No habrá operación militar palestina en Siria, dice la OLP
Ramala, AP
La Organización de Liberación Palestina afirmó que no participará en las operaciones militares en un asediado campo de refugiados palestinos en Siria, rechazando las alegaciones de que los palestinos se sumarían a las tropas sirias para expulsar a milicianos del grupo Estado Islámico del asentamiento.
El comunicado de la OLP, difundido el jueves por la noche, contradecía declaraciones previas del enviado de la OLP en Damasco, Ahmad Majdalani, sobre grupos palestinos listos para unir fuerzas con el gobierno sirio para expulsar a los combatientes del grupo EI del campamento de Yarmuk.
Sus declaraciones iban en contra de la posición adoptada hace tiempo por el presidente palestino, Mahmud Abás, sobre que los palestinos deberían mantenerse al margen del conflicto en Siria. No estaba claro en un primer momento por qué Majdalani, enviado por Abás a Damasco para gestionar la crisis en Yarmuk, expresó su apoyo a una intervención militar palestina en Siria.
Wasel Abu Yusef, alto cargo de la OLP, dijo el viernes que negociar un paso seguro para los asediados residentes de Yarmuk y para suministros humanitarios es preferible a tomar acciones militares.
"Sabemos que si el ejército (Sirio), con sus aviones y tanques, interfiriera, eso supondría la completa destrucción del campamento", dijo.
Combatientes de la milicia radical Estado Islámico tomaron buena parte de Yarmuk la semana pasada, estableciendo su presencia en la capital siria por primera vez. La incursión es la última prueba para los aproximadamente 18.000 habitantes que se cree siguen en Yarmuk, tras sufrir un devastador asedio del gobierno durante dos años, golpeados por el hambre y las enfermedades.
Reporteros en una visita el jueves a Yarmuk con escolta del gobierno sirio vieron edificios destrozados en la entrada norte del asentamiento. En sus calles polvorientas y desiertas, unas pocas ovejas comían entre los escombros.
Expulsar a los milicianos de Yarmuk por la fuerza es una prioridad y la única opción, afirmó una fuente del gobierno sirio. Majdalani dijo el jueves tras reunirse con autoridades sirias que "pronto comenzará" una campaña militar de tropas sirias con facciones palestinas.
Sin embargo, la OLP dijo más tarde que "nos negamos a vernos arrastrados a cualquier campaña armada, sea cual sea su naturaleza o alcance".
"Pedimos recurrir a otros medios para evitar el derramamiento de sangre de nuestra gente e impedir más destrucción y desplazamientos para los palestinos" de Yarmuk, añadió el comunicado.
Mientras, en Moscú, las conversaciones entre el gobierno sirio y la oposición terminaron en desacuerdo el viernes, sin que ambas partes lograran acercar posiciones.
Los bandos aceptaron una serie de principios para un acuerdo político, señaló el mediador ruso de la semana de reuniones, Vitaly Naumkin, que admitió que no habían logrado ponerse de acuerdo en medidas para aumentar la confianza.
Después, algunos participantes revocaron su apoyo a los principios iniciales porque no se habían acordado medidas para liberar prisioneros y otros pasos para aumentar la confianza mutua, señaló Naumkin.
Moscú organizó las negociaciones en un intento de aumentar su presencia internacional en un momento de agrias tensiones con Occidente por el conflicto en Ucrania.
Los líderes de los principales grupos de oposición no participaron en el encuentro en Moscú de esta semana ni en una ronda anterior en enero.
Sí acudió Qadri Yamil, ex vice primer ministro y que ahora representa al opositor Frente Popular de Cambio y Liberación. Yamil dijo el viernes que sólo podrían celebrarse nuevas conversaciones en Moscú si antes hay una tercera conferencia internacional auspiciada por Naciones Unidas.
La Organización de Liberación Palestina afirmó que no participará en las operaciones militares en un asediado campo de refugiados palestinos en Siria, rechazando las alegaciones de que los palestinos se sumarían a las tropas sirias para expulsar a milicianos del grupo Estado Islámico del asentamiento.
El comunicado de la OLP, difundido el jueves por la noche, contradecía declaraciones previas del enviado de la OLP en Damasco, Ahmad Majdalani, sobre grupos palestinos listos para unir fuerzas con el gobierno sirio para expulsar a los combatientes del grupo EI del campamento de Yarmuk.
Sus declaraciones iban en contra de la posición adoptada hace tiempo por el presidente palestino, Mahmud Abás, sobre que los palestinos deberían mantenerse al margen del conflicto en Siria. No estaba claro en un primer momento por qué Majdalani, enviado por Abás a Damasco para gestionar la crisis en Yarmuk, expresó su apoyo a una intervención militar palestina en Siria.
Wasel Abu Yusef, alto cargo de la OLP, dijo el viernes que negociar un paso seguro para los asediados residentes de Yarmuk y para suministros humanitarios es preferible a tomar acciones militares.
"Sabemos que si el ejército (Sirio), con sus aviones y tanques, interfiriera, eso supondría la completa destrucción del campamento", dijo.
Combatientes de la milicia radical Estado Islámico tomaron buena parte de Yarmuk la semana pasada, estableciendo su presencia en la capital siria por primera vez. La incursión es la última prueba para los aproximadamente 18.000 habitantes que se cree siguen en Yarmuk, tras sufrir un devastador asedio del gobierno durante dos años, golpeados por el hambre y las enfermedades.
Reporteros en una visita el jueves a Yarmuk con escolta del gobierno sirio vieron edificios destrozados en la entrada norte del asentamiento. En sus calles polvorientas y desiertas, unas pocas ovejas comían entre los escombros.
Expulsar a los milicianos de Yarmuk por la fuerza es una prioridad y la única opción, afirmó una fuente del gobierno sirio. Majdalani dijo el jueves tras reunirse con autoridades sirias que "pronto comenzará" una campaña militar de tropas sirias con facciones palestinas.
Sin embargo, la OLP dijo más tarde que "nos negamos a vernos arrastrados a cualquier campaña armada, sea cual sea su naturaleza o alcance".
"Pedimos recurrir a otros medios para evitar el derramamiento de sangre de nuestra gente e impedir más destrucción y desplazamientos para los palestinos" de Yarmuk, añadió el comunicado.
Mientras, en Moscú, las conversaciones entre el gobierno sirio y la oposición terminaron en desacuerdo el viernes, sin que ambas partes lograran acercar posiciones.
Los bandos aceptaron una serie de principios para un acuerdo político, señaló el mediador ruso de la semana de reuniones, Vitaly Naumkin, que admitió que no habían logrado ponerse de acuerdo en medidas para aumentar la confianza.
Después, algunos participantes revocaron su apoyo a los principios iniciales porque no se habían acordado medidas para liberar prisioneros y otros pasos para aumentar la confianza mutua, señaló Naumkin.
Moscú organizó las negociaciones en un intento de aumentar su presencia internacional en un momento de agrias tensiones con Occidente por el conflicto en Ucrania.
Los líderes de los principales grupos de oposición no participaron en el encuentro en Moscú de esta semana ni en una ronda anterior en enero.
Sí acudió Qadri Yamil, ex vice primer ministro y que ahora representa al opositor Frente Popular de Cambio y Liberación. Yamil dijo el viernes que sólo podrían celebrarse nuevas conversaciones en Moscú si antes hay una tercera conferencia internacional auspiciada por Naciones Unidas.