Miles protestan en Alemania contra refugiados
Miles de alemanes asistieron el lunes a una protesta que organizó el grupo PEGIDA, contrario al islam, casi un año después de que efectuara su primera manifestación en la ciudad de Dresde, en el este del país.
La policía declinó facilitar un cálculo sobre el número de personas que participaron en la movilización, que transcurrió pacíficamente. Un reportero de The Associated Press calculó la multitud entre 7.000 y 8.000 personas.
Los oradores, entre ellos el cofundador de PEGIDA, Lutz Bachmann, condenó la decisión del gobierno de la canciller alemana Angela Merkel de aceptar a cientos de miles de refugiados, muchos de los cuales han huido de los conflictos en Siria, Afganistán e Irak.
"Nos están llevando directamente a una guerra civil europea", declaró Bachmann ante la multitud reunida frente a la famosa casa de ópera Semperoper de Dresde.
Los manifestantes respondieron con gritos a coro de "Merkel debe irse" y exigieron la deportación de los refugiados. Uno de los inconformes cargaba una representación de cadalsos con las horcas en las que se leía "reservada para Angela Merkel" y "reservada para Sigmar Gabriel", el vicecanciller.
En los últimos meses ha aumentado el apoyo al grupo PEGIDA (Europeos Patrióticos contra la Islamización de Occidente, por sus siglas en alemán), aunque las manifestaciones continúan siendo menores en comparación con las 25.000 personas reunidas en enero.
Tatjana Festerling, una oradora que a principios de año captó casi 10% de votos como candidata de PEGIDA en las elecciones a la alcaldía de Dresde, insinuó que el estado de Sajonia debería separarse del resto de Alemania.
Sajonia ha sido escenario de algunas de las protestas más violentas contra los refugiados en los últimos meses.
Algunos en la multitud ondearon banderas húngaras y rusas mientras gritaron a coro "Merkel a Siberia, Putin a Berlín".
La mayoría de los manifestantes se negaron a hacer declaraciones a los reporteros, a los que se refirieron como "prensa mentirosa", un término favorecido por los propagandistas nazis como Joseph Goebbels.
