Podría volver la “confrontación”: Corea del Norte amenaza con romper diálogo con el Sur
Seúl, EFE
Corea del Norte amenazó hoy con “volver a la confrontación” al acusar a Corea del Sur de malinterpretar de forma intencionada su declaración en la que lamentaba un ataque con minas y que ayudó a poner fin a una grave crisis militar.
“Si Corea del Sur sigue así, las relaciones entre las dos Coreas podrían volver a la confrontación”, expuso el Comité de Defensa Nacional de Corea del Norte, en un comunicado publicado por la agencia estatal KCNA.
Ambos gobiernos firmaron hace una semana un acuerdo para poner fin a la tensión en el que Pyongyang lamentó la explosión con minas del 4 de agosto que hirió gravemente a dos soldados surcoreanos en la frontera.
Los días posteriores al acuerdo altos funcionarios de Seúl, entre ellos el ministro de Unificación, Hong Yong-pyo, declararon públicamente que la expresión de Pyongyang equivale a una disculpa, algo que parece no haber sentado bien al régimen norcoreano.
Corea del Norte remarcó hoy que su expresión “lamentar” no es lo mismo que pedir disculpas, y acusó al Ejecutivo surcoreano de malinterpretar de forma intencionada esta expresión.
Tras una investigación sobre el incidente del día 4 Corea del Sur concluyó que las minas fueron colocadas por soldados norcoreanos, pero Pyongyang negó este hecho y aseguró que no tuvo nada que ver con el suceso.
“En un momento crucial en el que se está valorando este acuerdo histórico, Corea del Sur ha seguido haciendo comentarios que podrían obstaculizar las relaciones entre las dos Coreas”, insistió el Comité de Defensa Nacional.
Por su parte, el Gobierno surcoreano trató de restar importancia al comunicado emitido hoy por el régimen de Kim Jong-un e insistió en seguir avanzando en los términos del acuerdo.
“Ahora no es el momento de discutir entre nosotros, sino el momento en que las dos Coreas realicen conjuntamente esfuerzos sinceros para aplicar el acuerdo”, expresó un portavoz del Ministerio de Unificación en una rueda de prensa.
Expertos en Corea del Sur señalaron que, a pesar de las advertencias de Pyongyang, de momento no está en peligro el acuerdo alcanzado por ambos países.
Este acuerdo se considera potencialmente histórico debido a la voluntad expresada por ambas partes de abrir una nueva etapa de diálogo, aunque todavía está por ver si se hará realidad lo escrito sobre el papel.
Como primer paso, las delegaciones de la Cruz Roja de Norte y Sur se reunirán el 7 de septiembre para organizar próximamente un encuentro de familias separadas por la Guerra de Corea (1950-53).
Además, los dos países se han comprometido a enderezar sus complicadas relaciones y regularizar los diálogos bilaterales de alto nivel.
Norte y Sur permanecen técnicamente enfrentados desde la Guerra de Corea, que finalizó con un armisticio nunca reemplazado por un tratado de paz definitivo.
Corea del Norte amenazó hoy con “volver a la confrontación” al acusar a Corea del Sur de malinterpretar de forma intencionada su declaración en la que lamentaba un ataque con minas y que ayudó a poner fin a una grave crisis militar.
“Si Corea del Sur sigue así, las relaciones entre las dos Coreas podrían volver a la confrontación”, expuso el Comité de Defensa Nacional de Corea del Norte, en un comunicado publicado por la agencia estatal KCNA.
Ambos gobiernos firmaron hace una semana un acuerdo para poner fin a la tensión en el que Pyongyang lamentó la explosión con minas del 4 de agosto que hirió gravemente a dos soldados surcoreanos en la frontera.
Los días posteriores al acuerdo altos funcionarios de Seúl, entre ellos el ministro de Unificación, Hong Yong-pyo, declararon públicamente que la expresión de Pyongyang equivale a una disculpa, algo que parece no haber sentado bien al régimen norcoreano.
Corea del Norte remarcó hoy que su expresión “lamentar” no es lo mismo que pedir disculpas, y acusó al Ejecutivo surcoreano de malinterpretar de forma intencionada esta expresión.
Tras una investigación sobre el incidente del día 4 Corea del Sur concluyó que las minas fueron colocadas por soldados norcoreanos, pero Pyongyang negó este hecho y aseguró que no tuvo nada que ver con el suceso.
“En un momento crucial en el que se está valorando este acuerdo histórico, Corea del Sur ha seguido haciendo comentarios que podrían obstaculizar las relaciones entre las dos Coreas”, insistió el Comité de Defensa Nacional.
Por su parte, el Gobierno surcoreano trató de restar importancia al comunicado emitido hoy por el régimen de Kim Jong-un e insistió en seguir avanzando en los términos del acuerdo.
“Ahora no es el momento de discutir entre nosotros, sino el momento en que las dos Coreas realicen conjuntamente esfuerzos sinceros para aplicar el acuerdo”, expresó un portavoz del Ministerio de Unificación en una rueda de prensa.
Expertos en Corea del Sur señalaron que, a pesar de las advertencias de Pyongyang, de momento no está en peligro el acuerdo alcanzado por ambos países.
Este acuerdo se considera potencialmente histórico debido a la voluntad expresada por ambas partes de abrir una nueva etapa de diálogo, aunque todavía está por ver si se hará realidad lo escrito sobre el papel.
Como primer paso, las delegaciones de la Cruz Roja de Norte y Sur se reunirán el 7 de septiembre para organizar próximamente un encuentro de familias separadas por la Guerra de Corea (1950-53).
Además, los dos países se han comprometido a enderezar sus complicadas relaciones y regularizar los diálogos bilaterales de alto nivel.
Norte y Sur permanecen técnicamente enfrentados desde la Guerra de Corea, que finalizó con un armisticio nunca reemplazado por un tratado de paz definitivo.