Ataque al autobús del Borussia Dortmund
El jugador español ha sido operado por los daños que causó en su muñeca la expansión de las tres explosiones que se produjeron cuando el equipo se dirigía al estadio
Ana Carbajosa
Berlín, El País
Tres artefactos explosionaron ayer al paso del autobús que transportaba a los jugadores del Borussia de Dortmund cuando se dirigían a su estadio para disputar un partido de la Champions, poco después de las siete de la noche, según informó la policía alemana. El jugador español Marc Bartra, de 26 años fue el único que sufrió heridas debido a las explosiones, cuyo origen se desconocía anoche. A la noticia del ataque, le siguió la cancelación del partido de cuartos de final de la Champions League ante el Mónaco, que se disputará este miércoles a las 18.45.
José Bartra, padre del jugador del Borussia de Dortmund confirmaba poco después de las ocho de la noche a la Agencia EFE que su hijo estaba ingresado en un hospital de la ciudad renana. El club detalló que el jugador español tiene heridas en la mano y en el brazo. Esta misma noche, Bartra ha sido operado en la muñeca derecha, según detalló el portavoz del BVB en conferencia de prensa.
El portero del Borussia Roman Bürki explicó que iba sentado en la última fila junto a Bartra, quien fue alcanzado por fragmentos de cristal que habían saltado por los aires. Tras la explosión, los futbolistas se agacharon y se tiraron al suelo del autobús, temerosos de que pudiera haber más explosiones, según relató el guardameta al suizo Blick.
El autobús había salido del hotel en el que se concentraba el equipo cuando estallaron las cargas explosivas, indicó la policía local. “Antes del partido de la Champions entre el Borussia de Dortmund y el AS Mónaco, se ha producido una explosión, cerca del autobús del BVB, poco después de las siete de la tarde”, informó en un comunicado de prensa la policía de Dortmund, que asume que ha sido un ataque dirigido contra el equipo de fútbol.
Un par de horas más tarde, la policía detalló que de acuerdo con las investigaciones preliminares se trata de un ataque serio con explosivos. Los artefactos fueron escondidos en un lateral de la carretera, junto a una zona de aparcamiento. El ataque tuvo lugar en la esquina de la calle Wittbraeucker y la Schirrmannweg en la zona de Dortmund-Hoechsten (a unos 10 kilómetros del estadio), amplió la policía. La fiscalía añadió que han encontrado una carta en el lugar del atentado cuya veracidad debe ser todavía comprobada.
En su cuenta de Twitter, la policía informó poco después del ataque que no había evidencias de que existieran amenazas para los asistentes que se encontraban ya en el campo. Dentro del estadio, los fans del Mónaco corearon “Dortmund, Dortmund”, en solidaridad con el equipo rival, después de que la información sobre el ataque se proyectara en una pantalla gigante del campo. Desde su cuenta oficial de Twitter, el Borussia de Dortmund pedía a los asistentes al encuentro que mantuvieran la calma para poder permitir una salida ordenada del estadio. Poco después de las nueve de la noche, la policía felicitaba a los fans por la facilidad con la que se había producido la evacuación e informaba de que la gran mayoría marchaba ya camino de sus casas.
El consejero delegado del club, Hans-Joachim Watzke, aseguró que "todo el equipo está en un estado de shock” y que será difícil que las imágenes del ataque “salgan de la cabeza” de los jugadores. “Espero que el equipo sea razonablemente capaz de ser competitivos mañana en el campo”, según recogía Bild. El Gobierno alemán envió mensajes de apoyo al equipo y en especial al jugador español herido leve.
Se trata de la segunda vez que el fútbol alemán ha sido vÍctima de un ataque. En noviembre de 2015, en el Stade de France de París, terroristas suicidas trataron de hacerse explotar durante un partido amistoso entre Francia y Alemania. El equipo alemán tuvo que pasar la noche en el estadio en aquella ocasión en lugar de volver a su hotel, mientras los ataques terroristas se sucedían en la capital francesa y que causaron la muerte de 137 personas, incluidos siete atacantes.
Ana Carbajosa
Berlín, El País
Tres artefactos explosionaron ayer al paso del autobús que transportaba a los jugadores del Borussia de Dortmund cuando se dirigían a su estadio para disputar un partido de la Champions, poco después de las siete de la noche, según informó la policía alemana. El jugador español Marc Bartra, de 26 años fue el único que sufrió heridas debido a las explosiones, cuyo origen se desconocía anoche. A la noticia del ataque, le siguió la cancelación del partido de cuartos de final de la Champions League ante el Mónaco, que se disputará este miércoles a las 18.45.
José Bartra, padre del jugador del Borussia de Dortmund confirmaba poco después de las ocho de la noche a la Agencia EFE que su hijo estaba ingresado en un hospital de la ciudad renana. El club detalló que el jugador español tiene heridas en la mano y en el brazo. Esta misma noche, Bartra ha sido operado en la muñeca derecha, según detalló el portavoz del BVB en conferencia de prensa.
El portero del Borussia Roman Bürki explicó que iba sentado en la última fila junto a Bartra, quien fue alcanzado por fragmentos de cristal que habían saltado por los aires. Tras la explosión, los futbolistas se agacharon y se tiraron al suelo del autobús, temerosos de que pudiera haber más explosiones, según relató el guardameta al suizo Blick.
El autobús había salido del hotel en el que se concentraba el equipo cuando estallaron las cargas explosivas, indicó la policía local. “Antes del partido de la Champions entre el Borussia de Dortmund y el AS Mónaco, se ha producido una explosión, cerca del autobús del BVB, poco después de las siete de la tarde”, informó en un comunicado de prensa la policía de Dortmund, que asume que ha sido un ataque dirigido contra el equipo de fútbol.
Un par de horas más tarde, la policía detalló que de acuerdo con las investigaciones preliminares se trata de un ataque serio con explosivos. Los artefactos fueron escondidos en un lateral de la carretera, junto a una zona de aparcamiento. El ataque tuvo lugar en la esquina de la calle Wittbraeucker y la Schirrmannweg en la zona de Dortmund-Hoechsten (a unos 10 kilómetros del estadio), amplió la policía. La fiscalía añadió que han encontrado una carta en el lugar del atentado cuya veracidad debe ser todavía comprobada.
En su cuenta de Twitter, la policía informó poco después del ataque que no había evidencias de que existieran amenazas para los asistentes que se encontraban ya en el campo. Dentro del estadio, los fans del Mónaco corearon “Dortmund, Dortmund”, en solidaridad con el equipo rival, después de que la información sobre el ataque se proyectara en una pantalla gigante del campo. Desde su cuenta oficial de Twitter, el Borussia de Dortmund pedía a los asistentes al encuentro que mantuvieran la calma para poder permitir una salida ordenada del estadio. Poco después de las nueve de la noche, la policía felicitaba a los fans por la facilidad con la que se había producido la evacuación e informaba de que la gran mayoría marchaba ya camino de sus casas.
El consejero delegado del club, Hans-Joachim Watzke, aseguró que "todo el equipo está en un estado de shock” y que será difícil que las imágenes del ataque “salgan de la cabeza” de los jugadores. “Espero que el equipo sea razonablemente capaz de ser competitivos mañana en el campo”, según recogía Bild. El Gobierno alemán envió mensajes de apoyo al equipo y en especial al jugador español herido leve.
Se trata de la segunda vez que el fútbol alemán ha sido vÍctima de un ataque. En noviembre de 2015, en el Stade de France de París, terroristas suicidas trataron de hacerse explotar durante un partido amistoso entre Francia y Alemania. El equipo alemán tuvo que pasar la noche en el estadio en aquella ocasión en lugar de volver a su hotel, mientras los ataques terroristas se sucedían en la capital francesa y que causaron la muerte de 137 personas, incluidos siete atacantes.