Wenger: "Para pagar a Özil lo que quiere hace falta un buen banco"
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La renovación de Mesut Özil se está convirtiendo en un auténtico quebradero de cabeza para Arsene Wenger. El centrocampista alemán termina contrato en junio de 2018 y sus pretensiones económicas están poniendo en serios apuros al mánager francés.
Özil es sin duda alguna una de las piezas claves del engranaje del Arsenal, que actualmente es colíder de la Premier League, pero no está poniendo nada fácil las cosas para que su continuidad se materialice. El exjugador del Real Madrid cobra en estos momentos 155.000 euros semanales (140.000£) y quiere que esta cifra se vea elevada hasta los 277.000 euros (250.000£), un montante que en las oficinas del conjunto londinense ven demasiado alto para sus arcas.
La situación se encuentra enquistada y esto hace que en las ruedas de prensa la pregunta sobre la renovación de Özil sea ya el pan nuestro de cada día. En la última de ellas, Wenger bromeó con uno de los periodistas al tratar este asunto: "Si conoces un buen banco, llámame", apuntó.
A pesar del enrocamiento del alemán, Wenger manifiesta que "no creo que haya que convencerle para que se quede, porque quiere quedarse" y apela a que a la hora de la verdad otros factores le inclinen a firmar ya que "no todo es dinero".
