Egipto aprueba ley antiterrorista
El Cairo, AP
El presidente egipcio ha promulgado una ley que amplía la definición de terrorismo para incluir a las personas que amenazan el orden público "por cualquier medio" y otorga poderes a las autoridades para elaborar listas de presuntos terroristas con escasas posibilidades de apelación judicial.
Bajo la nueva ley, los fiscales pueden designar a alguien terrorista, congelar sus bienes y vedarle la actividad pública o los viajes, con la simple aprobación de un panel de jueces y sin juicio. La inclusión en la lista es válida por tres años y es renovable.
El decreto ley fue firmado por el presidente Abdel Fatá el-Sisi la semana pasada y distribuido a la prensa el martes.
Es parte de la campaña del gobierno contra una insurgencia creciente por parte de grupos de milicianos, uno de los cuales ha jurado fidelidad al grupo Estado Islámico que combate en Irak y Siria.
Las autoridades han reprimido a los partidarios del presidente derrocado Mohammed Morsi, así como a los jóvenes activistas y grupos que provocaron la caída del autócrata Hosni Mubarak en 2011. En el plano internacional, Egipto ha pedido a sus aliados una mayor cooperación en la lucha contra el terrorismo en la región, particularmente en la vecina Libia.
Activistas por los derechos civiles criticaron la ley y dijeron que solo sirve para ampliar los poderes de las autoridades contra la oposición política.
"Ante la ausencia de rendición de cuentas y supervisión, nunca sabremos a quién se aplica esta ley", dijo Mohammed Zaree, directivo del Instituto Cairota de Estudios sobre Derechos Humanos. "Con la ausencia de rendición de cuentas y supervisión, las autoridades quedan fuera del alcance de la ley".
El presidente egipcio ha promulgado una ley que amplía la definición de terrorismo para incluir a las personas que amenazan el orden público "por cualquier medio" y otorga poderes a las autoridades para elaborar listas de presuntos terroristas con escasas posibilidades de apelación judicial.
Bajo la nueva ley, los fiscales pueden designar a alguien terrorista, congelar sus bienes y vedarle la actividad pública o los viajes, con la simple aprobación de un panel de jueces y sin juicio. La inclusión en la lista es válida por tres años y es renovable.
El decreto ley fue firmado por el presidente Abdel Fatá el-Sisi la semana pasada y distribuido a la prensa el martes.
Es parte de la campaña del gobierno contra una insurgencia creciente por parte de grupos de milicianos, uno de los cuales ha jurado fidelidad al grupo Estado Islámico que combate en Irak y Siria.
Las autoridades han reprimido a los partidarios del presidente derrocado Mohammed Morsi, así como a los jóvenes activistas y grupos que provocaron la caída del autócrata Hosni Mubarak en 2011. En el plano internacional, Egipto ha pedido a sus aliados una mayor cooperación en la lucha contra el terrorismo en la región, particularmente en la vecina Libia.
Activistas por los derechos civiles criticaron la ley y dijeron que solo sirve para ampliar los poderes de las autoridades contra la oposición política.
"Ante la ausencia de rendición de cuentas y supervisión, nunca sabremos a quién se aplica esta ley", dijo Mohammed Zaree, directivo del Instituto Cairota de Estudios sobre Derechos Humanos. "Con la ausencia de rendición de cuentas y supervisión, las autoridades quedan fuera del alcance de la ley".