Líbano frena el ingreso de refugiados sirios
Líbano empezó a imponer restricciones sin precedentes sobre el ingreso de sirios el lunes, en su intento de mantener el frágil equilibrio entre las sectas y evitar ser abrumado por el millón de refugiados que huyen de la guerra civil en el país vecino.
La nueva obligación de obtener visas que limitan estrictamente el tiempo que pueden permanecer en el Líbano reduce una de las pocas vías de escape de una guerra que ha desplazado a un tercio de la población siria de preguerra y no da señales de terminar.
Más de tres millones de sirios han huido, principalmente a los vecinos Líbano, Turquía, Jordania e Irak. Los países occidentales aceptan a un pequeño número de refugiados y cientos de personas se han ahogado en el intento de cruzar el Mediterráneo en embarcaciones precarias de contrabandistas.
Las autoridades libanesas dicen que no pueden absorber más. El gobierno calcula que hay 1,5 millones de sirios, lo que equivale a la cuarta parte de la población. De éstos, alrededor de 1,1 millones están registrados con la agencia de la ONU para refugiados.
"Tenemos suficiente. No nos queda capacidad para recibir a más desplazados", dijo el ministro del Interior, Nohad Machnouk, en una conferencia de prensa transmitida por la televisión local.
Agentes de seguridad libaneses dijeron que muchos sirios fueron rechazados en los cruces fronterizos el lunes, pero que no conocían las cifras precisas. El flujo de sirios en un cruce concurrido parecía menor de lo normal el lunes.
No se prevé repatriar por la fuerza a los sirios que ya están en el Líbano.
Los cambios vigentes desde el lunes prevén nuevas categorías de visas para los sirios —turismo, negocios, educación, atención médica— y limitan el tiempo que pueden permanecer en el país.
