar de que la legislación no contempla que sean incompatibles.
Los manifestantes que salieron a la calle este sábado —más de 5000 en Washington y Nueva York, según Reuters— lo hicieron acompañados de pancartas y muñecos hinchables en forma de gallinas con un tupé que emula al del presidente, alegando que el empresario está siendo cobarde al no presentar su documentación. Decenas de ellos aprovecharon la presencia de Trump en Mar-a-Lago, su club en Florida, para salir a su encuentro. Sin embargo, según han informado los periodistas que acompañan al mandatario este fin de semana, la caravana se desvió de su ruta prevista para evitar la protesta.
A pesar de que los presidentes no están obligados a revelar sus fuentes de ingresos, el hecho de que Trump posea una red de más de 500 empresas, una veintena de ellas en el extranjero, ha despertado dudas sobre los posibles conflictos que puedan surgir entre sus intereses económicos y los de Estados Unidos. El mandatario anunció tras las elecciones que sus dos hijos varones asumirán la toma de decisiones empresariales, pero él sigue siendo el destinatario final de los beneficios. En respuesta, varias organizaciones han demandado al presidente ante la justicia para que revele sus declaraciones de impuestos de los últimos años.
Cristina F. Pereda
Washington, El País
Donald Trump defiende que sus impuestos no le interesan “a nadie más que a los periodistas” así que miles de ciudadanos han elegido la fecha límite para hacer la declaración de la renta, este sábado, para demostrarle que se equivoca. Con manifestaciones en 150 ciudades de todo el país, las más numerosas en Washington, Nueva York y Los Ángeles, miles de estadounidenses han vuelto a salir a la calle en contra de su presidente.
A pesar de que la mayoría de las marchas fueron pacíficas, un grupo de manifestantes sí chocó con defensores de Trump en Berkeley (California), donde las autoridades han informado de la detención de nueve personas. En otras convocatorias, los participantes recorrieron las principales avenidas de la capital, pasando por delante del Hotel Internacional Trump, uno de los negocios del mandatario que hace más relevante sus declaraciones de impuestos.
Trump rompió en las pasadas elecciones con una tradición de más de cuatro décadas por la que los candidatos a la Casa Blanca, en un gesto de transparencia, hacen públicas sus declaraciones de impuestos. El objetivo es que la ciudadanía conozca sus fuentes de ingresos y bienes acumulados a lo largo de sus carreras profesionales. El republicano alega sin embargo que él no pudo hacerlo porque está siendo auditado, a pesar de que la legislación no contempla que sean incompatibles.
Los manifestantes que salieron a la calle este sábado —más de 5000 en Washington y Nueva York, según Reuters— lo hicieron acompañados de pancartas y muñecos hinchables en forma de gallinas con un tupé que emula al del presidente, alegando que el empresario está siendo cobarde al no presentar su documentación. Decenas de ellos aprovecharon la presencia de Trump en Mar-a-Lago, su club en Florida, para salir a su encuentro. Sin embargo, según han informado los periodistas que acompañan al mandatario este fin de semana, la caravana se desvió de su ruta prevista para evitar la protesta.
A pesar de que los presidentes no están obligados a revelar sus fuentes de ingresos, el hecho de que Trump posea una red de más de 500 empresas, una veintena de ellas en el extranjero, ha despertado dudas sobre los posibles conflictos que puedan surgir entre sus intereses económicos y los de Estados Unidos. El mandatario anunció tras las elecciones que sus dos hijos varones asumirán la toma de decisiones empresariales, pero él sigue siendo el destinatario final de los beneficios. En respuesta, varias organizaciones han demandado al presidente ante la justicia para que revele sus declaraciones de impuestos de los últimos años.