Coalición de Abe se asegura victoria en comicios de Japón con mínimo nivel de participación
Tokio, Reuters
El primer ministro japonés, Shinzo Abe, dejó de lado el lunes las sugerencias de que una débil participación empañó la victoria de su coalición en unos comicios el domingo y prometió ceñirse a políticas económicas reflacionarias, abordar dolorosas reformas estructurales y buscar garantías para la seguridad.
Aunque las dudas persistían sobre si Abe, que ahora tiene la oportunidad de convertirse en un excepcional y duradero líder en Japón, puede dirigir un crecimiento sostenible con su estrategia "Abenomics" de una política monetaria hiper flexible, gasto gubernamental y promesas de liberalización.
"Escuchamos la voz del pueblo diciendo 'sigan adelante con Abenomics'", dijo Abe en una conferencia de prensa en la oficina principal de su gobernante Partido Liberal Democrático (PLD), adornado con carteles gigantes del premier y su lema de campaña: "Este es el único camino".
"Quiero implementar las 'Tres Flechas' con audacia", dijo Abe, al agregar que compilaría medidas de estímulo antes de fin de año y pediría a líderes empresariales elevar los salarios, que no han seguido el ritmo en medio de alzas en los precios al consumidor", agregó.
El PLD de Abe y su socio menor, el Partido Komeito, lograron 326 escaños en las elecciones del domingo, lo suficiente como para mantener su "súper-mayoría" de dos tercios.
El resultado se mantuvo sin cambios respecto a un cálculo de la coalición antes de los comicios, aunque el número de escaños del PLD cayó levemente a 291, frente a 295.
Muchos votantes, que dudan tanto de la estrategia de Abe para poner fin a la deflación y generar crecimiento como de la capacidad de la oposición para idear un mejor plan, se quedaron en casa.
La participación de los votantes fue estimada en un mínimo histórico de 53,3 por ciento, muy por debajo del 59,3 por ciento de las elecciones de 2012, en las que Abe retornó al poder para iniciar un segundo mandato, en medio de promesas de reactivar una economía afectada por la deflación y el envejecimiento de la población.
En una señal de fragilidad del Gobierno de Abe, el PLD obtuvo el 75 por ciento de los escaños en distritos de un solo miembro que representan 295 asientos en la Cámara baja con apenas un 48 por ciento de los votos, mostraron datos del diario metropolitano Tokyo Shimbun.
Pero con la mayoría de la oposición aún débil, cualquier resistencia a las políticas de Abe seguramente provendrá de sus aliados en el moderado Partido Komeito, que aumentó sus escaños de 31 a 35, y desde el interior del propio PLD, si la economía flaquea.
El precio promedio de las acciones en el índice Nikkei cerró con una merma de 1,57 por ciento ante los ampliamente esperados resultados de los comicios y tras el débil rendimiento del mercado bursátil estadounidense el viernes.
El primer ministro japonés, Shinzo Abe, dejó de lado el lunes las sugerencias de que una débil participación empañó la victoria de su coalición en unos comicios el domingo y prometió ceñirse a políticas económicas reflacionarias, abordar dolorosas reformas estructurales y buscar garantías para la seguridad.
Aunque las dudas persistían sobre si Abe, que ahora tiene la oportunidad de convertirse en un excepcional y duradero líder en Japón, puede dirigir un crecimiento sostenible con su estrategia "Abenomics" de una política monetaria hiper flexible, gasto gubernamental y promesas de liberalización.
"Escuchamos la voz del pueblo diciendo 'sigan adelante con Abenomics'", dijo Abe en una conferencia de prensa en la oficina principal de su gobernante Partido Liberal Democrático (PLD), adornado con carteles gigantes del premier y su lema de campaña: "Este es el único camino".
"Quiero implementar las 'Tres Flechas' con audacia", dijo Abe, al agregar que compilaría medidas de estímulo antes de fin de año y pediría a líderes empresariales elevar los salarios, que no han seguido el ritmo en medio de alzas en los precios al consumidor", agregó.
El PLD de Abe y su socio menor, el Partido Komeito, lograron 326 escaños en las elecciones del domingo, lo suficiente como para mantener su "súper-mayoría" de dos tercios.
El resultado se mantuvo sin cambios respecto a un cálculo de la coalición antes de los comicios, aunque el número de escaños del PLD cayó levemente a 291, frente a 295.
Muchos votantes, que dudan tanto de la estrategia de Abe para poner fin a la deflación y generar crecimiento como de la capacidad de la oposición para idear un mejor plan, se quedaron en casa.
La participación de los votantes fue estimada en un mínimo histórico de 53,3 por ciento, muy por debajo del 59,3 por ciento de las elecciones de 2012, en las que Abe retornó al poder para iniciar un segundo mandato, en medio de promesas de reactivar una economía afectada por la deflación y el envejecimiento de la población.
En una señal de fragilidad del Gobierno de Abe, el PLD obtuvo el 75 por ciento de los escaños en distritos de un solo miembro que representan 295 asientos en la Cámara baja con apenas un 48 por ciento de los votos, mostraron datos del diario metropolitano Tokyo Shimbun.
Pero con la mayoría de la oposición aún débil, cualquier resistencia a las políticas de Abe seguramente provendrá de sus aliados en el moderado Partido Komeito, que aumentó sus escaños de 31 a 35, y desde el interior del propio PLD, si la economía flaquea.
El precio promedio de las acciones en el índice Nikkei cerró con una merma de 1,57 por ciento ante los ampliamente esperados resultados de los comicios y tras el débil rendimiento del mercado bursátil estadounidense el viernes.
