Cameron deja conversaciones de Belfast sin acuerdo
Belfast, AP
El primer ministro británico David Cameron abandonó las conversaciones de paz de Irlanda del Norte tras realizar una oferta condicionada de dinero extra al gobierno católico protestante de la región, que los líderes locales tachándola de falsa.
La temprana marcha de Cameron de la mesa de negociaciones el viernes acabó con las esperanzas de llegar a un acuerdo más amplio para mantener el reparto del poder, el principal logro del acuerdo de paz de Irlanda del Norte de 1998.
Cameron calificó el diálogo durante la noche con los líderes rivales protestantes y católicos como productivo. Dijo que ofreció un 1.000 millones de libras extra (1.600 millones de dólares) a condición de que se resuelvan varios otros conflictos que socavan el gobierno compuesto por cinco partidos.
El líder del Sinn Fein, Gerry Adams, cuyo partido nacionalista representa la mayoría de los católicos, calificó la intervención de Cameron de irresponsable y poco profesional. Políticos protestantes culparon tanto al Sinn Fein como Cameron de la interrupción.
El primer ministro británico David Cameron abandonó las conversaciones de paz de Irlanda del Norte tras realizar una oferta condicionada de dinero extra al gobierno católico protestante de la región, que los líderes locales tachándola de falsa.
La temprana marcha de Cameron de la mesa de negociaciones el viernes acabó con las esperanzas de llegar a un acuerdo más amplio para mantener el reparto del poder, el principal logro del acuerdo de paz de Irlanda del Norte de 1998.
Cameron calificó el diálogo durante la noche con los líderes rivales protestantes y católicos como productivo. Dijo que ofreció un 1.000 millones de libras extra (1.600 millones de dólares) a condición de que se resuelvan varios otros conflictos que socavan el gobierno compuesto por cinco partidos.
El líder del Sinn Fein, Gerry Adams, cuyo partido nacionalista representa la mayoría de los católicos, calificó la intervención de Cameron de irresponsable y poco profesional. Políticos protestantes culparon tanto al Sinn Fein como Cameron de la interrupción.