Accidente en Pakistán: llegan cadáveres de diplomáticos
Islamabad, AP
Los cadáveres de varios diplomáticos extranjeros muertos en un accidente de helicóptero en Pakistán llegaron el sábado a una base militar cerca de la capital Islamabad. Incluyen los embajadores de las Filipinas y Noruega y las esposas de los embajadores de Malasia e Indonesia.
La televisión estatal mostró al jefe del ejército, general Raheef Sharif, saludando los féretros envueltos en banderas de los cuatro extranjeros y los tres tripulantes paquistaníes muertos en el accidente del viernes. Otras 12 personas heridas también llegaron a la base en un avión C-130.
El aparato, que transportaba a los dignatarios a una ceremonia en un centro de esquí, se estrelló y se incendió al hacer impacto. Algunos de los sobrevivientes describieron desde sus lechos en un hospital la odisea de un vuelo de rutina que terminó en desastre.
Hasrul Sani Mujtabar, el alto comisionado de la embajada malasia, dijo a la prensa estatal que "todo anduvo bien excepto en los últimos minutos".
Cuando se aproximaba a la plataforma de aterrizaje, el helicóptero empezó a girar en forma espiral.
"Después chocó en el suelo. Vi que el piloto murió y otros murieron instantáneamente", agregó. "Pude reptar hasta el asiento frontal del piloto, rompí la ventanilla y salí".
Mujtabar sufrió quemaduras en la cara y el cuello y elogió a los médicos que lo atendieron.
Otro sobreviviente, un oficial del ejército paquistaní a quien la televisión identificó como el mayor Kamran, dijo que el choque lo dejó inconsciente por un momento. Cuando retomó conciencia trató de salvarse como pudo. "El helicóptero se había incendiado y las llamas se nos acercaban", afirmó, y dijo que uno de los pilotos muertos fue su compañero de estudios.
Pakistán atribuyó el accidente a una falla técnica. El Talibán paquistaní emitió una declaración en la que aseguró haber derribado el helicóptero, lo que el gobierno desestimó por considerarlo una atribución oportunista.
Los cadáveres de varios diplomáticos extranjeros muertos en un accidente de helicóptero en Pakistán llegaron el sábado a una base militar cerca de la capital Islamabad. Incluyen los embajadores de las Filipinas y Noruega y las esposas de los embajadores de Malasia e Indonesia.
La televisión estatal mostró al jefe del ejército, general Raheef Sharif, saludando los féretros envueltos en banderas de los cuatro extranjeros y los tres tripulantes paquistaníes muertos en el accidente del viernes. Otras 12 personas heridas también llegaron a la base en un avión C-130.
El aparato, que transportaba a los dignatarios a una ceremonia en un centro de esquí, se estrelló y se incendió al hacer impacto. Algunos de los sobrevivientes describieron desde sus lechos en un hospital la odisea de un vuelo de rutina que terminó en desastre.
Hasrul Sani Mujtabar, el alto comisionado de la embajada malasia, dijo a la prensa estatal que "todo anduvo bien excepto en los últimos minutos".
Cuando se aproximaba a la plataforma de aterrizaje, el helicóptero empezó a girar en forma espiral.
"Después chocó en el suelo. Vi que el piloto murió y otros murieron instantáneamente", agregó. "Pude reptar hasta el asiento frontal del piloto, rompí la ventanilla y salí".
Mujtabar sufrió quemaduras en la cara y el cuello y elogió a los médicos que lo atendieron.
Otro sobreviviente, un oficial del ejército paquistaní a quien la televisión identificó como el mayor Kamran, dijo que el choque lo dejó inconsciente por un momento. Cuando retomó conciencia trató de salvarse como pudo. "El helicóptero se había incendiado y las llamas se nos acercaban", afirmó, y dijo que uno de los pilotos muertos fue su compañero de estudios.
Pakistán atribuyó el accidente a una falla técnica. El Talibán paquistaní emitió una declaración en la que aseguró haber derribado el helicóptero, lo que el gobierno desestimó por considerarlo una atribución oportunista.