Banfield aprovechó las bajas de Gimnasia y se quedó con el triunfo
Banfield le ganó este viernes a Gimnasia y Esgrima La Plata 2-0 en el Estadio Florencio Sola, en la apertura del nuevo campeonato de Primera División. Los goles los hicieron Walter Erviti y Lihué Prichoda.
Las secuelas del bochornoso final que tuvo el último clásico platense dejaron a Gimnasia muy disminuido. Pedro Troglio no cuenta con varios
de los titulares, sancionados, por lo que recurrió a juveniles y a los recién llegados Jorge Valdéz Chamorro y Facundo Castillón.
El Lobo intentó pese a todo jugar de igual a igual y, si bien generó posibilidades de gol, no pudo contra la mayor solidez y contundencia del local.
Su chance más propicia se produjo a los 8 minutos de juego, cuando Castillón habilitó a Matías Noble, pero el arquero Hilario Navarro se impuso en el mano a mano.
Y en la jugada siguiente, a los 9, Banfield abrió el marcador valiéndose de un centro a media altura enviado por Giovanni Simeone desde la derecha y un remate de aire de Erviti, a la altura del segundo palo, que vulneró el ángulo inferior derecho.
Gimnasia no bajó los brazos y se acercó al empate a los 21, mediante un tiro libre ejecutado por Jorge Valdez Chamorro, un pase de Luciano Perdomo y un remate de Osvaldo Barsottini que pasó cerca del ángulo derecho.
Tres minutos después de la reanudación, el visitante volvió a arrimar con una acción originada con pelota parada a cargo de Valdez Chamorro y un cabezazo esquinado de Mauricio Romero, apenas desviado.
Banfield, por su parte, se mantenía ordenado, especulaba con ampliar la diferencia de contraataque y, si bien por momentos se recostó demasiado en el parcial, los cambios que hizo Claudio Vivas revitalizaron su capacidad ofensiva justo a tiempo.
El cuadro platense asumía riesgos mayúsculos en pos de la igualdad y, a los 37 minutos, el Taladro aprovechó para marcar el segundo gol valiéndose de una réplica y la mala salida del arquero Enrique Bologna, con el atenuante de que había quedado desprotegido.
El delantero uruguayo Santiago Silva aceleró por izquierda para dejarlo al guardavalla a mitad de camino y con un centro preciso asistió al ingresado Prichoda, quien realizó su primer gol en Primera.
