Vigo Mortensen: “Si el Real Madrid marca muy pronto, será una matanza”
Viggo Mortensen, el actor que puso rostro a Aragorn o el Capitán Alatriste, es hincha ‘cuervo’ hasta el tuétano... pero también le tira el Real Madrid.
Marrakech, As
Usted es el hincha más famoso de San Lorenzo junto al Sumo Pontífice. Pese a su condición de estrella del celuloide, siempre se ha volcado con el Ciclón. ¿Cómo le entró el veneno cuervo en la sangre?
—Lo vinculo a mis primeras memorias de fútbol. Tenía cuatro años cuando empecé a hacerme de San Lorenzo por un equipo que recibió el apodo de Los Carasucias. Los Doval, Areán... El Manco Casa era tremendo. No ganaron ningún campeonato, pero su juego era muy vistoso y la gente disfrutaba. El resto de los pibes en el colegio eran de River, Estudiantes... y yo era el único de San Lorenzo. Después, cuando ganamos el primer título en 1968 con otro plantel, conocido como Los Matadores, ya sí había otros en la escuela que decían que iban con los cuervos...
—Está en Marrakech para la final y siempre reconoció que le va también el Madrid. Cuénteme sus sensaciones...
—Es un partido histórico, pero soy sincero y no voy a ser diplomático: soy aficionado del Madrid pero voy con San Lorenzo porque es el equipo de mi infancia. A los blancos empecé a conocerlos ya en los setenta. Si gana el Madrid no me sentiré tan mal, pero si gana San Lorenzo me sentiré mejor... Lo más probable es que gane fácilmente el Madrid, pero San Lorenzo le jugará de igual a igual. No tenemos 500 millones de presupuesto y perdimos jugadores valiosos de la Libertadores como Piatti, el que armaba el juego junto a Romagnoli. Si el Madrid pierde dos o tres jugadores no pasa nada. Son dos mundos diferentes, pero San Lorenzo tiene una tradición de aguante y de elevar el nivel en el momento de la verdad.
—¿Cuál sería la receta para dar la sorpresa?
—Soy realista, si el Madrid marca muy pronto, en los primeros diez minutos, puede ser una matanza total. Pero si controlan a Cristiano, puede frustrarse por no marcar, que a veces le pasa, y volverse canchero y un poco egoísta con el balón. Si San Lorenzo logra eso, los podemos desarmar...
—San Lorenzo presionó y logró cambiar de árbitro. ¿Ahí marcó ya un gol?
—Cada uno tira por su lado. En la semifinal nos tocaron árbitros australianos contra un equipo de Nueva Zelanda, no fue justo. Matías Lemmens es un presidente buenísimo, honesto, que ya es raro en un club argentino. Es muy inteligente y busca que no se condicione el arbitraje, porque desde Madrid se habla de que San Lorenzo juega violento. Y no es así. Los centrales juegan duro pero con limpieza, como Ramos. Como hincha madridista digo que peor fue la etapa de Mourinho. Convirtió a Pepe en una bestia. Ahora está demostrando lo buen jugador que es. Ese entrenador hizo mucho daño. A los del Chelsea los tiene cagados. No entiendo que siga habiendo madridistas que lo apoyen... Ahora con Ancelotti, todo es excelente. El Madrid no jugaba tan bien desde que fichó a Zidane.
—Se dice que lleva cosas de San Lorenzo a sus estrenos para tener suerte. ¿Qué llevará en el Stade de Marrakech?
—Todavía no sé qué remera me voy a poner, he traído una maleta llena (risas). Debo decidir si una histórica o la actual...
—Pase lo que pase, intuyo que disfrutará de la final.
—Eso espero. Me despido con cuatro palabras: ‘¡Aguante Ciclón, Hala Madrid!.
Usted es el hincha más famoso de San Lorenzo junto al Sumo Pontífice. Pese a su condición de estrella del celuloide, siempre se ha volcado con el Ciclón. ¿Cómo le entró el veneno cuervo en la sangre?
—Lo vinculo a mis primeras memorias de fútbol. Tenía cuatro años cuando empecé a hacerme de San Lorenzo por un equipo que recibió el apodo de Los Carasucias. Los Doval, Areán... El Manco Casa era tremendo. No ganaron ningún campeonato, pero su juego era muy vistoso y la gente disfrutaba. El resto de los pibes en el colegio eran de River, Estudiantes... y yo era el único de San Lorenzo. Después, cuando ganamos el primer título en 1968 con otro plantel, conocido como Los Matadores, ya sí había otros en la escuela que decían que iban con los cuervos...
—Está en Marrakech para la final y siempre reconoció que le va también el Madrid. Cuénteme sus sensaciones...
—Es un partido histórico, pero soy sincero y no voy a ser diplomático: soy aficionado del Madrid pero voy con San Lorenzo porque es el equipo de mi infancia. A los blancos empecé a conocerlos ya en los setenta. Si gana el Madrid no me sentiré tan mal, pero si gana San Lorenzo me sentiré mejor... Lo más probable es que gane fácilmente el Madrid, pero San Lorenzo le jugará de igual a igual. No tenemos 500 millones de presupuesto y perdimos jugadores valiosos de la Libertadores como Piatti, el que armaba el juego junto a Romagnoli. Si el Madrid pierde dos o tres jugadores no pasa nada. Son dos mundos diferentes, pero San Lorenzo tiene una tradición de aguante y de elevar el nivel en el momento de la verdad.
—¿Cuál sería la receta para dar la sorpresa?
—Soy realista, si el Madrid marca muy pronto, en los primeros diez minutos, puede ser una matanza total. Pero si controlan a Cristiano, puede frustrarse por no marcar, que a veces le pasa, y volverse canchero y un poco egoísta con el balón. Si San Lorenzo logra eso, los podemos desarmar...
—San Lorenzo presionó y logró cambiar de árbitro. ¿Ahí marcó ya un gol?
—Cada uno tira por su lado. En la semifinal nos tocaron árbitros australianos contra un equipo de Nueva Zelanda, no fue justo. Matías Lemmens es un presidente buenísimo, honesto, que ya es raro en un club argentino. Es muy inteligente y busca que no se condicione el arbitraje, porque desde Madrid se habla de que San Lorenzo juega violento. Y no es así. Los centrales juegan duro pero con limpieza, como Ramos. Como hincha madridista digo que peor fue la etapa de Mourinho. Convirtió a Pepe en una bestia. Ahora está demostrando lo buen jugador que es. Ese entrenador hizo mucho daño. A los del Chelsea los tiene cagados. No entiendo que siga habiendo madridistas que lo apoyen... Ahora con Ancelotti, todo es excelente. El Madrid no jugaba tan bien desde que fichó a Zidane.
—Se dice que lleva cosas de San Lorenzo a sus estrenos para tener suerte. ¿Qué llevará en el Stade de Marrakech?
—Todavía no sé qué remera me voy a poner, he traído una maleta llena (risas). Debo decidir si una histórica o la actual...
—Pase lo que pase, intuyo que disfrutará de la final.
—Eso espero. Me despido con cuatro palabras: ‘¡Aguante Ciclón, Hala Madrid!.
