UE ajusta medidas antiterroristas
Bruselas, AP
Los países europeos acordaron el jueves incrementar la vigilancia de viajeros que responden a los criterios de que podrían ser terroristas o combatientes islamistas extranjeros.
La decisión fue tomada por los ministros de Interior de la UE y anunciada por el ministro letón Rihards Kozlovskis, quien presidió la sesión.
Funcionarios de la UE dijeron que la decisión, vigente a partir de junio, regirá en los 26 países del área de Schengen, a la que pertenecen 22 estados miembros de la UE.
Kozlovskis dijo que la UE y los miembros están elaborando los "indicadores de riesgo" para determinar cuáles viajeros y documentos serán sometidos a exámenes más intensos que el resto.
Preguntado si estos indicadores incluyen la indumentaria, la religión o los libros que lleva el viajero, el ministro letón se excusó de entrar en detalles, pero dijo que los europeos que viajan a Irak y Siria a participar en las luchas libradas por grupos extremistas son el blanco principal de la medida.
"El número de combatientes extranjeros desgraciadamente sigue aumentando de manera drástica", dijo Kozlovskis. "Debemos hacer algo para limitar el movimiento de esas personas. Desgraciadamente son ciudadanos de la UE en su mayoría".
Funcionarios del bloque han dicho que los criterios aplicados para individualizar viajeros probablemente no incluirán el origen étnico ni factores tales como comidas especiales que solicitaron en los aviones para cumplir con deberes religiosos, pero sí incluirán su destino y su itinerario completo.
Por otra parte, los ministros ordenaron la creación en Europol, el organismo de cooperación policial, de una unidad especial que trabaje con los proveedores de internet para eliminar contenidos proterroristas o extremistas de las páginas de internet y las redes sociales.
La lucha contra el terrorismo es una de las prioridades de la UE desde los ataques del 7 a 9 de enero en París en los que murieron 17 personas. El ministro del Interior francés, Bernard Cazeneuve, exhortó a tomar medidas decisivas e inmediatas.
"Hoy la lucha contra el terrorismo es una lucha contra el tiempo", dijo Cazeneuve a la prensa. "Es una lucha contrarreloj. Cada minuto que perdemos al demorarnos es una oportunidad adicional que damos a los terroristas para que ataquen".
Por su parte, Kozlovskis dijo que "no podemos quedarnos cruzados de brazos hasta que se produzca el próximo ataque".
Se estima que unos 4.000 europeos han ido a luchar con grupos musulmanes extremistas en Siria e Irak desde octubre. Los gobiernos de la UE quieren impedir que viajen o en todo caso atraparlos si regresan con la intención de perpetrar ataques terroristas en sus países de origen.
En 2014, unos 564 millones de viajeros entraron o salieron de la zona Schengen, dentro de la cual la gente puede desplazarse libremente de un país a otro sin pasar por inmigración o aduanas.
Los países europeos acordaron el jueves incrementar la vigilancia de viajeros que responden a los criterios de que podrían ser terroristas o combatientes islamistas extranjeros.
La decisión fue tomada por los ministros de Interior de la UE y anunciada por el ministro letón Rihards Kozlovskis, quien presidió la sesión.
Funcionarios de la UE dijeron que la decisión, vigente a partir de junio, regirá en los 26 países del área de Schengen, a la que pertenecen 22 estados miembros de la UE.
Kozlovskis dijo que la UE y los miembros están elaborando los "indicadores de riesgo" para determinar cuáles viajeros y documentos serán sometidos a exámenes más intensos que el resto.
Preguntado si estos indicadores incluyen la indumentaria, la religión o los libros que lleva el viajero, el ministro letón se excusó de entrar en detalles, pero dijo que los europeos que viajan a Irak y Siria a participar en las luchas libradas por grupos extremistas son el blanco principal de la medida.
"El número de combatientes extranjeros desgraciadamente sigue aumentando de manera drástica", dijo Kozlovskis. "Debemos hacer algo para limitar el movimiento de esas personas. Desgraciadamente son ciudadanos de la UE en su mayoría".
Funcionarios del bloque han dicho que los criterios aplicados para individualizar viajeros probablemente no incluirán el origen étnico ni factores tales como comidas especiales que solicitaron en los aviones para cumplir con deberes religiosos, pero sí incluirán su destino y su itinerario completo.
Por otra parte, los ministros ordenaron la creación en Europol, el organismo de cooperación policial, de una unidad especial que trabaje con los proveedores de internet para eliminar contenidos proterroristas o extremistas de las páginas de internet y las redes sociales.
La lucha contra el terrorismo es una de las prioridades de la UE desde los ataques del 7 a 9 de enero en París en los que murieron 17 personas. El ministro del Interior francés, Bernard Cazeneuve, exhortó a tomar medidas decisivas e inmediatas.
"Hoy la lucha contra el terrorismo es una lucha contra el tiempo", dijo Cazeneuve a la prensa. "Es una lucha contrarreloj. Cada minuto que perdemos al demorarnos es una oportunidad adicional que damos a los terroristas para que ataquen".
Por su parte, Kozlovskis dijo que "no podemos quedarnos cruzados de brazos hasta que se produzca el próximo ataque".
Se estima que unos 4.000 europeos han ido a luchar con grupos musulmanes extremistas en Siria e Irak desde octubre. Los gobiernos de la UE quieren impedir que viajen o en todo caso atraparlos si regresan con la intención de perpetrar ataques terroristas en sus países de origen.
En 2014, unos 564 millones de viajeros entraron o salieron de la zona Schengen, dentro de la cual la gente puede desplazarse libremente de un país a otro sin pasar por inmigración o aduanas.