Potencias europeas se unirán a banco de desarrollo liderado por China, desafían a EEUU
París, Reuters
Alemania, Francia e Italia anunciaron el martes que acordaron unirse a un nuevo banco de inversión asiático liderado por China, después de que Gran Bretaña desafiara a Estados Unidos al convertirse en miembro fundador de una iniciativa que es vista por Washington como un rival del Banco Mundial.
La decisión de las tres principales economías de la zona euro de participar en uno de los proyectos insignia de Pekín es un golpe diplomático para Estados Unidos y refleja el afán de Europa por asociarse con China, la segunda economía más grande del mundo.
También llega en medio de unas espinosas negociaciones comerciales entre Bruselas y Washington, y en momentos en que la Unión Europea y los gobiernos asiáticos muestran su frustración por el retraso del Congreso de Estados Unidos para aprobar una reforma que debiese entregar a China y otras economías emergentes más poder en el Fondo Monetario Internacional (FMI).
El ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schäuble, dijo que la mayor economía europea será un miembro fundador del Banco Asiático de Inversión en Infraestructura (BAII), mientras que un funcionario del Ministerio de Finanzas de Francia dijo a Reuters que su país destaca el acuerdo entre Francia, Alemania e Italia.
El Tesoro italiano, en tanto, dijo que los europeos acordaron trabajar para asegurar que la nueva institución "siga las mejores normas y prácticas en materia de gobierno, salvaguardias, deuda y políticas de contratación".
El canciller francés, Laurent Fabius, dijo a periodistas que "nosotros ciertamente consideramos esta idea como positiva".
"Ustedes han visto que los británicos ya se han unido. Hemos estado trabajando en esta posibilidad desde hace bastante tiempo", agregó.
El BAAI fue lanzado en Pekín el año pasado para impulsar
la inversión en Asia en materia de transporte, energía, telecomunicaciones y otras obras de infraestructura. Desde un inicio fue visto como un rival para el Banco Mundial y el Banco Asiático de Desarrollo.
Washington ha cuestionado si tendrá altos estándares de gobierno y las salvaguardias ambientales y sociales.
Tradicionalmente, el Banco Mundial está dirigido por un candidato apoyado por Estados Unidos. Washington también tiene una fuerte influencia en el FMI.
China dijo a principios de este año que un total de 26 países se han sumado como miembros fundadores del BAII, principalmente de Asia y Oriente Medio.
La agencia estatal de noticias china Xinhua dijo que Corea del Sur, Suiza y Luxemburgo también están considerando la posibilidad de unirse a la iniciativa.
Alemania, Francia e Italia anunciaron el martes que acordaron unirse a un nuevo banco de inversión asiático liderado por China, después de que Gran Bretaña desafiara a Estados Unidos al convertirse en miembro fundador de una iniciativa que es vista por Washington como un rival del Banco Mundial.
La decisión de las tres principales economías de la zona euro de participar en uno de los proyectos insignia de Pekín es un golpe diplomático para Estados Unidos y refleja el afán de Europa por asociarse con China, la segunda economía más grande del mundo.
También llega en medio de unas espinosas negociaciones comerciales entre Bruselas y Washington, y en momentos en que la Unión Europea y los gobiernos asiáticos muestran su frustración por el retraso del Congreso de Estados Unidos para aprobar una reforma que debiese entregar a China y otras economías emergentes más poder en el Fondo Monetario Internacional (FMI).
El ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schäuble, dijo que la mayor economía europea será un miembro fundador del Banco Asiático de Inversión en Infraestructura (BAII), mientras que un funcionario del Ministerio de Finanzas de Francia dijo a Reuters que su país destaca el acuerdo entre Francia, Alemania e Italia.
El Tesoro italiano, en tanto, dijo que los europeos acordaron trabajar para asegurar que la nueva institución "siga las mejores normas y prácticas en materia de gobierno, salvaguardias, deuda y políticas de contratación".
El canciller francés, Laurent Fabius, dijo a periodistas que "nosotros ciertamente consideramos esta idea como positiva".
"Ustedes han visto que los británicos ya se han unido. Hemos estado trabajando en esta posibilidad desde hace bastante tiempo", agregó.
El BAAI fue lanzado en Pekín el año pasado para impulsar
la inversión en Asia en materia de transporte, energía, telecomunicaciones y otras obras de infraestructura. Desde un inicio fue visto como un rival para el Banco Mundial y el Banco Asiático de Desarrollo.
Washington ha cuestionado si tendrá altos estándares de gobierno y las salvaguardias ambientales y sociales.
Tradicionalmente, el Banco Mundial está dirigido por un candidato apoyado por Estados Unidos. Washington también tiene una fuerte influencia en el FMI.
China dijo a principios de este año que un total de 26 países se han sumado como miembros fundadores del BAII, principalmente de Asia y Oriente Medio.
La agencia estatal de noticias china Xinhua dijo que Corea del Sur, Suiza y Luxemburgo también están considerando la posibilidad de unirse a la iniciativa.