Talibanes piden a rescatistas "no cejar en esfuerzos" en ayuda por terremoto en Afganistán
Kabul, Reuters
Los talibanes pidieron el martes a las agencias de ayuda que sigan entregando suministros de emergencia, después de que un fuerte sismo sacudió las regiones montañosas en el norte de Afganistán y Pakistán, causando la muerte de al menos a 300 personas.
Los esfuerzos de grupos de ayuda para evaluar el daño eran obstaculizados por una situación de seguridad inestable que ha hecho que muchas de las áreas afectadas sean riesgosas para socorristas internacionales y tropas gubernamentales.
Sin embargo, los talibanes, que este año han reforzado su campaña de insurgencia islamista contra el Gobierno de Kabul, indicaron que no impedirán los esfuerzos de ayuda.
"El Emirato Islámico llama a nuestros compatriotas bien intencionados y a las organizaciones de ayuda humanitaria a que no cejen en sus esfuerzos para proveer de refugio, alimento y suministros médicos a las víctimas", dijeron los talibanes en un mensaje de condolencias a los afectados por el sismo, usando su nombre formal.
"Y, en forma similar, ordena a sus muyaidines en las áreas afectadas a entregar toda su ayuda", agregó.
Autoridades confirmaron 228 muertes en Pakistán, mientras que en Afganistán las víctimas fatales llegaban a más de 80. Al menos 4.000 casas y complejos resultaron destruidos o dañados, dijo el primer ministro afgano, Abdullah Abdullah.
La cifra de muertos podría subir en la medida en que se restauren las carreteras y comunicaciones con aldeas aisladas.
El terremoto tuvo lugar casi exactamente seis meses después de que Nepal sufrió su peor sismo en la historia el 25 de abril. Ese evento y una fuerte réplica en mayo dejaron 9.000 muertos y más de 900.000 casas dañadas o destruidas.
Los talibanes pidieron el martes a las agencias de ayuda que sigan entregando suministros de emergencia, después de que un fuerte sismo sacudió las regiones montañosas en el norte de Afganistán y Pakistán, causando la muerte de al menos a 300 personas.
Los esfuerzos de grupos de ayuda para evaluar el daño eran obstaculizados por una situación de seguridad inestable que ha hecho que muchas de las áreas afectadas sean riesgosas para socorristas internacionales y tropas gubernamentales.
Sin embargo, los talibanes, que este año han reforzado su campaña de insurgencia islamista contra el Gobierno de Kabul, indicaron que no impedirán los esfuerzos de ayuda.
"El Emirato Islámico llama a nuestros compatriotas bien intencionados y a las organizaciones de ayuda humanitaria a que no cejen en sus esfuerzos para proveer de refugio, alimento y suministros médicos a las víctimas", dijeron los talibanes en un mensaje de condolencias a los afectados por el sismo, usando su nombre formal.
"Y, en forma similar, ordena a sus muyaidines en las áreas afectadas a entregar toda su ayuda", agregó.
Autoridades confirmaron 228 muertes en Pakistán, mientras que en Afganistán las víctimas fatales llegaban a más de 80. Al menos 4.000 casas y complejos resultaron destruidos o dañados, dijo el primer ministro afgano, Abdullah Abdullah.
La cifra de muertos podría subir en la medida en que se restauren las carreteras y comunicaciones con aldeas aisladas.
El terremoto tuvo lugar casi exactamente seis meses después de que Nepal sufrió su peor sismo en la historia el 25 de abril. Ese evento y una fuerte réplica en mayo dejaron 9.000 muertos y más de 900.000 casas dañadas o destruidas.