Jack Warner: 'Yo reiré el último'
DPA
El triniteño Jack Warner, exvicepresidente de FIFA, rechazó una vez más las acusaciones que pesan sobre él y aseguró que él será el último en reír en el escándalo de corrupción que azota al ente rector del fútbol mundial. "Yo reiré el último", dijo el viernes el político caribeño en un acalorado debate parlamentario en Trinidad y Tobago, según publicó hoy el diario "Newsday".
La primera ministra, Kamla Persad-Bissessar, había acusado al diputado de haber llevado el escarnio y la vergüenza al país caribeño.
"Estamos en el foco internacional, pero no por buenas cosas, sino por los actos de un solo hombre", dijo la jefa de gobierno, que abandonó indignada el Parlamento cuando Warner tomó la palabra.
La Justicia de Estados Unidos acusa al ex vicepresidente de FIFA de corrupción, conspiración y crimen organizado y solicita su extradición. Según la investigación, Warner recibió un soborno del organizador del Mundial de 2010, Sudáfrica.
Pese a que el ex presidente de la Confederación de Fútbol del Norte, Centroamérica y el Caribe (Concacaf) fue detenido brevemente la pasada semana, se encuentra en libertad tras el pago de una fianza de 2,5 millones de dólares.
Warner fue también implicado en otro acto de corrupción por el egipcio Aley Eddine Helal, ex ministro de Deportes del país, que dijo a la televisión ONTV en El Cairo que el triniteño exigió siete millones de dólares para ayudar a la candidatura egipcia a ganar la sede del Mundial de 2010.
Según Helal, el presidente de la Federación Egipcia de Fútbol (EFA), El-Dahshori Harb, se encontró con el entonces poderoso dirigente futbolístico caribeño en los Emiratos Arabes Unidos.
Egipto, sin embargo, se negó a pagar. "No me había imaginado que la FIFA fuera así de corrupta", dijo Helal, que entonces era jefe de la candidatura de su país. Sudáfrica fue la ganadora en 2004 de la sede del Mundial de 2010 y se convirtió en el primer país africano en recibir el torneo.
"Le dije al presidente de la EFA que Egipto no podía involucrase en delitos así. Informé al ex jefe de los servicios secretos de Egipto Omar Suleiman, que me confirmó que había tomado la decisión correcta", añadió Helal.
Warner, de 72 años, es uno de los 14 implicados en la investigación que la fiscalía de Estados Unidos está llevando a cabo contra la corrupción en el fútbol.
El triniteño Jack Warner, exvicepresidente de FIFA, rechazó una vez más las acusaciones que pesan sobre él y aseguró que él será el último en reír en el escándalo de corrupción que azota al ente rector del fútbol mundial. "Yo reiré el último", dijo el viernes el político caribeño en un acalorado debate parlamentario en Trinidad y Tobago, según publicó hoy el diario "Newsday".
La primera ministra, Kamla Persad-Bissessar, había acusado al diputado de haber llevado el escarnio y la vergüenza al país caribeño.
"Estamos en el foco internacional, pero no por buenas cosas, sino por los actos de un solo hombre", dijo la jefa de gobierno, que abandonó indignada el Parlamento cuando Warner tomó la palabra.
La Justicia de Estados Unidos acusa al ex vicepresidente de FIFA de corrupción, conspiración y crimen organizado y solicita su extradición. Según la investigación, Warner recibió un soborno del organizador del Mundial de 2010, Sudáfrica.
Pese a que el ex presidente de la Confederación de Fútbol del Norte, Centroamérica y el Caribe (Concacaf) fue detenido brevemente la pasada semana, se encuentra en libertad tras el pago de una fianza de 2,5 millones de dólares.
Warner fue también implicado en otro acto de corrupción por el egipcio Aley Eddine Helal, ex ministro de Deportes del país, que dijo a la televisión ONTV en El Cairo que el triniteño exigió siete millones de dólares para ayudar a la candidatura egipcia a ganar la sede del Mundial de 2010.
Según Helal, el presidente de la Federación Egipcia de Fútbol (EFA), El-Dahshori Harb, se encontró con el entonces poderoso dirigente futbolístico caribeño en los Emiratos Arabes Unidos.
Egipto, sin embargo, se negó a pagar. "No me había imaginado que la FIFA fuera así de corrupta", dijo Helal, que entonces era jefe de la candidatura de su país. Sudáfrica fue la ganadora en 2004 de la sede del Mundial de 2010 y se convirtió en el primer país africano en recibir el torneo.
"Le dije al presidente de la EFA que Egipto no podía involucrase en delitos así. Informé al ex jefe de los servicios secretos de Egipto Omar Suleiman, que me confirmó que había tomado la decisión correcta", añadió Helal.
Warner, de 72 años, es uno de los 14 implicados en la investigación que la fiscalía de Estados Unidos está llevando a cabo contra la corrupción en el fútbol.