Ministro cultura vaticano reconoce problema con video
Ciudad del Vaticano, AP
El ministro de Cultura del Vaticano reconoció el lunes que su despacho debe ampliar horizontes después que un video promocional de una conferencia en la Santa Sede sobre el papel de la mujer —protagonizado por una actriz italiana— fue objeto de burlas en América del Norte.
En el video, la actriz Nancy Brilli pide a las mujeres que envíen videoclips de un minuto de sus vidas para ser exhibidos esta semana en una reunión del Consejo Pontificio de Cultura.
El video fue idea de 15 mujeres profesionales —todas italianas excepto una— escogidas por el cardenal Gianfranco Ravasi para que lo asesoraran sobre la agenda de "Culturas de las mujeres: Igualdad y Diferencia".
La desconexión en cómo el video fue recibido en Italia —positivamente— y la reacción negativa en el mundo de habla inglesa destacó cómo el Vaticano con frecuencia olvida que es una institución mundial, no italiana.
En Italia, las coristas son una parte importante del horario principal de la televisión y el ex primer ministro Silvio Berlusconi fue sometido a juicio por sus supuestas relaciones con mujeres menores de edad en fiestas.
"Nos permitió entender... que debemos representar no sólo las sensibilidades tradicionales de Europa, sino también las de otras culturas y horizontes", dijo Ravasi en una conferencia de prensa el lunes. "Me hizo darme cuenta de que las sensibilidades son profundamente diferentes".
Ravasi planeaba nombrar un grupo permanente de consulta sobre la mujer, aunque dijo que por razones prácticas las integrantes serían casi todas italianas.
En una alocución en la misma sesión informativa, Brilli defendió el video y el derecho de la mujer a someterse a cirugías plásticas. En un documento dirigido a la reunión y redactado por las 15 mujeres, se condenó la cirugía plástica no terapéutica como "agresión" al cuerpo femenino, "como una burka hecha de carne".
Brilli, cuya pareja es un conocido cirujano plástico italiano, dijo que hay diferencias entre una mujer que se opere porque cree que tiene que lucir de otra manera, y alguien que sencillamente no está feliz con su cuerpo.
"Si se sienten mejor, ¿dónde está el daño?", preguntó.
El ministro de Cultura del Vaticano reconoció el lunes que su despacho debe ampliar horizontes después que un video promocional de una conferencia en la Santa Sede sobre el papel de la mujer —protagonizado por una actriz italiana— fue objeto de burlas en América del Norte.
En el video, la actriz Nancy Brilli pide a las mujeres que envíen videoclips de un minuto de sus vidas para ser exhibidos esta semana en una reunión del Consejo Pontificio de Cultura.
El video fue idea de 15 mujeres profesionales —todas italianas excepto una— escogidas por el cardenal Gianfranco Ravasi para que lo asesoraran sobre la agenda de "Culturas de las mujeres: Igualdad y Diferencia".
La desconexión en cómo el video fue recibido en Italia —positivamente— y la reacción negativa en el mundo de habla inglesa destacó cómo el Vaticano con frecuencia olvida que es una institución mundial, no italiana.
En Italia, las coristas son una parte importante del horario principal de la televisión y el ex primer ministro Silvio Berlusconi fue sometido a juicio por sus supuestas relaciones con mujeres menores de edad en fiestas.
"Nos permitió entender... que debemos representar no sólo las sensibilidades tradicionales de Europa, sino también las de otras culturas y horizontes", dijo Ravasi en una conferencia de prensa el lunes. "Me hizo darme cuenta de que las sensibilidades son profundamente diferentes".
Ravasi planeaba nombrar un grupo permanente de consulta sobre la mujer, aunque dijo que por razones prácticas las integrantes serían casi todas italianas.
En una alocución en la misma sesión informativa, Brilli defendió el video y el derecho de la mujer a someterse a cirugías plásticas. En un documento dirigido a la reunión y redactado por las 15 mujeres, se condenó la cirugía plástica no terapéutica como "agresión" al cuerpo femenino, "como una burka hecha de carne".
Brilli, cuya pareja es un conocido cirujano plástico italiano, dijo que hay diferencias entre una mujer que se opere porque cree que tiene que lucir de otra manera, y alguien que sencillamente no está feliz con su cuerpo.
"Si se sienten mejor, ¿dónde está el daño?", preguntó.